Francisco Comesaña y sus días de novela en Wimbledon: todo lo que puede dejar un torneo inolvidable

Francisco Comesaña, al ataque en uno de sus partidos en Wimbledon; el marplatense es una de las revelaciones en el All England
Francisco Comesaña, al ataque en uno de sus partidos en Wimbledon; el marplatense es una de las revelaciones en el All England - Créditos: @Alberto Pezzali

Hasta hace unos días, Francisco Comesaña estaba fuera del radar del circuito mayor del tenis. El marplatense ingresó en Wimbledon de manera directa en el cuadro principal, justo cuando había alcanzado su mejor ranking (87°). Luego, decayó posiciones -venía de sufrir tres derrotas en primeras ruedas-, y el estreno en el All England lo encontró como el 122° de la clasificación semanal de la ATP. Luego, el asombro: triunfo sobre el ruso Andrey Rublev, número 6 del mundo, y el jueves, el avance a la tercera rueda al superar al australiano Adam Walton (101°) en cinco parciales.

La actuación del marplatense sobre el césped inglés no pasó inadvertida, sobre todo por tratarse de dos victorias en un certamen escaso de alegrías para los jugadores de nuestro país, desacostumbrados a un tipo de terreno que exige importantes cambios en movimientos y lectura del juego, aun cuando el pasto se ve más lento que en otros tiempos. El sitio de Wimbledon destacó algunos datos sobre la actuación de Comesaña frente a Walton, y elogió los 68 winners alcanzados, los 19 aces, y la devolución, que incluyó 61 puntos ganados sobre el saque del australiano. Es el primer argentino que gana más de un partido en su debut en Wimbledon desde David Nalbandian, en 2002, año en el que jugador de Unquillo alcanzó una histórica final.

Una espectacular volea de Francisco Comesaña, en el encuentro ante Andrey Rublev
Una espectacular volea de Francisco Comesaña, en el encuentro ante Andrey Rublev

Ya instalado en la rueda de los 32 mejores del torneo, Comesaña, que es entrenado por Sebastián Gutiérrez, se enfrentará con el italiano Lorenzo Musetti, que evitó un duelo entre jugadores nacidos en la costa argentina al derrotar a Luciano Darderi, procedente de Villa Gesell y que adoptó la ciudadanía peninsular. El marplatense, de 23 años, prácticamente se aseguró el regreso al Top 100, ya que en este momento ocupa el 100° puesto de la clasificación en vivo, luego de sumar 83 puntos. En lo económico, se aseguró un premio de 143.000 libras esterlinas (cerca de 182.000 dólares); en caso de pasar a octavos, recibirá unos 287.000 dólares. Hasta antes de este torneo, acumulaba en toda su carrera ingresos oficiales por US$338.337.

La recompensa, en cuanto al ranking, puede ser importante si gana el próximo duelo: el paso a los octavos de final le puede redituar 100 puntos más. Es una cifra que puede parecer escasa para los Top 10, pero que en ese lugar del ranking muchas veces define en qué torneos inscribirse, y la posibilidad de entrar como preclasificado a un torneo, entre otros detalles. De ganar, Comesaña saltaría al puesto 82°.

Desde luego, no será nada sencillo, porque enfrente tendrá a un rival instalado hace rato en el Top 30 -Musetti es el 24° del mundo en este momento- y que tiene más experiencia en el césped y en torneos de Grand Slam. En muchos aspectos, el joven argentino recorre un mundo nuevo, inexplorado. “Me encanta ver jugar a Sinner y a Alcaraz, son increíbles. Los he visto aquí, en Wimbledon, y los veo en las canchas de entrenamiento, y es genial”, contó sobre la cercanía con las grandes estrellas de las raquetas. Y luego asegura: “Cuando no juego al tenis, veo partidos. Los domingos, si hay alguna final ATP en algún lado, me levanto y la veo. El tenis es mi vida, así que es genial estar aquí”.

El revés de dos manos de Comesaña
El revés de dos manos de Comesaña - Créditos: @HENRY NICHOLLS

En todo caso, es probable que después de este Wimbledon inolvidable, Comesaña tenga que regresar por un tiempo a los challengers, el segundo escalón del circuito, en el que habitualmente actúan los que están por debajo de los 80/90 primeros de la clasificación. Este año, el marplatense alternó entre el circuito ATP -disputó ocho torneos en este nivel- y los challengers, también con ocho participaciones. Por una lesión, se quedó con las ganas de jugar en Roland Garros. Su ascenso al tour principal es algo reciente: jugó su primer partido de un main draw en febrero pasado, al caer frente a su compatriota Thiago Tirante en la primera rueda del ATP de Córdoba; pasó la qualy en Río de Janeiro, pero perdió en el debut contra Francisco Cerúndolo, y lo mismo sucedió una semana después, en Santiago de Chile, donde entró como lucky loser, pero no pudo con el peruano Juan Pablo Varillas. La semana pasada debutó en césped en la clasificación del torneo de Eastbourne, donde perdió con el inglés Charles Broom, 245° del mundo, pero un rival con -obviamente- más conocimiento del verde tapiz.

Del resultado del duelo contra Musetti, queda dicho, pueden surgir cambios en el calendario de Comesaña. Si bien el Tiburón ya está anotado en otros torneos, la hoja de ruta puede cambiar más adelante, dependiendo del ranking con el que finalice su participación en el All England. Quedar cerca del puesto 80° le permitiría ingresar de manera directa a varios ATP de la serie 250; no así en los torneos 500 o 1000. En el caso de seguir cerca del centésimo escalón, podrá entrar a algunas clasificaciones y continuar en la gira de challengers, con varios torneos sobre polvo de ladrillo en las próximas semanas. Y algo más: lo que pueda alcanzar antes del 15 de julio también puede ser decisivo para poder ingresar directamente en el cuadro principal del US Open, el último Grand Slam de la temporada. A Flushing Meadows intentó entrar en 2022, pero perdió en la primera ronda de la qualy; tampoco pudo sortear la previa en 2023, cuando cayó ante el japonés Taro Daniel en la última rueda.

Una postal de hace unas semanas: Francisco Comesaña, campeón del Challenger de Oeiras, en Portugal, junto a su entrenador, Sebastián Gutiérrez
Una postal de hace unas semanas: Francisco Comesaña, campeón del Challenger de Oeiras, en Portugal, junto a su entrenador, Sebastián Gutiérrez

“Este Wimbledon es el torneo de mis sueños. No quería conformarme con haberle ganado a Rublev, fui por más y estoy muy feliz de estar en tercera ronda”, expresó Comesaña en declaraciones a ESPN. “La idea era disfrutar, a pesar de los nervios, y poder sacar el partido en el match tie-break me da mucho orgullo, porque también estaba complicado con el viento en los momentos de tensión”, explicó el marplatense, que se permitió bromear por su avance en el césped inglés a pesar de no tener experiencia en esta superficie: “He jugado sólo dos partidos en pasto, pero quizás soy un especialista en hierba, ya que tengo un récord de 100 por ciento en Wimbledon, ja. He jugado la mayoría de mis partidos en polvo de ladrillo, pero es increíble estar aquí en Wimbledon. Ahora veremos qué pasa”.