Crisis bancaria: leve respiro en los mercados a la espera de una decisión clave de la Fed

Traders work on the floor of the New York Stock Exchange (NYSE) in New York, U.S., on Monday, June 27, 2022. Money managers betting on a sustained global rebound will be left sorely disappointed in the second half of this crushing year as a protracted bear market looms, even if inflation cools. Photographer: Michael Nagle/Bloomberg via Getty Images
Los principales indicadores de la bolsa de Nueva York tuvieron subas este lunes 20 de marzo - Créditos: @Bloomberg

WASHINGTON.- El subibaja de los mercados financieros que le dio oxígeno durante la última semana a los temores a una nueva crisis financiera global que lleve al mundo a otra recesión se tomó un respiro luego del anuncio de compra del banco suizo Credit Suisse por parte de UBS, y la decisión de los principales bancos centrales del mundo de inyectar liquidez para contener la ansiedad de los inversores. En un clima de escepticismo y cautela, el mundo quedó ahora a la espera de dos nuevas señales: la próxima decisión de la Reserva Federal sobre su tasa de interés, y el resultado de las negociaciones en Estados Unidos para el rescate privado de otro banco en problemas, First Republic Bank.

Luego de varios días en los que se movieron como un electrocardiograma, los bursátiles más relevantes de Europa y Wall Street lograron cerrar con subas en la apertura de la semana, aunque sin lograr sacarse de encima el estrés y la volatilidad que despuntaron con el colapso del Silicon Valley Bank, el puntapié de una crisis bancaria que el mundo desarrollado todavía intenta contener.

Clientes del SVB hacen cola en la puerta del banco
Clientes del SVB hacen cola en la puerta del banco - Créditos: @Getty Images

El domingo, y luego de que UBS cerró la compra de Credit Suisse, los bancos centrales de Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Japón y la Unión Europea anunciaron la primera reacción coordinada a la crisis: una inyección de liquidez para evitar nuevos cimbronazos en los mercados financieros.

Este lunes, al exponer en el Parlamento Europeo, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, volvió a defender la solidez del sistema bancario del Viejo Continente, al indicar que consideraban “muy satisfactorias” las posiciones de liquidez de los bancos y de exposición a deuda.

Luego de esas señales, el mundo seguía atento a dos señales: la próxima decisión de la Fed, y el rescate de First Republic Bank.

El Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal comenzará este martes su habitual encuentro de dos días para decidir si continúa con la suba o no de su tasa de interés, y, si decide proseguir con los aumentos, en qué magnitud. A lo largo del último año, la Fed elevó la tasa de interés desde el piso del 0% al 4,75% para combatir el peor brote inflacionario de las últimas cuatro décadas, una de las herencias de la pandemia del coronavirus y los históricos paquetes de estímulo fiscal diseñados por los gobiernos de Donald Trump y de Joe Biden.

Pero una de las consecuencias de esa empinada suba en la tasa de interés fue un golpe en los balances de las empresas, en particular de compañías que, como el Silicon Valley Bank, tenían una buena parte de sus activos invertidos en bonos del Tesoro, cuyo valor suele caer cuando sube la tasa de interés. Pese a la incertidumbre financiera, el mercado espera que la Fed vuelva a subir la tasa de interés, tal como hizo el Banco Central Europeo la semana pasada. La tasa de interés que fija la Fed es la utilizan los bancos para prestarse dinero, pero también influye en el costo que deben pagar los estadounidenses para endeudarse, ya sea con su tarjeta de crédito, en préstamos personales o en sus hipotecas.

El presidente de la Fed, Jerome Powell, en Washington
El presidente de la Fed, Jerome Powell, en Washington

A fines de enero, antes de que se desatara la crisis, los miembros del comité de la Fed que decide la política monetaria de Estados Unidos habían decidido aminorar el ritmo de la suba en la tasa de interés al ordenar un alza de un cuarto de punto, contra medio punto en diciembre, y 75 puntos básicos en noviembre del año anterior.

Analistas, economistas e inversores esperaban que la Fed ahora continuara con una suba de 25 puntos, una decisión que brindaría una señal de que, pese a las turbulencias, la Fed evalúa que aún no es momento de mostrar soltura en la lucha contra la inflación. Pero había quienes argumentaban que lo mejor que podía hacer la Fed ahora era poner pausa hasta tanto cediera un poco la incertidumbre, y se viera con mayor nitidez el impacto de las últimas subas sobre la inflación.

Además de la Fed, los mercados seguían atentamente las negociaciones de los principales bancos de Wall Street, liderados por JP Morgan, con First Republic, el último banco regional en problemas. Esa negociación ya fue bendecida por la Fed y el gobierno de Joe Biden. Los bancos inyectaron 30.000 millones de dólares la semana pasada en el banco californiano, y ahora las discusiones giran en torno a cómo se utilizará ese dinero. Las acciones de First Republic cayeron casi un 45% a un nuevo piso histórico para la entidad financiera en medio de las discusiones.