Crisis de violencia en Haití: las pandillas amenazan con un “genocidio” al primer ministro, que sigue afuera del país

Una mujer se protege los ojos mientras pasa junto a los cadáveres de los reclusos afuera de la penitenciaría nacional en Puerto Príncipe, Haití, el 4 de marzo de 2024
Una mujer se protege los ojos mientras pasa junto a los cadáveres de los reclusos afuera de la penitenciaría nacional en Puerto Príncipe, Haití, el 4 de marzo de 2024 - Créditos: @CLARENS SIFFROY

PUERTO PRÍNCIPE.- Todos los haitianos se hacen la misma pregunta desde que las pandillas armadas sumieron a la sufrida nación caribeña en un estado próximo a la anarquía: ¿dónde está el primer ministro Ariel Henry?

El asediado gobernante, quien asumió interinamente tras el asesinato en 2021 del presidente Jovenel Moïse, brilla por su ausencia desde que estalló el brote de violencia más grave y reciente la semana pasada. Henry permanece mudo mientras recorre el mundo, de América a África, sin dar señales de retornar.

La oficina del gobernador de Puerto Rico confirmó que Henry había viajado el martes a la capital, San Juan, después de que medios de comunicación locales informaran que la República Dominicana, que comparte la isla de La Española con Haití, no había autorizado previamente el aterrizaje de su avión.

El líder de una pandilla armada Jimmy
El líder de una pandilla armada Jimmy "Barbecue" Cherisier y sus hombres son vistos en Puerto Príncipe, Haití, el 5 de marzo de 2024 - Créditos: @CLARENS SIFFROY

No estaba claro por qué Henry no voló directamente a Haití desde Estados Unidos, en donde estaba de gira, aunque el lunes se escucharon intensos tiroteos cerca del aeropuerto internacional de la capital que dificultaban los desplazamientos. Se veía un camión blindado sobre la pista disparando hacia las pandillas que intentaban entrar al aeropuerto mientras decenas de empleados huían entre los balazos. También estaban cerrados escuelas y bancos, y el transporte público estaba paralizado. Varias instalaciones policiales estaban abandonadas.

Además, el cuestionado primer ministro enfrentó amenazas directas de un poderoso líder de una de las pandillas, quien dijo el martes que Haití se dirigía una “guerra civil” y a un “genocidio” si Henry se mantenía en el poder en el pequeño país caribeño.

“Si Ariel Henry no dimite, si la comunidad internacional sigue apoyándolo, nos dirigimos hacia una guerra civil que llevará a un genocidio”, declaró Jimmy Cherizier, apodado “Barbecue”, durante una entrevista con la prensa.

El gobierno de Haití no ha informado oficialmente del paradero de Henry. El Ejecutivo haitiano ha declarado el estado de urgencia y un toque de queda durante tres días ante la nueva escalada de la violencia que, entre otras derivadas, se ha traducido en una fuga masiva de presos de la principal cárcel de Puerto Príncipe.

La ya frágil situación de seguridad de Haití empeoró durante el fin de semana, mientras Henry se encontraba en Kenia para cerrar un acuerdo sobre el despliegue de tropas extranjeras para restablecer el orden.

Sin embargo, un líder de la oposición keniata afirmó el miércoles que presentaría un nuevo recurso judicial contra el plan de enviar agentes de policía al país caribeño. Ekuru Aukot declaró a Reuters que el acuerdo entre el presidente William Ruto y el primer ministro haitiano Ariel Henry no era válido y no tenía en cuenta las objeciones del juez que bloqueó el despliegue en enero tras una demanda del partido de Aukot.

Kenia anunció el año pasado que dirigiría una fuerza multinacional en Haití, pero meses de disputas legales han dejado en suspenso toda la misión.

Ruto dijo en una ceremonia de firma el viernes que el acuerdo con Henry aceleraría la llegada de los oficiales kenianos a Haití, pero su gobierno no ha proporcionado un calendario ni ha publicado el acuerdo.

Desplazamiento y hambruna

“Las bandas armadas nos obligaron a abandonar nuestros hogares. Destruyeron nuestras casas y estamos en la calle”, dijo el martes un hombre que dio su nombre como Nicolas y vive en un campamento.

La oficina de inmigración de Naciones Unidas informó durante el fin de semana que al menos 15.000 personas habían sido desplazadas debido a la violencia.

Personas que viven cerca de la Penitenciaría Nacional llevan sus pertenencias mientras abandonan la zona en Puerto Príncipe, Haití, el 4 de marzo de 2024.
Personas que viven cerca de la Penitenciaría Nacional llevan sus pertenencias mientras abandonan la zona en Puerto Príncipe, Haití, el 4 de marzo de 2024. - Créditos: @CLARENS SIFFROY

“No tuve tiempo de agarrar ninguna de mis cosas, ni siquiera mi ropa interior”, contó Jasmine, que no quiso dar su apellido, en un refugio el lunes. “No sabía qué hacer”

El grupo de derechos humanos Plan Internacional explicó que muchos estaban huyendo de la capital hacia Artibonito, tradicionalmente la región agrícola de Haití, pero cuyos residentes se enfrentan ahora a la escasez de alimentos a medida que los combates se extienden hacia el norte.

Tras una evaluación de 500 testimonios, descubrió que muchas familias se saltaban la comida de un día, más de la mitad de los niños estaban sin escolarizar y la falta de dinero hacía que muchos sintieran que no tenían otra opción que unirse a las bandas. Se calcula que entre el 30% y el 50% de los miembros de las bandas son menores, según la organización de defensa de los derechos de la infancia.

El director nacional de la organización, Allassane Drabo, afirmó que las niñas corren un riesgo especial de matrimonio forzado, ya que sus padres no pueden satisfacer sus necesidades básicas. “La violencia generalizada está robando la infancia a demasiadas niñas, que se ven obligadas a cambiar los libros de texto y el pan por armas y vestidos de novia”, afirmó.

Kwanli Kladstrup, director de país de la agencia de ayuda Concern Worldwide, dijo que se calcula que cinco millones de los 11 millones de haitianos padecen hambre aguda.

La ONU calcula que el conflicto ha expulsado a unas 300.000 personas de sus hogares y que el año pasado las bandas mataron a cerca de 5000 personas y secuestraron a casi 2500, a veces utilizando videos de violaciones y torturas para extorsionar a los amigos y familiares de las víctimas con costosos rescates.

Un hombre empuja su bicicleta junto al cuerpo de una persona que fue asesinada y quemada en Puerto Príncipe, Haití, el martes 5 de marzo de 2024.
Un hombre empuja su bicicleta junto al cuerpo de una persona que fue asesinada y quemada en Puerto Príncipe, Haití, el martes 5 de marzo de 2024. - Créditos: @Odelyn Joseph

Con la esperanza de apuntalar el apoyo público, el líder de la banda Jimmy Cherizier, conocido como Barbeque, declaró que una alianza de bandas conocida como Viv Ansanm (Vivir Juntos) liberaría pronto a sus rehenes sin pedir rescate, según informaron el martes los medios de comunicación locales.

Solución política

Desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021, las bandas violentas han ampliado el control de su territorio. Henry –que lidera un gobierno interino no electo– se había comprometido a renunciar en febrero, pero retrasó el proceso, citando la falta de seguridad.

Los problemas de Haití son profundos y no admiten soluciones fáciles, y Henry mismo es cada vez más impopular. Ante su incapacidad para gobernar, se multiplican los llamados a que renuncie. Las pandillas los han hecho suyos, con tal de acrecentar su propio poder, dijo el investigador Jake Johnston, del Centro de Investigaciones Económicas y Políticas con sede en Washington.

En este sentido, la Unión Europea apuntó este miércoles que la situación es “extremadamente preocupante” y requiere de que el primer ministro trabaje en una solución política de cara a las elecciones previstas para el próximo mes de agosto.

La UE apoya el establecimiento de la misión policial liderada por Kenia y que financia Estados Unidos y a la que han ofrecido personal Benín y Bahamas. El gobierno de Biden ha prometido fondos y apoyo logístico para la fuerza multinacional, pero se ha negado a enviar fuerzas estadounidenses.

El primer ministro de Haití, Ariel Henry
El primer ministro de Haití, Ariel Henry - Créditos: @OFICINA DEL PRIMER MINISTRO DE H

Las elecciones siguen siendo la mejor manera de estabilizar el país una vez que se restaure la seguridad, pero Estados Unidos deberá desistir de su apoyo a Henry para que la intervención tenga éxito, dijo Dan Foote, enviado especial del gobierno del presidente Joe Biden a Haití tras el asesinato de Moïse.

“Ninguna elección dirigida por Henry será aceptada por el pueblo haitiano”, argumentó. “Si no fuera por nuestro apoyo, los haitianos hubieran depuesto a Henry hace tiempo”.

Agencias AFP, AP, DPA y Reuters