El golazo de Lionel Messi para la victoria de Inter Miami contra New York en su estreno en la Major League Soccer

Rodeado por cuatro oponentes, Lionel Messi inventa un pase a un compañero que no está en el cuadro y ni siquiera está en el área: una genialidad conceptual y de ejecución del 10 de Inter Miami contra New York en su debut en la MLS.
Rodeado por cuatro oponentes, Lionel Messi inventa un pase a un compañero que no está en el cuadro y ni siquiera está en el área: una genialidad conceptual y de ejecución del 10 de Inter Miami contra New York en su debut en la MLS.

Que no es humano, que no es serio. Risas. Los relatores del fútbol de Estados Unidos tienen diversas reacciones por el asombro que les causa Lionel Messi, que sigue haciendo goles en casi todos los partidos. Es más: que sigue maravillando con lo que hace para conseguir esos goles.

Ahora le tocó a New York Red Bull padecerlo, en el estreno del argentino en la Major League Soccer. Leo jugó en Nueva Jersey, a 1715 kilómetros de Fort Lauderdale, donde Inter Miami actúa como local. Y el 10 no pareció visitante: había innumerables camisetas celestes y blancas, y rosas, en las tribunas.

La parte sencilla: Lionel Messi acaba de tocar sin marca ante el arco casi libre y consigue el 2-0 para Inter Miami sobre New York Red Bull a los 43 minutos de la segunda etapa, en su estreno en la MLS.
La parte sencilla: Lionel Messi acaba de tocar sin marca ante el arco casi libre y consigue el 2-0 para Inter Miami sobre New York Red Bull a los 43 minutos de la segunda etapa, en su estreno en la MLS. - Créditos: @Eduardo Munoz Alvarez

De hinchas quizás un poco decepcionados por que el rosarino estuviera en el banco de relevos. Sólo por una cuestión de descanso: Lionel había sido titular siempre salvo en el primer partido. Éste era el noveno en apenas 37 días, un ritmo febril. Por eso la suplencia. Pero para Messi empezar en el banco y jugar sólo un rato no es un problema. No le gusta, pero eso no conspira contra su brillo en Estados Unidos.

Al Leo Messi norteamericano le basta un rato para maravillar. Es cierto que los adversarios se asocian, como partenaires en defensas estáticas o ingenuas, pero también que nadie más hace lo que el zurdo. Nadie puede realizarlo. Como esa delicia que pergeñó en el área de New York cuando agonizaba el partido de la 28ª fecha de la MLS.

El gol de Messi, con la maravilla en la gestación

El capitán del seleccionado argentino recibió un balón aéreo apenas pasado el borde del área. Enganchó, porque su visión periférica lo alertó de que un defensor llegaba. Cuando se le acumulaban rivales delante y se sumaba otro, tuvo tanto tiempo como astucia para filtrar la pelota en profundidad. Una pase que nadie vio. Que quizás él ni siquiera pensó y solamente ejecutó por instinto.

Hizo transitar suave la esfera sobre el área grande, y tocar un vértice de la chica, donde nadie la esperaba, para que del otro lado, el derecho, penetrara Benjamín Cremaschi, que estaba lejos. El chico estadounidense hijo de argentinos corrió, llego a tiempo al sutil pase de rastrón del campeón mundial y devolvió gentil, correspondiente, eficaz, con una asistencia paralela al fondo de la cancha. Y por ahí entraba Messi.

Otra defensa vulnerada por Messi, la décima en 11 partidos, la primera en un partido de la Major League Soccer.
Otra defensa vulnerada por Messi, la décima en 11 partidos, la primera en un partido de la Major League Soccer. - Créditos: @Eduardo Munoz Alvarez

Solo, inadvertido, fuera de los radares, fácil. Había picado cuando la retaguardia del equipo local apenas atinaba a mirar. Por el centro del área, vacío, con un arquero desguarnecido, Lionel hizo cuanto quiso. Toque a la red. Ésa fue la parte sencilla. La maravilla había estado en la habilitación a Cremaschi, imprevisible para humanos, y un poco también en el enganche previo. Era el 2-0 para Inter Miami, a los 43 minutos del segundo tiempo. Empieza a ser costumbre para el rosarino aparecer decisivamente en el final de los encuentros cerrados. Y así disfruta más.

Como se disfruta la escena en cámara lenta. Al ex futbolista de Barcelona y Paris Saint-Germain lo siguen innumerables lentes en cada partido, que luego permiten observar detenidamente sus movimientos desde otros planos. Como uno con el que se lo tomó desde atrás de la línea de fondo, que con ritmo reducido de video deja apreciar no solamente el dominio de pelota del 10, sino también su mapa mental, cuán claro tiene qué harán los defensores contrarios y qué pueden hacer sus compañeros. A lo que él piensa con la velocidad de la luz –o ni siquiera piensa sino que le sale por reflejo– se puede admirarlo en detalle. Concluir que se es crack no sólo por la ejecución técnica y el dominio del cuerpo.

La sutileza de Leo, en cámara lenta

Otro disfrute fue el de muchos hinchas, argentinos y no argentinos, en Times Square, el centro del planeta económico, ante pantallas no grandes sino monumentales. Hubo cientos en la icónica confluencia de esquinas de Nueva York, pero aunque se trataba de la ciudad del conjunto adversario vulnerado por Leo, el festejo fue amplio. Eso genera Messi en Estados Unidos. Y es apenas el comienzo de su aventura en la tierra del Tío Sam.

La celebración en Times Square