El Día de la Tradición se conmemora cada 10 de noviembre en la Argentina. La fecha es en honor al nacimiento de José Hernández, autor de una de las obras más importantes de la historia nacional, el Martín Fierro. El poeta y político argentino inmortalizó la vida gauchesca a través de este trabajo literario, que se convirtió en un clásico de la literatura de nuestro país. Esta jornada invita a celebrar las costumbres argentinas, que forman parte de nuestra cultura y legado.

¿Por qué se celebra el Día de la Tradición hoy?

La fecha fue instruida en 1937, a través de la iniciativa del poeta Francisco Timpone, durante una reunión llevada a cabo en la Agrupación Bases. Se trataba de una institución en honor a Juan Bautista Alberdi, ubicada en La Plata. Timpone deseaba dedicar un día a las costumbres de los gauchos en el país. Un año más tarde, presentó esta propuesta ante el Senado de la Provincia de Buenos Aires y en 1939 fue promulgada. El día fue elegido en recuerdo a José Hernández, quien defendió la cultura gauchesca.

José Rafael Hernández nació el 10 de noviembre de 1834 en los caseríos de Perdriel, una chacra que pertenecía a su tío, el político y militar argentino Juan Martín de Pueyrredón. Realizó sus estudios primarios en el Liceo de San Telmo y a sus 12 años se trasladó al sur de Buenos Aires junto a su familia. Allí conoció la vida rural y las tradiciones gauchas, lo que sería su máxima inspiración para su mangum opus.

En su juventud, estudió periodismo y realizó la formación militar, lo que lo llevó a participar de diferentes batallas en el interior del país. Debido a su participación en las rebeliones federales, se vio obligado a exiliarse en Brasil.

En 1872 retornó al territorio nacional, situándose en un hotel en las cercanías de la Plaza de Mayo. Allí comenzó a escribir El Gaucho Martín Fierro, obra que retrata la vida en las zonas rurales de la Argentina a fines del siglo XIX. El 28 de noviembre de ese mismo año publicó poemas de este escrito en el diario La República. Gracias a la buena recepción del público, en diciembre lo publicó en formato de libro. El trabajo fue editado por la imprenta La Pampa, con la ayuda de su gran amigo Don José Zoilo Miguens.

A partir de su éxito, escribió la segunda parte de esta historia, bautizada La vuelta de Martín Fierro, que fue publicada en 1879. Durante los años siguientes, este escrito en prosa alcanzó gran popularidad y fue traducido en más de 70 idiomas.

José Hernández falleció a sus 51 años, el 21 de octubre de 1886. Martín Fierro se convirtió en un clásico de la literatura nacional, que retrata a la perfección el estilo de vida de los gauchos en el país.

Frases de Martín Fierro para compartir

En conmemoración de José Hernández y la influencia de su trabajo en la cultura argentina, estas son algunas frases del Martín Fierro que se pueden compartir en el Día de la Tradición:

• “Los hermanos sean unidos porque esa es la ley primera, tengan unión verdadera, en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos se pelean los devoran los de afuera”.

• “Mi gloria es vivir tan libre como el pájaro del cielo: no hago nido en este suelo”.

• “Muchas cosas pierde el hombre, que a veces las vuelve a hallar; pero les debo enseñar y es bueno que lo recuerden: Si la vergüenza se pierde, jamás se vuelve a encontrar”.

• “Lo que pinta este pincel ni el tiempo lo ha de borrar; ninguno se ha de animar a corregirme la plana; no pinta quien tiene gana, sino quien sabe pintar”.

• “Al que es amigo, jamás lo dejen en la estacada, pero no le pidan nada ni lo aguarden todo de él: siempre el amigo más fiel es una conducta honrada.”

• “Un padre que da consejos, más que padre es un amigo. Y así como tal les digo, que vivan con precaución, que nadie sabe en qué rincón, se esconde el que es su enemigo”.

• “Yo he visto muchos cantores, con famas bien obtenidas, y que después de adquiridas no las quieren sustentar”.

• “Hay hombres que de su ciencia tienen la cabeza llena; hay sabios de todas menas, mas digo sin ser muy ducho. Es mejor que aprender mucho. El aprender cosas buenas”.

• “Y al que le toca la herencia donde quiera hallar su ruina. Lo que la suerte destina no puede el hombre evitar. Porque el cardo ha de pinchar es que nace con espina”.

• “Junta esperencia en la vida hasta pa dar y prestar. Quien la tiene que pasar entre sufrimiento y llanto, porque nada enseña tanto como el sufrir y el llorar”.