Diez estrellas femeninas llamadas a brillar en París

Madrid, 17 jul (EFE).- Diez estrellas femeninas destinadas a brillar en los Juegos Oímpicos de París que arrancarán el próximo 26 de julio.

Simone Biles (Estados Unidos/Gimnasia)

Simone Biles no pudo lograr el oro al que parecía destinada en los Juegos Olímpicos de Tokio, pero consiguió algo mucho más importante, poner el foco sobre los problemas de salud mental que puede generar el exceso de presión en los deportistas de alto nivel.

Esos problemas mantuvieron a Biles, la gimnasta con más medallas en la historia de los Mundiales, alejada dos años alejada de la competición, a la que regresó en 2023 con una impresionante actuación en el Campeonato del Mundo de Amberes en el que conquistó cuatro oros y una plata, que la confirman como la gran favorita en los Juegos de París

Faith Kipyegon (Kenia/Atletismo)

La posibilidad de encadenar su tercer título consecutivo de campeona olímpica de los 1.500 metros, algo nunca logrado por ninguna atleta, seria motivo suficiente para no perder de vista la actuación de la keniana Faith Kipyegon en los Juegos Olímpicos de París.

Pero Kipyegon, que el pasado año batió los récords del mundo de los 1.500, la milla y los 5.000, buscará el más difícil todavía y tratará de repetir en la capital francesa el doblete que logro en los Mundiales de Budapest 2023 en los que la keniana se colgó el oro en los 1.500 y los 5.000 metros.

Katie Ledecky (Estados Unidos/Natación)

Reina indiscutible de las pruebas de fondo la estadounidense, Katie Ledecky tratará de convertirse en París en la nadadora con más medallas de oro en la historia de los Juegos Olímpicos.

Ledecky, que se colgó la primera de sus siete medallas de oro con apenas 15 años en los Juegos de Londres 2012, dispondrá de cuatro oportunidades en París -400, 800, 1.500 y 4x200- para superar los ocho metales dorados que suma su compatriota Jenny Thompson, ya que todo hace indicar que la norteamericana renunciará a competir en los 200 libre, prueba para la que también logró el billete olímpico.

Olga Kharlan (Ucrania/Esgrima)

Ganadora de cuatro medallas olímpicas, la tiradora ucraniana Olga Kharlan acaparó todos los focos el pasado mes de julio cuando se negó a saludar a la rusa Anna Smirnova tras el combate que ambas disputaron en los Mundiales celebrados en la ciudad italiana de Milán.

Un acto que condenó a Kharlan, cuatro veces campeona del mundo de sable, a una descalificación que complicaba la clasificación olímpica de la ucraniana, que un día más tarde el presidente del COI, Thomas Bach, la garantizó en un gesto "excepcional" en la historia olímpica.

Shelly-Ann Fraser-Pryce (Jamaica/Atletismo)

La jamaicana Shelly-Ann Fraser-Pryce, campeona olímpica de los 100 metros lisos en Pekín 2008 y Londres 2012, tratará de poner fin a su carrera deportiva en los Juegos de París con una nueva medalla, que ratifique su condición como una de las mejores, si no la mejor velocista de todos los tiempos.

Una tarea nada sencilla para Fraser-Pryce que a sus 37 años tendrá que pelear con atletas de la talla de la estadounidense Sha'Carri Richardson o su compatriota Shericka Jackson por un podio del que este "cohete de bolsillo" no se ha bajado en ninguna de sus cinco participaciones olímpicas.

Clarisse Agbegnenou (Francia/Judo)

"Le dije a mi hija que le iba a traer la medalla y que se la iba a poner al cuello", desveló la judoca francesa Clarisse Agbegnenou tras coronarse el pasado mes de mayo por sexta vez en su carrera campeona del mundo de la categoría de hasta 63 kilos.

Un título que llegó apenas once meses después de dar a luz a su primera hija, Athéna, a la que Agbegnenou, de 31 años, sueña con ver aplaudiéndole en el Champ de Mars Arena con una nueva medalla de oro olímpica, tras las dos, una en la categoría individual y otra con el equipo mixto, que conquistó en los Juegos de Tokio y demostrar que se puede compaginar la maternidad con el deporte de alto rendimiento.

Ariarne Titmus (Australia/Natación)

Punta de lanza de la sensacional generación de nadadoras australianas que se atrevió a cuestionar la hegemonía estadounidense en los pasados Juegos de Tokio, Ariarne Titmus llega a París dispuesta a dar el paso definitivo hacia el trono de la natación mundial.

Para ello, Titmus, de 23 años, deberá no sólo revalidar los títulos de campeona olímpica de los 200 y 400 libre que conquistó en la capital japonesa, sino cambiar por el oro la plata y el bronce que logró en los 800 y en el relevo 4x200 libre, respectivamente, en el Centro Acuático de Tokio.

Janja Garnbret (Eslovenia/Escalada)

A sus 25 años la duda no está en saber si Janja Garnbret es la mejor escaladora del mundo, sino en saber si la eslovena, máxima favorita para colgarse el oro en los Juegos de París, es la mejor escaladora de todos los tiempos.

Una pregunta que parece tener una clara respuesta a tenor del impresionante palmarés de Garnbret, que no sólo puede presumir de ser la primera y hasta ahora única campeona olímpica de la especialidad, sino también ganadora de ocho oros mundiales, cuatro europeos, así como más de cuarenta victorias en pruebas de la Copa del Mundo.

Sha' Carri Richardson (Estados Unidos/Atletimo)

Olvidados lo problemas emocionales que le condenaron a quedarse fuera de los Juegos Olímpicos de Tokio, tras dar positivo por marihuana, la estadounidense Sha'Carri Richardson debutará en París en una cita olímpica dispuesta a coronarse como la nueva reina de la velocidad.

El objetivo que parce al alcance de esta nueva Sha'Carri Richardson que ha pasado de llamar la atención por su estridentes estilismos y polémicas fuera de la pista a reclamar el foco por su capacidad aceleración que le permitió proclamarse el pasado año campeona del mundo de los 100 metros lisos en los Mundiales de Budapest.

Lisa Carrington (Nueva Zelanda/Piragüismo)

La piragüista neozelandesa Lisa Carrington quiere demostrar a sus 35 años recién cumplidos que la edad no es más que un número y tratará de repetir en los Juegos Olímpicos de París las tres medallas de oro que conquistó hace tres años en Tokio.

El botín permitiría a Carrington, que logró la primera de las seis preseas olímpicas -cinco oros y una plata- que contabiliza en los Juegos de Londres 2012, acercarse a la legendaria palista alemana Birgit Fischer-Schmidt, ganadora de doce medallas olímpicas, ocho de ellas de oro.

Javier Villanueva

(c) Agencia EFE