Crist se impone en las primarias demócratas y disputará la gobernatura a DeSantis

El congresista y ex gobernador de la Florida, Charlie Crist, se impuso el martes en las primarias demócratas a la comisionada de Agricultura, Nikki Fried, y ahora enfrentará al actual gobernador, Ron DeSantis, en las elecciones generales del 8 de noviembre.

Con más de 1.4 millones de votos contados en todo el estado a las 9:15 p.m., Crist recibía alrededor del 60% de los votos frente a alrededor del 35% para Fried, quien fue la única demócrata elegida para un cargo estatal hace cuatro años. Esos márgenes en todo el estado eran similares a los márgenes en los resultados de los Condados Miami-Dade y Broward, donde se percibía que Fried tenía ventaja.

The Associated Press proyectaba a Crist como ganador a las 8 p.m., cuando se cerraron las casillas en el Panhandle de la Florida.

La victoria temprana, por decisiva que sea, lo coloca ahora como el no favorito en una contienda de alcance nacional en la que DeSantis no solo tiene una enorme ventaja en la recaudación de fondos –con un arcón de $130 millones y contando– sino que ha liderado al Partido Republicano de la Florida mientras este superaba a los demócratas en el registro de electores a nivel estatal. Y en el Condado Miami-Dade, crucial para la victoria del ex presidente Donald Trump en la Florida en 2020, los demócratas han perdido terreno entre los electores hispanos.

Al elegir a Crist, los electores demócratas favorecieron a un candidato con experiencia que se presentó ante los electores como la oportunidad más fuerte que tiene su partido para derrotar a DeSantis, un titular al que ha pintado como hambriento de poder y extremista. El martes por la noche, Crist se apresuró a centrar la atención en las ambiciones presidenciales de DeSantis.

“Este tipo quiere ser presidente de los Estados Unidos de América y todos lo saben. Sin embargo, cuando lo derrotemos el 8 de noviembre, ese espectáculo habrá terminado”, dijo Crist durante su discurso de aceptación el martes por la noche en St. Petersburg. “Ya no reconozco a los líderes del Partido Republicano. Son extremistas. Quieren hacer retroceder el reloj de nuestra libertad. Intentan socavar nuestra democracia de formas que nadie podía haber imaginado. Eso se acaba aquí. Eso se acaba ahora”.

Este es el tercer intento de Crist de ganar el cargo de gobernador. Tuvo éxito en 2006, como republicano, y ejerció un mandato, de 2007 a 2011. Pero no buscó la reelección y en su lugar se postuló al Senado federal, perdiendo ante Marco Rubio en las primarias republicanas. Crist abandonó el partido y persistió en su candidatura al Senado, perdiendo de nuevo ante Rubio en una contienda a tres bandas que incluía al demócrata Kendrick Meek.

Después de respaldar a Barack Obama para la presidencia, Crist se unió al Partido Demócrata y se postuló de nuevo como candidato a gobernador en 2014 contra Rick Scott, perdiendo por un margen cercano al 1%.

Mientras tanto, DeSantis contrarrestó la atención sobre las primarias del martes con un mitin en Hialeah, en el que participaron titulares republicanos del sur de Florida como el senador federal Marco Rubio y el representante federal Mario Díaz-Balart.

“Vamos a generar la mayor participación republicana que este estado haya visto jamás”, dijo DeSantis a la multitud.