La defensa de Miami sentencia a los Bills y los Dolphins ganan el juego más espectacular en años

Hacía mucho tiempo que no se vivía un juego así en Miami. Lo ocurrido este domingo ante los Bills fue algo extraordinario, sobre todo porque al final los Dolphins se quedaron con la victoria.

Se preveía un espectacular ambiente, pero la realidad superó la expectativa con una fiesta como hacía años que no se veía el Hard Rock Stadium, que para la ocasión presentó una asistencia de 66,206 espectadores, la segunda más grande desde que se modernizó el Hard Rock Stadium en 2015.

Su energía se trasladó a la cancha y el equipo de Miami se creció para llevarse el triunfo 21-19 ante el favorito equipo de Buffalo, para conseguir su tercera victoria consecutiva y propinarle el primer revés a su rival en una verdadero juegazo en la NFL.

Miami superó a los Bills por primera vez desde el 2 de diciembre de 2018 y puso fin a una racha de siete derrotas.

Mike McDaniel se convirtió en el segundo entrenador en la historia de la franquicia de Miami en ganar sus primeros tres partidos y se unió a Jimmy Johnson (1996).

“Estoy muy feliz por el equipo”, expresó McDaniel. “Para poder terminar el juego con dos esfuerzos increíbles de la defensa, creo que no podría haber escrito un mejor guión para lo que estamos tratando de hacer. Necesito una siesta”.

Si bien el ataque estuvo acertado, fue la defensa de los Dolphins la que ganó el partido no solo porque logró contener a una poderosa ofensiva durante todo el encuentro, sino porque al final la frenó en seco, pese a la buena actuación de su gran quarterback Josh Allen que alcanzó 400 yardas, dos touchdown y completó 42 de sus 63 pases.

“Simplemente no jugué un buen football situacional esta jornada”, indicó Allen.

“Nuestra defensa jugó muy bien, los equipos especiales tuvieron un buena día, pero del lado ofensivo no cuidamos el negocio y eso comienza conmigo”.

Los Bills, que estuvieron a dos yardas del triunfo, mostraron su buen juego, pero no les alcanzó para vencer a Miami que jugó con mucho corazón y también usó muy bien la cabeza. No por gusto están imbatibles con 3-0 y lideran su división AFC , por delante de los Bills ( 2-1).

El quarterback de los Dolphins Tua Tagovailoa esta vez lanzó para 186 yardas, completando 13 de sus 18 pases, entre ellos uno de touchdown, y no tuvo intercepción.

Tua, quien tuvo que abandonar brevemente el choque al final del segundo cuarto tras recibir un golpe, metió el brazo cuando hizo falta y encaminó a su equipo a anotar tres touchdowns.

“Me siento muy bien. Mucho mejor después de una victoria.”, señaló Tagovailoa.

“Después del golpe me empezó a molestar la espalda y tuve que pasar el protocolo de conmociones cerebrales . Ahora disfrutaré esta victoria y me prepararé para el siguiente juego ante Cincinnati, solo estoy preocupado por tener la espalda bien”.

Fue un encuentro muy técnico en el que McDaniel mezcló bien jugadas entre pases y acarreos.

El wide receiver Jaylen Waddle consiguió 102 yardas y Tyrrell Hill otras 33 por aire, mientras que el running back Chase Edmons ganaba 21 yardas y Raheem Monsters otras 11 por tierra.

Pero más que eso hay que premiar el trabajo colectivo, principalmente de la línea ofensiva. Por lo visto en este encuentro estos Dolphins invitan a soñar.

Juego

Fiel a su idea, los Dolphins cometieron el error de cederle el ovoide a los Bills que consiguieron un touchdown (9:03’) cuando Allen le dio el pase de dos yardas que necesitaba el running back Devin Singletary para anotar y poner la pizarra 7-0.

Con 5:13’, la defensa de Miami consiguió un fumble cuando el safety Jevon Holland le tumbó el ovoide a Allen y acto seguido lo recuperó Melvin Ingram en la yarda seis de su campo.

Tua la colocó en la yarda uno y luego el RB Chase Edmond corrió por el centro y anotó el primer TD de Miami que dejó la mesa servida para que el pateador Jason Sanders empatara el juego 7-7.

Comenzando el segundo cuarto, Allen corrió dos yardas en un cuarto down y luego, tras un par de jugadas más, le dio el pase de 8 yardas al WR Isaiah McKenzie, increíblemente libre de marca, para que anotara el segundo TD de los Bills y el punto adicional que le dio ventaja 14-7 a los Bills.

Los Dolphins respondieron a lo grande y tras nueve jugadas, sin siquiera llegar al tercer down, consiguieron marcar el segundo touchdown cuando con (6:51’) .Tagovailoa conectó con el wide receiver River Cracraft en un pase por el medio de 11 yardas.

Sanders no falló y Miami empató 14-14.

Tagovailoa, tras completar su octavo pase de los 10 que le lanzó a Waddle, recibió una fuerte falta del linebacker rival Matt Milano y tuvo que salir del encientro poco antes de completarse los últimos dos minutos del segundo parcial.

Su sustituto,Teddy Bridgewater, entró frío y no consiguió avanzar, los Bills tampoco y ambos equipos se marcharon al descanso con un abrazo en el marcador 14-14.

Por suerte para Miami regresó Tua e inició el tercero con un pase de 22 yardas, aunque no pudo anotar.

En cambio Allen desde la yarda dos consiguió avanzar y llevar a Buffalo a la yarda 7 y allí la defensa de los Dolphins logró frenar a los Bills, que se tuvieron que conformar con el gol de campo de Bass y con ello se fueron arriba 17-14.

Los Bills estuvieron cerca de anotar en el inicio del último cuarto, pero se quedaron corto y para colmo Bass falló un gol de campo de 38 yardas

Tua sacó su brazo a pasear primero con un pase de 32 yardas y luego con otro de 45 para llegar a la 7ma yarda en territorio de Buffalo.

Con 10:08’ en el reloj, Edmonds anotó por tierra el TD que puso delante a los Dolphins 21-17 tras la buena patada de Sanders que desató la locura en la emocionada afición.

Los Bills llegaron a la yarda 2 de Miami con dos minutos por jugar, pero la defensa de los Dolphins se creció y no pudieron anotar.

Pero los Dolphins tampoco pudieron avanzar y el mal despeje de Thomas Morstead provocó un safety en contra y los Bills se acercaron 21-19.

Buffalo tenía la bola y les bastaba un gol de campo para remontar, pero se encontraron un enorme muro en la defensa de Miami y no hubo tiempo para más.