Juntos por el Cambio ratifica que irá a debatir al Congreso para frenar la ofensiva del kirchnerismo contra la Corte y condenó el espionaje ilegal

La mesa nacional de Juntos por el Cambio rechaza el avance oficial contra la Corte
La mesa nacional de Juntos por el Cambio rechaza el avance oficial contra la Corte

Juntos por el Cambio (JxC) buscó hoy cerrar filas frente a la ofensiva que lanzó el gobierno de Alberto Fernández contra la Corte Suprema de Justicia. Tras una cumbre de la conducción nacional del espacio, los jefes de la coalición opositora unificaron posturas y consensuaron la estrategia legislativa que pondrán en marcha para frenar la avanzada del kirchnerismo en el Congreso: sus bloques darán batalla e irán a debatir a la Comisión de Juicio Político para rechazar el proyecto que impulsan el Presidente y once gobernadores aliados a la Casa Rosada para remover a los integrantes del máximo tribunal del país. Por lo tanto, desecharon la idea de vaciar la Comisión y faltar a las reuniones.

En un comunicado que acordaron después del cónclave, que se realizó vía Zoom, los altos mandos de JxC expresaron su preocupación por la embestida del Ejecutivo nacional contra la cabeza del Poder Judicial: advirtieron que la jugada implica un quiebre del Estado de Derecho y alertaron sobre la gravedad institucional del conflicto de poderes que desató la Casa Rosada.

Si bien el kirchnerismo no contaría con los votos necesarios para avanzar contra la Corte, JxC se alista para un tenso debate en la Comisión de Juicio Político, que conduce la oficialista Carolina Gaillard. La oposición descuenta que el Frente de Todos intentará montar un “show político” para desgastar y presionar a los miembros del máximo tribunal

Durante la reunión virtual, los referentes de Pro, la UCR y la CC, entre otras fuerzas que conforman el conglomerado opositor, definieron que esperarán que el oficialismo reúna el quórum en la Comisión de Juicio Político -el Frente de Todos tiene 16 de 31 integrantes- para presentarse a dar debate y rebatir los argumentos con los que el kirchnerismo pretende sostener la acusación contra los jueces supremos. A su vez, aspiran a acortar el operativo “desgaste” contra los magistrados. “De ninguna manera vamos a dejar vacío el Parlamento. Seguiremos cumpliendo con el rol que nos asignó la sociedad”, indicaron las autoridades de la fuerza.

En la discusión parlamentaria, el interbloque de JxC planteará que los cargos que el kirchnerismo les imputa a los jueces supremos son “inadmisibles” . Para contrarrestar la ofensiva del Frente de Todos, sostendrán que el Gobierno no acata el fallo de la Corte que restituyó los fondos de coparticipación a la Ciudad y que se nutre con información que proviene de operaciones ilegales de inteligencia para acusar a Horacio Rosatti, titular del máximo tribunal. “Manifestamos nuestro enérgico rechazo al espionaje ilegal y denunciamos al Gobierno por auspiciar y utilizar estos mecanismos. Urge el imperio de la legalidad y la sanción sobre todas las conductas que la violenten”, subrayó la mesa nacional de JxC.

A la vez, confirmaron que no tratarán ni aprobarán ningún proyecto del oficialismo hasta que la Casa Rosada no detenga la ofensiva para enjuiciar a los jueces supremos. De esa forma, presionará al Frente de Todos para que se acorte lo máximo posible el proceso de investigación. Esta maniobra pone en aprietos al ministro de Economía, Sergio Massa, quien había negociado con la oposición el tratamiento de las leyes de fomento a la agroindustria, la exportación de gas natural licuado y un monotributo para el sector tecnológico durante las sesiones extraordinarias.

“Mientras siga este atropello contra la Corte no vamos a prestar quórum y darle viabilidad a ningún proyecto que impulse el Gobierno o el Frente de Todos”, anunció la conducción de JxC.

De esta manera, la principal coalición opositora pretende exhibir una respuesta institucional frente al intento de Fernández de remover a Rosatti, Ricardo Lorenzetti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Rosenkrantz, integrantes del máximo tribunal del país.

La Comisión de Juicio Político está integrada por 16 diputados de la bancada del Frente de Todos, 14 de Juntos por el Cambio y uno del interbloque Federal: Alejandro “El Topo” Rodríguez. Las espadas parlamentarias de JxC se mantienen en permanente contacto con Rodríguez para explorar una estrategia común. Fernández no podría aprobar el proyecto para enjuiciar a los cuatros jueces supremos -se necesitan dos tercios de los presentes en la Cámara-, pero el oficialismo tiene los números para iniciar el sumario y activar la investigación en la Comisión. Con el control del cuerpo, el kirchnerismo amenaza con citar a testigos, solicitar informes o hacer inspecciones, entre otras medidas. Leopoldo Moreau anticipó que podrían convocar a los jueces. En JxC consideran que el FDT no podrá hacerlo sin autorización judicial.

Una vez que el Frente de Todos cite a la reunión de Comisión de Juicio Político, ese cuerpo tiene quince días para aprobar la admisibilidad del proceso. El Presidente busca remover por el fallo que restituyó los fondos de coparticipación a la Ciudad y el de la integración del Consejo de la Magistratura.

En JxC quedaron en estado de alerta después de que el Gobierno avanzó con la firma del pedido de juicio político y anticipó que convocará a sesiones extraordinarias para mediados del corriente mes. Evalúan con preocupación el avance contra la Justicia y la amenaza de reformar el consejo de la Magistratura a través de un DNU.

Durante el fin de semana los jefes de JxC evaluaron la posibilidad de reflotar los proyectos de juicio político contra el Presidente y Cristina Kirchner, como parte de la contraofensiva contra el Frente de Todos. Esa jugada perdió fuerza durante las últimas horas, ya que en un sector de JxC entienden que el oficialismo podría “rechazar de entrada” esos pedidos con el argumento de que no fueron incluidos en el temario de las sesiones extraordinarias y que el trámite recién debería comenzar en marzo próximo, o que “no tienen entidad”.

La cumbre virtual reunió a la cúpula de JxC después de varias semanas de parálisis. Participaron los presidentes partidarios Patricia Bullrich (Pro), Gerardo Morales (UCR), Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) y Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Republicano Federal) y los jefes parlamentarios del espacio, como Mario Negri, Cristian Ritondo, Juan Manuel López, Alfredo Cornejo, Humberto Schiavoni, Luis Naidenoff, Federico Angelini y Margarita Stolbizer (GEN). También estuvieron el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el senador nacional Martín Lousteau y los gobernadores radicales Rodolfo Suárez (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes). Mauricio Macri, que se encuentra en Cumelén y reaparecerá el pasado mañana en Mar del Plata, se conectó durante unos minutos, pero se retiró de la reunión de la cúpula del espacio sin hablar.

Durante la reunión de la mesa nacional de JxC, los jerarcas opositores consensuaron un repudio conjunto a las “vergonzosas declaraciones” del canciller Santiago Cafiero, quien comparó a Macri con Jair Bolsonaro tras el intento de golpe de Estado en Brasil.

Tensión por Mendoza

Si bien la mayor parte de la cumbre transcurrió en un clima de camaradería, hubo pasajes de alta tensión. Por caso, se produjo un fuerte cruce entre los radicales Cornejo, Suárez y Morales, y los representantes de Pro por el armado electoral en Mendoza. Los caciques de la UCR dirigieron sus reproches a Omar De Marchi, aliado de Larreta, quien aspira a competir por la gobernación de Mendoza. Acusaron a De Marchi de querer “entregar” la provincia a la oposición del PJ y de explorar una alianza para pelear por fuera de JxC. Morales sostuvo que era causal de ruptura de la coalición nacional. Bullrich, como titular de Pro, recogió el guante y se comprometió a solucionar el tema: dijo que garantizará las reglas de competencia en ese distrito. Es más, planea convocar a la cúpula de su partido para explorar una salida al conflicto. Larreta, en cambio, deslizó que se ocuparía del tema. Leales a Bullrich le reprocharon que haya optado por el silencio.

“Horacio se quedó mudo. Más de la mitad del Pro de Mendoza está con Bullrich y no quiere romper ni lo va a hacer”, aseguraron cerca de la exministra de Seguridad.

Luego hubo cortocircuitos por la estrategia en Neuquén, donde el Pro impulsa un acuerdo con Rolando Figueroa, exdirigente del MPN, para aumentar las posibilidades electorales de la oposición. Sin embargo, la UCR y la CC rechazan ese pacto y apalancan la candidatura de Pablo Cervi, de la fuerza de Lousteau.

También estuvieron en el encuentro Maricel Etchecoin (CC), Ramón Puerta (Encuentro Republicano Federal), el diputado nacional Alberto Asseff y el titular de GEN, Sergio Abrevaya; Jorge Triaca, Andres De Leo, Ramón Mestre y Jorge Franco.

Alerta en JxC

Desde que Fernández puso en marcha su ofensiva contra la Corte, la mayoría de los referentes opositores concordaron en que sería conveniente asistir a debatir a la Comisión de Juicio Político. “Se consolidó la posición de ir a dar el debate y ponerse duros. Tenemos que estar”, afirman desde la cúpula de JxC. Rodrigo De Loredo (Evolución Radical) había puesto reparos ante ese planteo: aventuraba que el oficialismo buscará embarrar la discusión, por lo que no descartaba vaciar la comisión y faltar a las reuniones, para no contribuir al “circo político” del kirchnerismo. Hoy, Lousteau no reflotó ese planteo durante la cumbre virtual de la mesa nacional.

Juicio político: la oposición no aprobará ninguna ley del Gobierno mientras dure su embestida contra la Corte

La idea de convocar a un encuentro de la mesa nacional surgió después de que los titulares de las bancadas de JxC en Diputados discutieran la hoja de ruta de la estrategia que llevará adelante el conglomerado opositor en la Comisión de Juicio Político de la Cámara baja.

Está claro que la ofensiva del Gobierno contra la Corte lo empuja a JxC a abroquelarse en el Congreso y estimula una mayor articulación de la coalición opositora. Pero entre los referentes opositores se pusieron en guardia y pretenden cerrar filas, ya que dan por descontado que el Gobierno buscará dividir a JxC -impulsando, por ejemplo, el pedido de juicio político de la CC contra Lorenzetti- y agitar las tensiones genera el armado electoral para las presidenciales.

Los presidentes partidarios de Juntos por el Cambio -Patricia Bullrich (Pro), Gerardo Morales (UCR), Maximiliano Ferraro (CC) y Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Republicano Federal)
Los presidentes partidarios de Juntos por el Cambio -Patricia Bullrich (Pro), Gerardo Morales (UCR), Maximiliano Ferraro (CC) y Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Republicano Federal) - Créditos: @Juntos por el Cambi