Los jugadores del Racing de Santander mantienen su amenaza de boicot

MADRID (Reuters) - Los jugadores del Racing de Santander, de Segunda B, se mantienen firmes ante la amenaza de boicotear el jueves el partido de vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey, que disputarán en casa ante la Real Sociedad, si el presidente Ángel Lavín y su junta no dimiten. El equipo completo y el cuerpo técnico lanzaron su amenaza el lunes en protesta por las nóminas pendientes de pago y la manera en la que Lavín y su impopular equipo están gestionando el endeudado club. El Santander perdió 3-1 en la ida en el estadio de Anoeta y sus posibilidades de convertirse en uno de los semifinalistas y medirse al Barcelona son remotas. "La plantilla ha decidido algo el pasado lunes que lo han transmitido públicamente y siguen pensando exactamente igual", dijo a los periodistas Luis Rubiales, el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), después de una reunión con los jugadores el jueves. "Si el consejo actual no ha dimitido a la hora del partido no van a jugar", añadió. Rubiales avisó a los jugadores de que si se negaban a jugar podrían afrontar consecuencias legales, pero dijo que contaban con todo el apoyo de la asociación. "Los jugadores tienen legitimidad más que de sobra, no tengo calificativos para describir todo lo que están aguantando y cómo este inepto Consejo les ha llevado a la situación en la que están". Lavín no ha mostrado ninguna intención de aceptar las demandas de los jugadores y, según publicaron medios locales, ha dicho que el jueves pretendía ir al palco para ver el partido. "Intentaremos buscar un consenso entre todas las partes para que el partido pueda seguir adelante", añadió. El Racing está pasando tiempos complicados desde que el empresario indio Ahsan Ali Syed se hizo con el equipo en enero de 2011. Ali Syed prometió invertir en el equipo y dijo que el Racing se convertiría en el tercer equipo de España, después de Real Madrid y Barcelona. Sin embargo, descendieron al final de la temporada 2011-12 después de acabar a 10 puntos del penúltimo de la tabla. Aly Syed desapareció y la crisis del club se hizo más profunda al descender a Segunda B la temporada pasada. El futuro parece desalentador después de que en octubre fracasase un plan de incremento de capital para salvar al club de la ruina y el equipo se mantuviera en concurso de acreedores.