Demanda acusa a Miami de ‘manipulación racial’ al trazar nuevos distritos electorales

Una demanda presentada el jueves acusa a Miami de crear distritos racialmente segregados cuando las autoridades modificaron los límites del mapa electoral de la ciudad en primavera, un controversial proceso que provocó la oposición de grupos vecinales por considerar que el plan debilitaba el poder político de los electores negros de Coconut Grove.

El jueves, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) presentó una demanda ante un tribunal federal en la que acusa a los comisionados municipales de dividir el mapa electoral según criterios raciales para que cada uno de los cinco distritos tuviera su propia mayoría o pluralidad étnica (tres hispanos, uno negro y uno blanco no hispano).

En representación de grupos comunitarios y habitantes de la ciudad individuales, la ACLU sostiene que el mapa electoral de la ciudad es inconstitucional y viola la Cláusula de Igualdad de Protección de la 14ta Enmienda y la Ley de Derechos Electorales al concentrar a los votantes negros e hispanos en determinados distritos y diluir la influencia de esos electores en los distritos adyacentes.

“En pocas palabras, este mapa infringe los derechos de los miamenses a la igualdad de protección ante la ley consagrados en la Decimocuarta Enmienda”, dijo Nicholas Warren, abogado de la ACLU de la Florida. “Los comisionados han abusado de su poder para crear mapas injustos que tratan a los votantes negros e hispanos como peones en un juego de poder en lugar de electores a los que hay que servir. Esta demanda es una oportunidad para corregir este error y promulgar una representación significativa para todo Miami”.

En la demanda, la ACLU representa a grupos comunitarios de Coconut Grove, a las ramas del sur de Dade y Miami-Dade de la NAACP, a la organización Engage Miami y a cuatro habitantes de la ciudad. Piden a un juez federal que anule el mapa y obligue a la ciudad a empezar de nuevo. Si la demanda se prolonga más allá de noviembre de 2023, cuando se celebran elecciones para tres puestos de la Comisión, los demandantes quieren que la ciudad celebre elecciones especiales.

La demanda de 55 páginas detalla el proceso de modificación de distritos que se extendió durante varios meses a principios de 2022, un proceso que se lleva a cabo cada 10 años después del Censo federal para asegurar que la ciudad está cumpliendo las leyes electorales federales y garantizar una representación justa después de los cambios en la población. El proceso tiene por objeto proteger a la ciudad de una impugnación legal.

Este año, los datos del Censo mostraron que el Distrito 2 de la ciudad, que incluye la mayor parte de los barrios costeros de Miami, desde Coconut Grove hacia el norte, pasando por Brickell, el downtown, Edgewater y Morningside, creció tanto que estaba superpoblado en comparación con otros distritos.

El asesor que elaboró el mapa defiende el proceso

Miguel De Grandy, un cabildero, ex legislador estatal y asesor principal de modificación de distritos de la ciudad, dijo el jueves que el enfoque de la Comisión fue mantener el núcleo de los distritos existentes, “un principio tradicional de la modificación de distritos reconocido y judicialmente aceptado”.

“Los distritos adoptados en el plan son relativamente compactos y unen comunidades políticamente cohesionadas en una ciudad donde existe una importante polarización del voto entre clases según la Ley de Derechos Electorales”, dijo De Grandy. “La raza y la etnia solo se tuvieron en cuenta en la medida necesaria para cumplir la Ley de Derechos Electorales”.

De Grandy trabajó con Stephen Cody, veterano consultor político, abogado suspendido y autor de libros infantiles que forma parte del Concejo de Palmetto Bay. La abogada de la ciudad Victoria Méndez dijo el jueves que la ciudad “espera abordar las alegaciones en los tribunales”.

Los abogados de la ACLU argumentan en la demanda que la “cohesión política” se usó como una forma abreviada de mantener unidas zonas racialmente homogéneas.

Yanelis Valdés, directora de Promoción y Organización de Engage Miami y demandante individual en el caso, señaló las polémicas audiencias de modificación de distritos en las que los habitantes de la ciudad, muchos de Coconut Grove, argumentaron en contra de la división de los barrios. En particular, varios vecinos de Coconut Grove se opusieron a trasladar una parte del históricamente negro del West Grove del Distrito 2 al Distrito 4.

“Los habitantes de Miami se manifestaron en contra de los mapas manipulados, pero nuestros funcionarios electos se negaron a escuchar”, dijo Valdés en un comunicado. “Ahora, vamos a ir a los tribunales porque Miami merece algo mejor que este mapa racialmente manipulado que corta a través de las comunidades y niega la representación”.

Lo que dijeron los comisionados durante las audiencias

A lo largo de múltiples audiencias públicas a principios de este año, los comisionados declararon su deseo de mantener el equilibrio racial y étnico de la comisión de cinco personas mientras se cambiaban los límites a fin de que hubiera más o menos la misma población en cada distrito. Actualmente, la comisión está compuesta por tres hombres hispanos (Alex Díaz de la Portilla, Joe Carollo y Manolo Reyes), una mujer negra (Christine King) y un hombre asiáticoamericano (Ken Russell).

En marzo aprobaron un mapa definitivo que separaba una parte del Grove con muchos habitantes negros, pero mantenía una escasa mayoría negra en el Distrito 5, representado actualmente por King. Los comisionados debatieron varias versiones, y Russell presionó para mantener el Grove unido y Díaz de la Portilla y Carollo abogaron por trazar límites que preservaran los patrones de voto existentes y el poder de los hispanos en la próxima década.

“Creo que mis colegas no iban a comprometer su postura sobre lo que era mejor para tres distritos hispanos”, dijo King en marzo, después de ponerse del lado de Carollo y Díaz de la Portilla para aprobar el mapa final.

La ACLU argumenta que el uso de “criterios basados en la raza” en las decisiones de la Comisión municipal viola los derechos de las personas en aquellos distritos en los que su poder de voto se ve mermado. Al parecer, la demanda no solo cuestiona la forma de pensar que subyace en el reciente proceso de modificación de distritos, sino también la filosofía que subyace en la iniciativa de la ciudad de crear distritos uninominales a finales de la década de 1990.

En 1997 los votantes aprobaron un referendo para crear distritos después que las elecciones municipales del año anterior dejaran a Miami sin un funcionario electo negro. Esto impulsó la creación de tres distritos que favorecían a los hispanos, uno a los blancos no hispanos y otro a los negros.

Warren, el abogado de la ACLU, dijo que la Ley de Derechos Electorales tiene por objeto proteger el derecho de los votantes a elegir a su candidato preferido, y que es un error común creer que la ley obliga a los gobiernos a agrupar a las minorías en distritos de modo que al menos 51% del distrito sea de un solo grupo racial o étnico.

“Para estos comisionados, representación significa tener un comisionado con el mismo color de piel u origen étnico que usted”, dijo Warren. “Y eso no está bien”.

Señaló varios distritos legislativos y juntas escolares del sur de la Florida que han elegido a representantes negros a pesar de tener menos de 50% de habitantes negros en edad de votar.

Warren dijo que sus clientes quieren un mapa que se trace “en beneficio del público”, que no socave los derechos de las comunidades minoritarias a elegir a quien quieran.

“Quieren que el encargado de elaborar el mapa tenga en cuenta las verdaderas comunidades de interés y las preocupaciones de los barrios a la hora de trazar las líneas, y que no las corte y divida como hizo la comisión a principios de este año”, declaró.