Lewis Hamilton analiza involucrarse en el rescate de uno de los equipos de KTM en MotoGP
Una gigantesca crisis estalló y el anuncio de las fórmulas paliativas proyecta un futuro incierto en KTM. La factoría austríaca, dominante en el historial de Rally Dakar y dueña de estructuras oficiales en MotoGP, se declaró en quiebra y entró en concursos de acreedores, y el programa de reestructuración que pretende poner en marcha suma caos, con posibles despidos a 750 trabajadores. Los empleados fueron notificados de que no cobrarán el sueldo de noviembre y tampoco recibirán pagos extraordinarios de Navidad.
El hundimiento es tan profundo que el único dinero que percibirán los asalariados provendrá del fondo de compensación de insolvencia, porque, aparentemente, la empresa no está en condiciones de hacer las transferencias prometidas. Con este panorama, la promesa de desembolsar 90% del total de los salarios para evitar demandas no se cumplió y el escenario es tambaleante por la cifra de la deuda: 3000 millones de euros.
Los acreedores presionan para que el equipo de MotoGP abandone la competición, aunque el director de KTM, Pit Beirer, desestimó la acción y confirmó las presencias de las cuatro motos en 2025. Maverick Viñales, Enea Bastianini, Brad Binder y Pedro Acosta son los jinetes que esperan ansiosos la resolución de la crisis, que se daría recién a mediados de febrero, pocos días antes del campeonato. El calendario tendrá su primer episodio entre el 28 de febrero y el 2 de marzo en el circuito internacional de Buriram, Tailandia; dos semanas más tarde la caravana visitará el autódromo de Termas de Río Hondo, Argentina.
A pesar de la confirmación del póquer de pilotos, la fábrica congeló el desarrollo del modelo RC16. Por el momento, en Dorna, la empresa que regentea los derechos del mundial de motociclismo, están en estado de alerta ante la posibilidad de un nuevo cimbronazo que afecte el futuro de la categoría reina. “Seguiremos compitiendo”, aseveró Beirer, que se esperanza con que el desembarco de Liberty Media, la comercializadora de la Fórmula 1, despierte el interés de nuevos capitalistas. “Estamos abiertos a patrocinadores y a inversores”, apuntó el alemán, expiloto de KTM y que participó en el Mundial de Motocross desde 1989 hasta 2003.
Entre los posibles aportantes se asoman la compañía china CFMoto, que ya tiene una alianza con KTM, y el piloto Lewis Hamilton. “No es ningún secreto que está interesado en MotoGP y está pensando en tener su propio equipo. Puedo decir que hubo contactos con representantes suyos y las conversaciones que tuvimos fueron muy interesantes”, anunció Beirer sobre el séptuple campeón de Fórmula 1, en diálogo con SpeedWeek. El atractivo de la categoría para Hamilton no es novedoso, y según la prensa española, en caso de intervenir, se haría cargo de una de las dos estructuras que presentará KTM en 2025.
Medio año atrás se filtró que el británico que el próximo año desembarcará en Ferrari –tras 12 temporadas en Mercedes– intentó crear un equipo propio y hasta se interiorizó en el valor del Gresini Racing, pero las negociaciones no avanzaron: Nadia Padovani, la viuda de Fausto Gresini y actual directora de la escudería, no estaba convencida de desentenderse de la creación de su difunto hombre. Ésta no es la primera vez que Hamilton busca experiencias por fuera de la Fórmula 1: fue propietario de X44, estructura que competía en la Extreme E, y parte del grupo que tomó el control de Denver Broncos, franquicia de fútbol americano.
“Levantarse más fuerte: KTM está acá para quedarse”
Para avanzar en un posible acuerdo, el primer paso debería ser zanjar la problemática que generaría el patrocinio de dos marcas competidoras entre sí en el mercado de bebidas energizantes. Hamilton es una de las caras más destacadas de Monster Energy, mientras la relación entre KTM y Red Bull está sostenida por los éxitos durante años. Beirer desestima que ese punto resulte una situación de conflcito y que impida entablar negociaciones. “Un inversor es diferente a un patrocinador. Trabajamos con nuestros patrocinadores en asociaciones muy sólidas. Cuando hay en la mesa socios que ofrecen dinero para un proyecto de excelencia, todas las partes se involucran. Y cuando socios fuertes se sientan a la mesa y piensan juntos, surgen soluciones. Eso debería ser positivo”, opinó el director de KTM, que necesita salidas urgentes para sofocar la crisis. El arribo inmediato de inversores para el proyecto de MotoGP tiene dos aristas: reiniciar el desarrollo del modelo para el próximo curso y trabajar para 2027, cuando la categoría será regida por un nuevo reglamento de motores.
Líder en ventas en Europa, KTM afronta una situación económico-financiera crítica. Además, el gigante arrastra a otras marcas, como Husqvarna, GasGas y MV Augusta. La fábrica dice contar con un stock de 100.000 motos para vender y que no volverá a fabricar hasta marzo de 2025. Se trata de un escenario de conflicto y caótico, del que desea escapar con la ayuda de una leyenda del automovilismo mundial para resguardar la participación en MotoGP. Lewis Hamilton quizás sea la llave que genere un impacto entre múltiples inversores que arriesguen a tomar una deuda de 3000 millones de euros.