Habitante de Iztapalapa cargó una cruz de 50 kilos por gusto

CIUDAD DE MÉXICO, marzo 29 (EL UNIVERSAL).- "Devoción y gusto", fueron las palabras de Eduardo Ramírez, un habitante del barrio de Santa Bárbara, que llegó hasta el Cerro de la Estrella, en Iztapalapa, únicamente por su fe.

Cansado y acalorado por la larga caminata que Eduardo ofreció a su devoción, dijo que la cruz que cargó tiene una dimensión de seis metros de largo, por tres de brazo, y tuvo un costo de 3 mil pesos.

Carlos, de 19 años, fue desde Ecatepec, Estado de México, hasta Iztapalapa, para realizar la caminata del Viacrucis únicamente por fe y devoción.

"Así normal, por fe", dijo Carlos, quien llegó a Iztapalapa desde un día antes, donde se quedó en la casa de uno de sus tíos, para prepararse e iniciar la caminata desde las 8 de la mañana.

Carlos cargó su cruz, con un peso de 50 kilos y una dimensión de tres metros y medio por tres metros, para pedir que su familia esté bien, así como sus seres queridos.