Aaron Rodgers y su carrera por una recuperación milagrosa

Para que los New York Jets avancen a postemporada todo parece indicar que necesitarían un milagro, y parte de ese milagro podría estarse gestando con Aaron Rodgers. Después de sufrir un desgarre del tendón de Aquiles en la Semana 1, todo parecía indicar que lo veríamos de vuelta hasta el 2024, pero el ex quarterback de los Green Bay Packers ha desafiado la lógica.

El pasado domingo, Rodgers estuvo lanzando el balón previo al juego entre Los Angeles Chargers y New York Jets. Si bien la diferencia entre lanzar un balón y entrar a un partido es sustancial; el hecho de verlo ya de pie y con movilidad, tras una lesión tan severa, debe ser un aliciente para jugadores, entrenadores y aficionados de los Jets.

Rodgers, en franca recuperación

Desde que se anunció la gravedad de la lesión, Rodgers mencionó que haría todo para volver a la actividad lo antes posible. Esto incluyó un tipo de cirugía novedosa y terapia para restaurar el tejido tan pronto como se pudiera. Desde entonces, el mariscal de campo fue visto en muletas a finales de septiembre, cuando acudió al estadio para apoyar a su equipo en la derrota ante los Kansas City Chiefs.

A mediados de octubre, cinco semanas después de la lesión, Rodgers ya se encontraba en en el campo lanzando pases previo al triunfo ante los Philadelphia Eagles. Quizás esa aparición, más que cualquier otro indicador que se haya visto hasta el momento, elevó el entusiasmo entre los aficionados de los neoyorquinos.

Unos minutos después de finalizar el encuentro ante los Chargers, Rodgers entró al campo a saludar a sus rivales. Mientras saludaba a Derwin James, safety de los californianos, se puede escuchar a Rodgers responder que volvería “en algunas semanas”, al ser cuestionado por el profundo.

Aaron vs la medicina convencional

Recién que sucedió la lesión, el pronóstico era poco alentador para el veterano quarterback. Tras recibir el resultado de los rayos x, el debate entre expertos en medicina deportiva era si el percance significaría el fin de su carrera o, en el mejor de los casos, si estaría listo a tiempo para abrir la temporada 2024.

Las rupturas del tendón de Aquiles suelen tardar entre 9 y 12 meses para una recuperación completa, y aunque algunos jugadores recientemente han logrado sanar hasta en 6 meses, como el caso de Cam Akers, si Rodgers piensa volver esta temporada tendría que regresar a la acción máximo cuatro meses después de la lesión, algo que sin duda rompería con cualquier pronóstico inicial.

A eso se le tendría que agregar que el quarterback cuenta con 40 años, una edad en la que el cuerpo suele ya estar en declive para los atletas de alto rendimiento. Hace apenas una década era prácticamente imposible pensar en jugadores de la NFL de 40 años de edad, sin embargo, ahí está el mariscal de campo, desafiando la lógica y el pronóstico de los expertos en medicina.

¿Es Rodgers la pieza faltante para los Jets?

En el papel, Rodgers le daría a los neoyorquinos uno de los mejores quarterbacks de la NFL. Sin embargo, no es el único ajuste que tendrían que hacer los Jets. La línea ofensiva ha sido un desastre, en especial en la protección de pase, mientras que los receptores han sido inconsistentes. Quizás con excepción de Garrett Wilson y Breece Hall, New York tampoco cuenta con grandes armas alrededor del quarterback.

A su favor, los dirigidos por Robert Saleh cuentan con una defensa que se encuentra entre las mejores de la NFL, pero realmente tendrán que mantener un nivel extraordinario para que el equipo siga en la pelea por un lugar en playoffs. De lo que no queda duda es que el equipo, en particular la línea ofensiva, tendría que protegerlo mucho mejor de lo que ha hecho con Zach Wilson, o podría darse una recaída.

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