Yahoo Noticias Henry Cavill le pone fin a la temida "maldición de Superman" tras su despido
Henry Cavill, el último Superman de DC Comics, ya no llevará el traje del “hombre de acero”, según informó la compañía Warner Bros. En un principio los fanáticos temieron por la famosa “maldición” que se asocia a quienes interpretaron el personaje, pero esta vez todo parece indicar que el actor salió airoso tras su despido.
“La capa está en el ropero”, le decía Cavill a LA NACION en una entrevista en diciembre de 2019, cuando ya se rumoreaba que el fin de su participación como superhéroe se avecinaba. Tres películas más tarde vistiendo la “S” en su pecho, la noticia fue confirmada, y aunque todavía persisten algunos rumores sobre posibles apariciones en algún crossover, no habrá otro film con el actor como protagonista.
La maldición de Superman
A largo de la historia se dice que todos los actores que interpretaron a Superman sufrieron alguna tragedia, ya sea en su vida personal o en su carrera profesional. Entre los casos más resonantes se encuentra George Reeves, quien interpretó al personaje en TV entre 1952 y 1958 y murió a los 45 años poco después en circunstancias misteriosas.
También llama la atención el vuelco en la vida de Christopher Reeve, quien luego de interpretar al “Hombre de acero” en cuatro películas, quedó cuadripléjico en 1995 al sufrir una caída de su caballo y murió por un ataque cardíaco nueve años más tarde a los 52 años.
Así fue como se asoció un halo maldito al personaje de cómic y a la mayoría de actores que se pusieron el traje azul y rojo les ha costado conseguir trabajo después de ponerse en la piel del superhéroe. Sin embargo, el caso de Cavill es totalmente opuesto, ya que tuvo una lluvia de propuestas laborales tras hacerse público su despido.
Recientemente, el protagonista de The Witcher y La Liga de la justicia se sumará a otra reconocida saga: será parte de un nuevo film de Highlander. Aunque todavía se desconoce cuál será su rol en la película, este es solo uno de los proyectos que tiene en mente, y parece haber ahuyentado cualquier fantasma del pasado.
