Israel y Hamas pactarían una tregua de cinco días con liberación de rehenes, según The Washington Post
Israel y Hamas están por acordar una tregua de cinco días en la guerra que implicaría que el grupo palestino libere a unos 50 rehenes, según afirmó este sábado The Washington Post. De las 239 personas cautivas, 21 son argentinas. Estados Unidos fue el país que medió entre ambas partes, según subrayó el medio estadounidense.
En caso de producirse, sería la primera pausa en el conflicto que comenzó el 7 de octubre pasado con el ataque de Hamas a Israel y la posterior respuesta del gobierno que lidera Benjamin Netanyahu.
Las personas cautivas liberadas serían, principalmente, niños y mujeres. “Salvo contratiempos de último momento la liberación de rehenes podría comenzar en los próximos días”, remarcó The Washington Post.
El diario estadounidense aseguró que los términos del acuerdo están plasmados en seis hojas. Hamas liberará los alrededor de 50 rehenes en grupos distintos grupos cada 24 horas. El acuerdo, además, permitirá la entrada de agua, alimentos, combustible y asistencia humanitaria a Gaza.
La hoja de ruta y el eventual pacto se elaboró durante semanas en Doha, la capital de Qatar, entre Israel, Estados Unidos y Hamas, grupo que fue representado por mediadores qataríes, según el medio estadounidense.
En declaraciones públicas, Israel se mantiene inflexible, aunque por lo bajo reconoce la presión, según The Washington Post. La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) votó el pasado 27 de octubre una resolución en la que le pidió a Israel una tregua humanitaria. La decisión tuvo 120 votos a favor, incluido el de la Argentina, 45 abstenciones y solo 15 votos negativos.
Días después el Consejo de Seguridad de la ONU con 12 votos favorables y solo 3 abstenciones también solicitó “pausas y corredores humanitarios urgentes y ampliados” en toda la Franja de Gaza.
Netanyahu reiteró esta semana una declaración que realizó poco después del ataque de Hamas en territorio israelí el 7 de octubre al volver a afirmar que “hombre de Hamas es hombre muerto”, pero este viernes el jefe del Consejo de Seguridad Nacional de Israel, Tzachi Hanegbi, sostuvo ante periodistas que el comité de guerra había abierto la posibilidad de una tregua. Hanegbi condicionó el pacto a “una liberación masiva de rehenes” y también remarcó que la tregua solo podría ser “limitada y breve”.
El gobierno israelí se encuentra, por un lado, con familiares de las personas cautivas que le piden que negocie con el grupo palestino, apoyadas por una parte importante de la población y, por el otro, con quienes defienden una posición de inflexibilidad total con Hamas. Este último sector, también muy numeroso, es en el que Netanyahu se recostó en los últimos años para conseguir apoyos e incluso formar gobierno.
Este sábado culminó una marcha desde Tel Aviv hacia Jerusalén liderada por familiares de rehenes en la que miles de personas exigieron al gobierno que actúe para liberarlos, incluso si eso implica una negociación con Hamas. La marcha entre ambas ciudades duró cinco días y concentró la atención en Israel.
The Washington Post recordó que, tras algunas dudas iniciales, el gobierno que dirige Joe Biden respalda una tregua en el combate. Las recientes visitas de Antony Blinken, el secretario de Estado de EE.UU., y otros altos funcionarios a Israel fueron para solicitarle a Netanyahu que ceda y, también, para hacerle ver que pierde la disputa narrativa a nivel global mientras más palestinos mueren al continuar los ataques de Israel.
EE.UU. tiene como prioridad la liberación de los diez secuestrados estadounidenses. “Creo que necesitamos una pausa”, expresó Biden hace dos semanas. Y puntualizó que “una pausa significa tiempo para sacar a los prisioneros”. El jefe del gobierno de EE.UU. insistió hace unos días en el marco de su encuentro con el presidente chino, Xi Jinping, la importancia de “tener un período de tiempo en el que haya una pausa lo suficientemente larga” para que los rehenes sean liberados, al tiempo que también aseguró que tiene en mente todos los días a los cautivos.