La 27ª vez de San Isidro Club: el campeón de siempre amenaza con más dominio gracias a su base joven y una camada 2002 que ya vuela

Joaquín Lamas acaba de convertir el penal definitorio y Carlos Pirán es el primero a mano para abrazarse; San Isidro Club es campeón de liga por 27ª, gracias a un sufrido 15-12 sobre Alumni en la final del Top 12 de URBA.
Joaquín Lamas acaba de convertir el penal definitorio y Carlos Pirán es el primero a mano para abrazarse; San Isidro Club es campeón de liga por 27ª, gracias a un sufrido 15-12 sobre Alumni en la final del Top 12 de URBA. - Créditos: @LA NACION/Santiago Filipuzzi

Como si fuera un déjà vu de la última final entre ambos, la del 2011. Se jugó poco, se peleó mucho y se utilizó en exceso el pie. Hace 12 años Alumni generó sus chances, hizo méritos, pero falló en la puntería: hubo dos drops accesibles malogrados por Santiago González Iglesias, que luego de ese año iba a construir una gran carrera en los Pumas. En esta ocasión dilapidaron dos chances claras sus compañeros: primero, Bautista Canzani, y luego, Joaquín Díaz Luzzi, a tres minutos del final. Dos penales accesibles, que terminaron siendo decisivos ante la eficacia de San Isidro Club: siguiendo el paralelismo con el 2011, cuando Benjamín Madero fue el héroe con un drop en tiempo extra, esta vez Joaquín Lamas, con un penal de larga distancia tras la chicharra, produjo la algarabía de los hinchas que coparon la cancha de CASI, su clásico rival. SIC se impuso por 15 a 12 y ganó el Top 12 de URBA, su 27ª conquista de liga en la historia.

Los envíos a los palos fueron grandes protagonistas en varias de las últimas consagraciones del club zanjero. Además de las mencionadas, la copa que levantaron en el 2019 se dio por un drop del propio Lamas en tiempo extra, frente a Belgrano. El apertura, que en la definición del 2021 falló otro drop, sobre el cierre ante CUBA, volvió a ser protagonista principal en una final. Por un motivo u otro, no había sido titular en ninguna de las últimas tres: en el 2019 perdió el puesto a manos de Tomás Granella, en el 2021 llegó con lo justo (llevó la camiseta 10 Gastón Arias) y en el 2022 estaba lesionado. Aunque este sábado estuvo impreciso en el juego en general y no estuvo fino en la conducción, resultó certero en los envíos a los palos y se comportó como un caballero: antes de festejar, fue a consolar a su rival Díaz Luzzi. Solidaridad de pateador a pateador.

Compacto del triunfo de SIC contra Alumni en la final del Top 12

La final fue pobre en el juego, en contraste con las semifinales, en las que prevalecieron el buen ritmo y la intensidad. Fue el segunda partido definitorio en la historia de URBA que no tuvo tries, después del de 2007 (Hindú 9 vs. Alumni 6). El primer tiempo se jugó al ritmo que propuso Alumni, que usó mejor el pie, fue más prolijo en la salida de su campo y se equivocó menos. La zurda de Canzani fue útil para avanzar metros con el pie y para sumar puntos. El apertura acertó sus tres penales, y Lamas, sólo uno, en el 9-3 favorable al cuadro rojiblanco. SIC se mostró errático en las ejecuciones y en el manejo de la pelota, con una infinidad de errores no forzados, que no le permitieron tomar inercia ni controlar el juego. Alumni aprovechó las fallas para sacar una leve ventaja, que no terminaría alcanzando para el resultado final.

En la segunda etapa continuó la tendencia, pero SIC tomó riesgos con la pelota y se encendió cuando el balón llegó a Justo Piccardo, el más desequilibrante en la línea de backs. A los 10 minutos el conjunto de Boulogne empató gracias a la puntería de Lamas y se plantó con otra prestancia. Sobrevino un golpe por golpe: a los 19 minutos respondió Canzani con un penal largo y dos minutos después Lamas volvió a igualar con un drop.

El impensado yerro de Joaquín Díaz Luzzi

El drama se apoderó de la escena en los últimos minutos. Díaz Luzzi, el que anotó el try decisivo para eliminar a Newman en la semifinal, falló un kick sencillo, a menos de 20 metros de la hache. Alumni, que en la temporada ganó muchísimos partidos en los cierres, esta vez falló. Y su rival no perdonó. El desenlace pasó a la historia.

El penal decisivo de Lamas en la última acción

SIC puede marcar un dominio en el rugby doméstico y una hegemonía en los próximos años. “Todavía es un equipo en formación”, repite el entrenador Eduardo Victorica, y no le falta razón. De los titulares en la final, sólo Marcos Piccinini y Marcos Borghi alcanzan los 30 años de edad. La base de los líderes está afianzada y aún es joven: Andrea Panzarini, Tomás Meyrelles, Juan Soares Gache, Santos Rubio, Carlos Pirán y Lamas están en un rango de 26 a 28 años y todavía tienen mucho por ofrecer. Las suyas son las categorías que levantaron al club después de varios años de irregularidad y lejanía de los primeros planos, algo inhabitual en una entidad que es una máquina de competir.

La camada 2002 llegó para refrescar al plantel superior y darle otra dimensión. Con 21 años, Ignacio Bottazzini, Franco Delger, Justo Piccardo, Bautista Viero y Francisco González Capdevila jugaron la final como titulares, mientras que Mateo Albanese se perdió el último tramo por una lesión. En ellos y en las nuevas promociones está buena parte del futuro de SIC, que se destaca por su férrea y ordenada defensa y tiene todo para seguir dominando el rugby de Buenos Aires.

El medio-scrum Juan Soares Gache es uno de los jugadores de esa franja de entre 26 y 28 años que son la base de la primera de San Isidro Club.
El medio-scrum Juan Soares Gache es uno de los jugadores de esa franja de entre 26 y 28 años que son la base de la primera de San Isidro Club. - Créditos: @LA NACION/Santiago Filipuzzi

Después de la cuarentena, la primera zanjera jugó las tres finales, la pre intermedia A se consagró tricampeona y la intermedia se quedó coronó en el 2021, llegó a la final en el 2022 y el próximo jueves definirá contra CUBA. En la profundidad del plantel superior está una clave de SIC, que el próximo sábado jugará la final del Nacional de Clubes frente a Universitario, de Tucumán.

De menor a mayor. Así fue el cuadro de Boulogne, que ganó apenas dos de sus primeros siete partidos de la temporada y tras la derrota en el clásico contra CASI enderezó el rumbo y perdió dos de los siguientes 17. El Top 12 es una maratón y los zanjeros terminaron mejor que el resto. Después de los festejos, colocarán su copa número 27 del rugby de Buenos Aires en sus vitrinas.

Síntesis de SIC 15 vs. Alumni 12

  • San Isidro Club: Francisco González Capdevila; Bernabé López Fleming, Carlos Pirán, Santos Rubio y Justo Piccardo; Joaquín Lamas y Juan Soares Gache; Franco Delger, Tomás Meyrelles (capitán) y Andrea Panzarini; Marcos Borghi y Bautista Viero; Benjamín Chiappe, Ignacio Bottazzini y Marcos Piccinini.

  • Entrenadores: Bruno Vitale y Eduardo Victorica.

  • Cambios: ST, 11 minutos, Juan Pedro Olcese por Chiappe; 16, Jacinto Campbell por Piccardo y Alejo Daireaux por Delger, y 27, Ricardo Macchiavello por Piccinini y Lucas Rocha por Bottazzini.

  • Suplentes: Pedro Georgalos, Felipe Sascaro y Santiago Pavlovsky.

  • Alumni: Santiago González Iglesias; Alejo González Chaves, Tomás Cubilla, Franco Battezzati (capitán) y Santiago Pernas; Bautista Canzani y Tomás Passerotti; Santiago Montagner, Tobías Moyano e Ignacio Cubilla; Juan Patricio Anderson y Nicolás Promanzio; Bautista Vidal, Tomás Bivort y Federico Lucca Ibos.

  • DT: Rodrigo Jiménez Salice y Lucas Chioccarelli.

  • Cambios: ST, 20 minutos, Joaquín Díaz Luzzi por Canzani; 24, Santiago Alduncin por Promanzio; 26, Santiago Ambroa por Passerotti, y 27, Máximo Provenzano por González Chaves.

  • Suplentes: Ezequiel Oliva, Francisco Bottoni, Juan Cruz Bottoni e Ignacio Milou.

  • Primer tiempo: 3 minutos, penal de Lamas (SIC); 6, penal de Canzani (A); 13, penal de Canzani (A), y 37, penal de Canzani (A). Resultado parcial: SIC 3 vs. Alumni 9.

  • Segundo tiempo: 6 minutos, penal de Lamas (SIC); 10, penal de Lamas (SIC); 19, penal de Canzani (A); 21, drop de Lamas (SIC), y 41, penal de Lamas (SIC). Resultado parcial: SIC 12 vs. Alumni 3.

  • Árbitro: Tomás Bertazza.

  • Estadio: CASI.