Cuando China y Alemania fueron aliadas durante tres décadas

Días atrás os hablaba de cómo se utilizó la difusión de noticias falsas para desacreditar al Imperio Alemán durante la Primera Guerra Mundial, siendo uno de los principales objetivos el conseguir que la República de China rompiera su alianza de cooperación con el Imperio Alemán y se uniera bando Aliado en el conflicto militar.

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Una cooperación que se firmó en 1911 y que se mantuvo en vigor a lo largo de tres décadas (hasta 1941) en el que se rompieron definitivamente las relaciones sino-germanas.

El tratado entre ambas naciones surgió por el mutuo interés de poner coto a la expansión británica en Oriente y en una época en el que China se encontraba en un profundo periodo de transformación, que dio origen a la República de China en 1912 y ponía fin a siglos de gobierno Imperial.

Por su parte, los germanos (como otras muchas naciones europeas) querían mantener parte de sus intereses y posesiones orientales y China estaba dispuesta a ser ayudada económicamente gracias a las inversiones que los alemanes hicieron en el país.

El recién constituido gobierno de la República China temía que sus eternos enemigos (el Imperio Japonés) quisieran aprovechar para atacarles y crear algún conflicto bélico como el que tuvo lugar en la última década de 1890 durante la conocida como primera guerra sino-japonesa.

Pero a pesar de ese acuerdo de cooperación, en 1917, cuando la IGM ya estaba dando sus últimos coletazos, cuando el conflicto se trasladó al Extremo Oriente China no tuvo más remedio que tomar partido por el bando Aliado, tras comprobar que el Imperio Alemán tenía todas las de perder en la guerra y el propósito de la República China (que tan solo llevaba cinco años) era ser reconocido y apoyado por las grandes naciones y potencias mundiales (y mucho más tras la entrada de EEUU). El tener de su lado a estadounidenses, británicos y franceses podría suponer que éstos frenarán cualquier intento de ataque japonés a intereses chinos.

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Así fue como durante poco más de un año el tratado sino-alemán quedó interrumpido, aunque ambas naciones no tuvieron enfrentamiento directo alguno. De hecho la presencia china en la Gran Guerra no fue a nivel bélico, sino aportando alrededor de 40.000 hombres que trabajaron en fábricas de armamento o en el campo de batalla cavando zanjas para realizar las trincheras. Un gran número de éstos fueron a para a Francia.

En no haber tenido un conflicto directo durante la guerra ayudó para que una vez terminada la IGM la República China y la recién constituida República de Weimar retomasen el tratado de cooperación y China fuera de vital ayuda en la reconstrucción alemana.

Ayudó a esta reconciliación sino-germana el hecho de sentirse China traicionada por sus ‘aliados’, debido a que éstos, a través del Tratado de Versalles (firmado en 1919 tras la IGM) cedió a Japón la concesión de Hankow y Tientsin, en manos de Alemania hasta el final de la Gran Guerra y que los chinos aspiraban a recuperar.

Durante las dos siguientes décadas, la cooperación entre chinos y germanos no solo fue económica y con intercambio de materias primas que uno poseía y al otro le hacía falta, sino que el tratado abarcó la instrucción militar moderna, una de las cosas que China dominaba en menor medida, ya que hasta no hacia demasiado sus conflictos militares se habían resuelto del modo imperial.

Los germanos sabían de estrategia militar y los chinos necesitaban dar un paso adelante en su modernización a la hora de enfrentarse a un conflicto bélico.

El ejército chino se modernizo y recibió instrucciones y consejos por parte de los más prestigiosos e importantes militares alemanes.

Con la llegada al poder de Alemania de Adolf Hitler el tratado de cooperación siguió en pie y el modelo militar de la Wëhrmacht sirvió como referente a los miembros del ejército chino.

El propio hijo adoptivo del presidente de la República China, Chiang Wei-kuo, viajó hasta Alemania y se formó militarmente en la Wëhrmacht junto a un nutrido grupo de soldados chinos.

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Parecía que el tratado de cooperación entre ambas naciones podía incuso convertirse en una alianza estratégica cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, pero el hecho de que el Tercer Reich firmara un pacto con el Imperio Japonés (eterno enemigo de china y con quien se encontraban en un dificultoso momento tras la invasión japonesa de Manchuria en 1931) provocó que China decidiera romper las relaciones con Alemania.

Fuentes de consulta: revolvy / labrujulaverde / The History of China

Fuente de las imágenes: Wikimedia commons