La creación de nuevas Universidades tensó un debate transversal, más allá del Congreso

El edificio que actualmente alberga el polo de educación superior de Escobar
El edificio que actualmente alberga el polo de educación superior de Escobar - Créditos: @Escobar.gob

LA PLATA.– El debate abierto en torno a la creación de seis nuevas universidades y la nacionalización de otras dos motivó un intenso contrapunto al interior del oficialismo y la oposición, más allá de la puja que quedó pendiente en la Cámara de Diputados de la Nación.

Los motivos más candentes para la polémica son el criterio con que se dispone la localización geográfica de las nuevas universidades, la ausencia de asignación presupuestaria para las casas de estudios y la oportunidad de invertir en educación superior mientras hay serios déficits en educación primaria y secundaria.

Axel Kicillof se metió de lleno en el debate con su veto sobre la sesión que se cayó en Diputados porque la mayoría de las nuevas casas de estudios están planificadas en la provincia de Buenos Aires: Delta (con sedes en Tigre, San Fernando y Escobar), Pilar, Saladillo, Cuenca del Salado (Cañuelas). Otras dos están previstas en la ciudad de Buenos Aires (Madres de Plaza de Mayo) y Río Tercero (Córdoba). A estas se suman la nacionalización de dos universidades ya existentes: una en Entre Ríos (Juan Laurentino Ortiz) -que aún no tiene dictamen- y otra en Ezeiza.

Esta última es la que enardeció a la oposición: el traspaso no prevé las autoridades actuales de la casa de estudios creada en orden provincial en 2019. El rector actual fue reelegido ante un intento desesperado e infructuoso de Alejandro Granados de aprobar antes la ley que nacionalice esa casa de estudios. El traspaso a la órbita nacional sin sus actuales autoridades es -según la oposición- una avasallamiento a la autonomía universitaria y a la ley de educación superior. El debate, en este caso, podría llegar hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

En el país ya hay 58 universidades. El oficialismo consiguió dictamen de mayoría con el respaldo de Evolución Radical (con disidencias parciales) y de bloques minoritarios, por lo que los textos quedaron en condiciones de ser tratados en el recinto. Pro y la Coalición Cívica cuestionaron fuertemente los proyectos y emitieron un dictamen de minoría, en tanto que la UCR se encolumnó con esa postura, salvo por su acompañamiento a la de Saladillo y Río Tercero.

La discusión sobre la localización quedó empañada por la sospecha de que las nuevas casas de estudios responden a pedidos de intendentes, funcionarios provinciales o ministros nacionales antes que a una necesidad académica de fortalecer las carreras en determinadas zonas del país.

Por caso: el proyecto de creación de la Universidad de la Cuenca del Río Salado fue presentado por la diputada nacional (mandato cumplido) y actual ministra de Ambiente bonaerense, Daniela Vilar (FDT), y prevé que su sede central esté en la ciudad de Cañuelas, con subsedes en localidades de esa región hídrica.

Este municipio está situado apenas a media hora en auto de Saladillo, donde se prevé la creación de otra casa de estudios impulsada por el radical Emiliano Yacobitti. Una situación similar se da con la Universidad del Delta. La casa de estudios impulsada por Sergio Massa y Alicia Aparicio, esposa del exintendente Luis Andreotti, comprenderá Tigre, Escobar y San Fernando. Y quedará situada a muy pocos kilómetros de la nueva casa de estudios de Pilar.

El ministro Sergio Massa en la UIA
El ministro Sergio Massa en la UIA - Créditos: @Santiago Filipuzzi

Hay además otro tipo de reparos: “Todos queremos una universidad en Tigre. Pero hay que ser conscientes de que la mitad de los habitantes de este distrito no termina el secundario y que en toda la provincia existe el mismo déficit. Hay que ocuparse de que lo chicos vayan a la escuela primero”, advirtió Segundo Cernadas, concejal de Pro y presidente del Concejo Deliberante ese distrito.

Por cuerda separada, la iniciativa que le da el carácter de “nacional” al existente Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo surge de un expediente presentado hace más de dos años por el diputado nacional y líder de la Central de Trabajadores de la Argentina, el kirchnerista Hugo Yasky. Sus contenidos, según proclama, estarán orientados a la “defensa, protección, investigación y promoción para el ejercicio efectivo de los derechos humanos”.

El proyecto que establece la creación de la Universidad Nacional de Ezeiza es de la exdiputada y actual ministra de Desarrollo Social Victoria Tolosa Paz (FDT); y prevé carreras y acciones de extensión e investigación vinculadas al “desarrollo aeroportuario, tecnológico y humano “.

El proyecto que establece la creación de la Universidad Nacional de Río Tercero parte de dos iniciativas de diferente signo político: una de la kirchnerista Gabriela Estévez y otra de Gabriela Brower de Koning (Evolución Radical).

La polémica atravesó internamente a la oposición. Desde Pro, Sabrina Ajmechet lamentó que “de las últimas 17 universidades que se crearon, 10 son en territorio bonaerense y siete en el resto del país”.

En contra del proyecto, Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) dijo que “el planeamiento estratégico de la educación superior debe ser un camino virtuoso, y acá no lo estamos teniendo para nada”. “No hay previsibilidad, no tenemos garantizada claramente una asignación de recursos que sean sostenibles. Y no solo se trata de crear más instituciones, sino de cómo mejoramos los indicadores: la calidad y la articulación con los niveles obligatorios de la enseñanza”, completó.

En cambio, la diputada Mónica Litza (Frente de Todos) celebró la creación de la Universidad Nacional de Ezeiza y se mostró orgullosa “de que estemos tratando estos proyectos y que en la Argentina haya muchas universidades públicas, gratuitas y de cercanía”.

En cambio, Rubén Barabani, concejal de Ezeiza, dijo a LA NACION: “Si la nacionalización fuera para mejorar el nivel de los alumnos, sería correcto. Si es solo para lograr el cambio de las autoridades, no”.

En las últimas horas hubo una asamblea en esa universidad, donde se reeligió al actual rector Daniel Galli. Esa asamblea quedo judicializada con un recurso interpuesto de no innovar. El rector esta en ejercicio hasta que la Justicia se expida sobre la legitimidad del reclamo. El peronismo intentaba apurar la nacionalización antes de la reelección del académico, ligado al radicalismo.

El diputado Alejandro Finocchiaro (Pro) dijo a LA NACION sobre la creación de las nuevas universidades: “El kirchnerismo se está robando la Universidad de Ezeiza” . Y agregó: “Es una barbaridad. No puede ser creadas como delivery para intendentes, gobernadores o funcionarios con influencia”. El exministro de Educación también advirtió que, según el proyecto, el intercambio de gestión “se pasa sin las autoridades constituidas en marzo de 2019, es decir que se vulnera la autonomía universitaria”. “Me gustaría llamar a la reflexión y pensar que vulnerar la autonomía universitaria es algo que no se ha hecho nunca en 39 años de democracia”, remarcó.

Alejandro Finocchiaro
Alejandro Finocchiaro - Créditos: @Alejandro Guyot

En tanto, Brouwer de Koning (Pro) defendió la creación de la Universidad Nacional de Río Tercero. “Río Tercero es una ciudad resiliente que sigue apostando, porque hace 27 años que el Estado nacional pergeñó una tragedia. Debe ser ese mismo Estado nacional el que repare y el que devuelva las oportunidades de volver a soñar y volver a proyectar”, señaló.

Marcelo Casaretto (Frente de Todos) defendió la creación de la Universidad Nacional Juan Laurentino Ortiz, con sede en Paraná: “Es una universidad que tiene desarrollo, tiene una fuerte presencia y que se está sosteniendo con una fuerte inversión de parte de los entrerrianos. Este proyecto le da jerarquía, lo cual va a permitir el desarrollo de esta importante comunidad universitaria”.

El debate donde iba a tratarse la creación de las nuevas universidades se cayó a comienzos de diciembre, cuando los palcos de la Cámara de Diputados estaban llenos de militantes a favor y en contra de las nuevas universidades. La sesión se levantó luego de gritos e insultos: quedó pendiente el debate en el recinto.