Carlos Sainz y Ricky Brabec defienden título en 8.000 kilómetros por Arabia Saudí
Redacción deportes, 2 ene (EFE).- El español Carlos Sainz (Ford M-Sport,) en coches, y el estadounidense Ricky Brabec (Honda), en motos, defienden desde este viernes sus títulos en la 47 edición del Rally Dakar, que comienza en Bisha y acabará en Shubaytah, Arabia Saudí, con casi 8.000 kilómetros de carrera, de los cuales 5.115 corresponden a especiales, con la presencia de 439 vehículos entre todas las categorías.
La etapa prólogo será con salida y llegada en Bisha y 29 kilómetros cronometrados de los 79 que consta esta jornada.
Sainz, que tiene como copiloto a Lucas Cruz y acredita cuatro triunfos en el Dakar, lidera a Ford, que cuenta con otros tres equipos formados por Mattias Ekström–Emil Bergkvist, Nani Roma–Álex Haro y Mitch Guthrie Jr–Kellon Walch.
La principal amenaza para Ford la representa Dacia con el catarí Nasser Al Attiyah, que ha ganado en cinco ocasiones la prueba, como referente en la marca, que con la ayuda en esta ocasión de Edouard Boulanger, parece tener ahora todo lo que necesita para alcanzar de nuevo el éxito, máxime después de su triunfo en Marruecos y de su título en el Mundial de Rally.
Bajo los estandartes de Gazoo Racing y de Overdrive Racing, el universo Toyota se juega volver a los mandos del Dakar en varios registros.
La gama Hilux incorpora toda una serie de nombres consagrados, como Yazeed Al Rajhi, que todavía no ha podido aprovechar realmente la oportunidad de ganar el Dakar en casa (tercer puesto en 2022), pero tiene a su disposición todo el talento y la mecánica necesarios para hacerlo.
Ganar es también el objetivo del brasileño Lucas Moraes, que deslumbró a todos alcanzando el podio en 2023 en su primer Dakar y terminando la temporada 2024 del W2RC en tercera posición.
Jean-Marc Fortin se apunta también a las apuestas y este año se ha mostrado muy activo en este ámbito.
El jefe de la sucursal belga ha reunido a dos antiguos dobles ganadores en motos, Toby Price y Sam Sunderland, para formar una pareja sin precedentes que podría sorprender a pesar de su inexperiencia.
La española Cristina Gutiérrez, que hizo historia y se convirtió en la primera española en conquistar el Dakar en 2024 en la modalidad challenger, debuta en la máxima cartegoría con Dacia Sandriders.
En motos, desde 2015, con el español Marc Coma, ningún piloto ha revalidado el título y este es el objetivo del estadounidense Ricky Brabec, que suma al título de 2024 el logrado en 2020.
Su principal rival será el botsuano Ross Branch, campeón del mundo de rally, que con la marca india Hero partirá con el dorsal 1 en el Dakar 2025.
En el último Dakar, su constancia le valió el segundo puesto solamente por detrás de su rival estadounidense. El salto dado por el botsuano es tanto más notable si tenemos en cuenta que se trata de la mejor actuación de un piloto Hero, ahora que la marca india se ha instituido oficialmente como una de las más fuertes dentro de la categoría.
El perfil ascendente del equipo ha atraído a sus filas al chileno Nacho Cornejo, que será un segundo líder o un compañero de equipo.
Con dos motos en el podio en la última edición, el equipo Monster Energy Honda HRC aspira al título con toda la legitimidad.
En cualquier caso, existen dudas sobre el estado de forma del líder, Ricky Brabec, cuya rodilla resultó dañada en una caída en el Rallye de Marruecos el pasado mes de octubre.
No se descarta un regreso al más alto nivel para el americano, pero el francés Adrien van Beveren se ha mostrado más sólido tras su tercer puesto en el Dakar y su segundo puesto en el W2RC, solamente por detrás de Ross Branch.
Puede que al piloto francés le haya llegado la hora en esta su décima participación, pero en el clan Honda, el español Tosha Schareina también está en condiciones de mostrar los avances en madurez que se le ha visto durante la temporada.
KTM compite con los cuatro pilotos oficiales unidos bajo la bandera RedBull KTM Factory Racing.
En primer lugar, este reencuentro con el uniforme naranja supone la reunión de los hermanos argentinos Benavides, si bien las cosas no son nada fáciles: el mayor, Kevin, bicampeón del certamen (2021-23), sufrió una fortísima caída en la preparación del Desafío Ruta 40.
Por su parte, el hermano menor, Luciano, se accidentó durante la misma prueba, pero pudo recuperarse lo suficientemente rápido como para terminar en el tercer puesto en el Rallye de Marruecos.
La baza de la firma austriaca se encuentra quizás en Australia de la mano de Daniel Sanders, que parece haber domado la precipitación de su juventud y que ganó indiscutiblemente en Marruecos.
Por último, Jordi Viladoms, el director deportivo del equipo, ha sucumbido a la tentación y ha reclutado a lo mejorcito de los pilotos: Edgar Canet, bajo el radar de Nani Roma cuando no tenía nada más que 10 años, se hizo con el séptimo puesto en Marruecos (segundo en Rally 2) a la edad de 19 años y se ha convertido en el piloto oficial más joven de la historia de KTM en el Dakar.
En la categoría challenger de autos, considerada también un trampolín hacia la clase reina, se espera una batalla de altos vuelos entre los saudíes Yasir Seaidan y Dania Akeel arbitrada por el argentino Nicolas Cavigliasso, entre otros rivales, mientras que en en SSV, denominada antes T4, parte como favorito el francés Xavier de Soultrait, que tendrá que aplacar a no pocos rivales, entre ellos Francisco “Chaleco” López, Gerard Farrés o Sebastian Guayasamin, en su defensa del título.
Por ultimo, en camiones, los dos últimos Dakar han sido testigo de las victorias en camiones de Janus van Kasteren (2023) y de Martin Macík (2024), en una batalla entre checos y neerlandeses que ha dado un inesperado giro en la previa a la edición 2025.
Entre los 45 camiones convocados al prólogo en Bisha, el reparto de los favoritos ha venido decantado por movimientos que rompen los esquemas, por ejemplo, el del vicecampeón Aleš Loprais, quien ha optado por competir al volante de un camión del Team De Rooy, y el de Mitch van den Brink, su principal rival en el podio hace unos meses, que ha encargado dos camiones para su padre y para él al defensor del título Martin Macík.
(c) Agencia EFE