Julio Furch, el goleador que rompió con la sequía del Atlas y era campeón por donde pisaba

Julio Furch se despidió del futbol mexicano luego de nueve años y medio en los que se encargó de dejar una marca imborrable. En su nueva etapa, Julio viajará de nuevo a Sudamérica para ser parte del ataque del Santos de Brasil, pero no hay duda de que sus mejores años los vivió dentro de la Liga MX. En los tres equipos en los que militó logró campeonatos con su propio estilo y grandes cuotas goleadoras. En los 327 encuentros que disputó en el máximo circuito mexicano, fueron contadas las ocasiones en las que se le vio en el banco de suplentes, pues no había quien pudiera suplirlo.

Su primera aventura fue en el Puerto de Veracruz, donde tuvo que ponerse en la piel de un escualo para empezar a hacerse de un nombre propio en el futbol mexicano. Desde el primer torneo comenzó a pelear por el campeonato individual de goleo, aunque nunca pudo hacerse de esa distinción. A pesar de ello, se convirtió en el hombre más importante del Tibu cuando el equipo llegó a ser semifinalista en el Clausura 2015 y era cuestión de tiempo para que empezara a dar un impacto mayor. Un año más tarde, Veracruz consiguió levantar el título de la Copa MX. Aquella ocasión, los jugadores fueron adorados una última vez por su afición, los días oscuros del club empezaron después.

Un torneo después de aquel título que parecía imposible, el delantero argentino partió al Santos Laguna. Las mejores actuaciones de Julito fueron en La Comarca, pues fue donde estuvo durante cuatro temporadas y donde volvió a cumplir su propia regla de convertirse en campeón. El título le llegó en el Clausura 2018 ante Toluca. En la ida, puso el primer nicho de ese campeonato y Santos consiguió la victoria en su propio terreno; la vuelta fue en la cancha del Nemesio Diez, y con la Bombonera convertida en un infierno, Furch se convirtió en el santo que concretó la victoria de los laguneros con otro tanto. En 163 partidos que se enfundó la camiseta de los Guerreros anotó en 69 ocasiones y sirvió 21 asistencias.

Había unas cuantas noches mágicas esperando a Furch, pero esta vez estaban a varios kilómetros de la Comarca Lagunera. Para el Clausura 2021, el goleador albiceleste se vistió con la playera de los rojinegros del Atlas. Había una pesada loza por cargar, eran 70 años sin poder coronarse campeones y la fórmula del éxito tenía que empezar a funcionar a la brevedad. Era un equipo recién adquirido por Grupo Olergi y el titulo se había convertido en el objetivo principal. Después de seis meses en que todo el plantel terminó de acoplarse, “El emperador del gol” volvió a ser el encargado de anotar para que su equipo se consagrara como campeón.

“Julio Furch se perfila de derecha, sobre sus espaldas la gran responsabilidad de acabar con la maldición. El delantero argentino apareció en momentos importantes… Gol, gol de Furch, gol de Furch. Los rojinegros del Atlas se convierten en campeones del futbol mexicano”, narró David Medrano cuando el cuadro de los Zorros rompió la larga racha de siete décadas sin coronarse.

La dupla que Furch conformó con Julián Quiñones fue lo que desató el máximo potencial que ambos tenían para consagrar al equipo bicampeón. En la historia de los torneos cortos, solo tres clubes han podido conseguir dicha distinción, pero las armas más letales que habían en el futbol mexicano en ese momento lograron una tercera estrella para el equipo de la perla tapatía.

Después de 127 anotaciones que consiguió en el futbol mexicano, Julio Furch se marcha a Brasil para seguir cosechando lo que en México perfeccionó. En la era moderna de la Liga MX, son pocos los futbolistas extranjeros que sobrepasan las 100 anotaciones y el Emperador fue uno de ellos, la partida le costará a Atlas, pero tiene la convicción de que dejó su nombre escrito con letras doradas.

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