Un crédito fiscal apoya a agricultores de Oregon a alojar a sus trabajadores

El nuevo complejo de apartamentos Colonia Paz ofrece viviendas asequibles para trabajadores agrícolas y sus familias, el miércoles 24 de agosto de 2022 en Lebanon, Oregón.
El nuevo complejo de apartamentos Colonia Paz ofrece viviendas asequibles para trabajadores agrícolas y sus familias, el miércoles 24 de agosto de 2022 en Lebanon, Oregón.

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Se les pide a los legisladores de Oregon que decidan si deben extender un crédito fiscal diseñado para ayudar a incentivar el desarrollo de viviendas para la fuerza laboral agrícola, lo que permite a los desarrolladores de viviendas reclamar créditos por proyectos completados antes de enero del 2030.

Fuera del capitolio, los defensores y proveedores de viviendas para trabajadores agrícolas no están de acuerdo en una premisa fundamental: si el crédito fiscal funciona.

Los empleadores agrícolas que brindan vivienda dicen que el crédito no funciona para ellos porque requiere un capital inicial que muchas granjas no tienen.

Los desarrolladores de viviendas comunitarias dicen que funciona bien.

El periódico The Statesman Journal investigó el programa para entender cómo funciona.

¿Qué es el crédito fiscal de vivienda para trabajadores agrícolas?

Los legisladores crearon el crédito de vivienda para la fuerza laboral agrícola en 1989 para ayudar a compensar el costo de la construcción de viviendas para los trabajadores agrícolas.

El crédito se puede aplicar a los impuestos sobre la renta corporativos o personales para ayudar a pagar la construcción, rehabilitación o adquisición de viviendas para trabajadores agrícolas en Oregon, según el Departamento de Ingresos, y puede cubrir hasta el 50 por ciento de los costos elegibles del proyecto.

Los créditos se administran una vez que se completa el proyecto.

El programa es administrado por Servicios Comunitarios y de Vivienda de Oregon (OHCS por sus siglas en inglés). En 2021, la Legislatura votó para aumentar la cantidad de créditos disponibles por bienio de 7.25 a 16.75 millones de dólares.

¿Quién es elegible para créditos de vivienda para trabajadores agrícolas?

Cualquier persona, empleador u organización que construya o rehabilite viviendas para trabajadores agrícolas es elegible para solicitar el crédito. Las estipulaciones incluyen: la ocupación de las unidades es exclusivamente para trabajadores agrícolas y sus familias durante 10 años, y la OHCS supervisa el cumplimiento a través de un proceso de certificación anual.

Las unidades no tienen que estar ocupadas durante todo el año, por lo que los empleadores agrícolas pueden construir viviendas para empleados migrantes o temporales. No pueden ser ocupadas por nadie más que trabajadores agrícolas en ningún momento. Los residentes no tienen que trabajar en la agricultura todo el año, pero deben hacerlo durante al menos una parte del año.

Los trabajadores agrícolas, en este caso, no incluyen a los familiares directos de los operadores agrícolas que trabajan para la finca.

¿Cómo se han utilizado los créditos de vivienda para la mano de obra agrícola?

Un apartamento accesible según la ADA se encuentra en cada piso de Colonia Paz el miércoles 24 de agosto de 2022 en Lebanon, Oregon.
Un apartamento accesible según la ADA se encuentra en cada piso de Colonia Paz el miércoles 24 de agosto de 2022 en Lebanon, Oregon.

La OHCS divide las solicitudes de proyectos en dos grupos: Uno para viviendas en fincas y otro para viviendas comunitarias.

La vivienda en la granja suele ser una vivienda proporcionada por el empleador o en conjunto a una operación agrícola. La vivienda comunitaria incluye proyectos como Colonia Paz, un complejo de apartamentos en Lebanon construido específicamente para trabajadores agrícolas. Farmworker Housing Development Corporation (FHDC), el desarrollador principal del proyecto, reclamó 3.1 millones de dólares en créditos fiscales para ayudar a financiar el proyecto en el 2019, según los registros de OHCS.

Los fondos no están distribuidos uniformemente. El ochenta por ciento de los créditos fiscales disponibles se asignan a viviendas comunitarias. El veinte por ciento, o 1.67 millones de dólares, se reserva para viviendas en granjas porque los proyectos de viviendas en fincas generalmente cuestan menos, señaló Martin Jarvis, analista del programa de créditos fiscales estatales para la División de Viviendas de Alquiler Asequible de OHCS.

“Financiamos más proyectos en fincas, pero el monto en dólares es menor”, dijo Jarvis.

Los desarrolladores de viviendas en fincas reclaman un promedio de 125 mil dólares en créditos fiscales, según datos de la OHCS. La cantidad más alta reclamada por un proveedor de vivienda en una granja fue de 625 mil dólares por un huerto de cerezos en el 2017 por cuatro unidades de vivienda.

Mientras tanto, los proyectos comunitarios han reclamado hasta 3.5 millones de dólares en créditos. Tiene sentido, señaló Jarvis: los proyectos de vivienda comunitaria como Colonia Paz son más costosos de construir y ofrecen más a los residentes que las unidades de vivienda en fincas. Cuesta más construir 24 apartamentos con comodidades que construir un barracón o comprar una "unidad de vivienda prefabricada" o casas móviles.

Los proveedores de viviendas comunitarias, a su vez, enfrentan un proceso de solicitud más riguroso, expuso Jarvis. Los solicitantes deben identificar otras fuentes de financiación y proporcionar más detalles sobre el alcance de su proyecto.

¿Funciona la legislación sobre créditos para la vivienda de trabajadores agrícolas?

El crédito fiscal es un componente de los esfuerzos del estado para proporcionar más viviendas a los trabajadores agrícolas, explicó Jarvis. Y si el objetivo del estado es, en última instancia, disminuir la dependencia de la vivienda en la granja y reforzar la capacidad de los trabajadores agrícolas para establecerse en sus comunidades, el crédito es “la herramienta que tenemos” para hacerlo.

“OHCS siempre lo tiene en mente, si bien continuamente habrá una necesidad de viviendas en la granja y que las viviendas deben ser seguras, bien cuidadas y saludables”, dijo Jarvis, “creemos que es más importante considerarlo cómo reconstruyendo comunidades”.

Los proveedores de viviendas comunitarias están de acuerdo.

“El crédito fiscal para trabajadores agrícolas está funcionando bastante bien para viviendas comunitarias y en granjas”, afirmó Peter Hainley, director ejecutivo de CASA Oregon, una organización sin fines de lucro que ayuda a financiar y construir viviendas asequibles, incluidas viviendas comunitarias para trabajadores agrícolas.

Pero los empleados y representantes agrícolas no están tan convencidos.

“La economía agrícola le dirá: los agricultores son ricos en tierras pero pobres en efectivo”, comentó Jeff Stone, presidente de la Asociación de Viveros de Oregon, en una reunión reciente del Equipo de Facilitación de Vivienda para la Fuerza Laboral Agrícola Organizada por OHCS.

Y, dijo Stone, "los créditos realmente solo funcionan si muestra una ganancia".

Stone expuso que él y otros defensores de los productores quieren ver un modelo que brinde más asistencia financiera al principio, como una subvención.

Los desarrolladores y proveedores de viviendas corren con los gastos iniciales y los costos de construcción. No es útil obtener un crédito fiscal sobre el dinero que ya se ha gastado, si no se tiene ese dinero para gastar en primer lugar, destacó.

“Si desea tener una vivienda como resultado, ¿cómo se supera el primer paso para construirla realmente?” preguntó Stone.

Hainley no está convencido. Él piensa que la legislación está funcionando y aún tiene que ver evidencia de que no es así.

“Ustedes han financiado miles de unidades utilizando créditos fiscales para trabajadores agrícolas”, senialo en la reunión del equipo de facilitación de enero. “Realmente nos corresponde a nosotros celebrar el trabajo que se ha logrado”.

El programa de crédito fiscal tiene advertencias incorporadas para ayudar a contabilizar los costos iniciales. Los créditos se pueden vender o transferir a otras partes que contribuyen a los costos de construcción.

Así es como lo hacen muchos proveedores comunitarios, dijo Jarvis: encuentran un inversionista, o un banco, que esté dispuesto a comprar el crédito fiscal por adelantado. Una vez que se emite el crédito, los beneficiarios pueden transferirlo siempre que presenten un formulario conjunto con el departamento de ingresos.

“Es una forma de obtener dinero por adelantado”, aseguró Jarvis.

“Se supone que la transferencia es fácil”, explicó, pero se entiende cómo algo qué podría agregar una carga adicional a los agricultores que ya están al límite.

¿Qué pasará con el crédito de vivienda de mano de obra agrícola este año?

El programa de crédito fiscal se enfrentará a la legislatura para otra ronda de aprobación este año, y su estructura podría cambiar.

OHCS está explorando la creación de un programa de subvenciones específicamente para viviendas en granjas y el uso del crédito fiscal exclusivamente para proyectos de vivienda comunitarios. La fuerza fiscal de viviendas agrícolas, encargada por la ex gobernadora Kate Brown, también recomendó un programa fiscal de 5 millones de dólares para mantener las viviendas existentes en las granjas.

El programa de subvenciones sigue siendo solo una idea. Jarvis dijo que espera que gane impulso y sea respaldado.

Stone afirmó que está esperando saber más sobre la visión de la gobernadora Tina Kotek para la vivienda agrícola antes de hacer propuestas detalladas. Kotek prometió hacer de la vivienda una prioridad y declaró una emergencia para personas sin hogar en su primer día en el cargo.

"Hay muchas opciones", dijo. "Queremos darle a Kotek todas las oportunidades para enmarcar este debate de la manera que mejor le parezca".

Shannon Sollitt cubre a trabajadores agrícolas a través de Report for America, un programa que tiene como objetivo apoyar el periodismo local y la democracia informando sobre temas y comunidades no cubiertas. Comuníquese con ella por correo electrónico ssollitt@statesmanjournal.com.

Traducción Alfredo García

This article originally appeared on Salem Statesman Journal: Un crédito fiscal apoya a agricultores a alojar a sus trabajadores