Coronavirus: ¿cómo una infección de las vías respiratorias puede causar diarrea?
Dado que el coronavirus ha acaparado los titulares de todo el mundo durante meses, la mayoría de las personas sabe que debe prestar atención a la aparición de fiebre, tos y pérdida de sabor u olfato.
Sin embargo, a algunos les puede sorprender el hecho de que la infección respiratoria pueda causar diarrea.
Esto se puede prestar a confusión, por ejemplo, el sistema de salud británico (NHS) no reconoce este problema intestinal como uno de los tres “síntomas principales”, pero los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, así como la Organización Mundial de la Salud, sí lo hacen.
Algunas personas pueden preguntarse cómo el coronavirus, que es una infección de las vías respiratorias, afecta el intestino.
Una investigación preliminar sugiere que la infección es leve en cuatro de cada cinco casos, pero puede desencadenar una enfermedad llamada COVID-19.
Coronavirus: ¿cómo causa diarrea?
El coronavirus surgió a finales de 2019, por lo que todavía hay muchas cosas que los científicos no conocen sobre este patógeno.
Aunque desde el inicio el NHS identificó la fiebre y la tos como síntomas, fue hace poco que agregó a la lista la pérdida de sabor u olfato.
También se han observado otros signos de la infección que van desde la conjuntivitis hasta la decoloración de los dedos de las manos y pies.
“Decimos que es un virus respiratorio, pero no afecta únicamente a las vías respiratorias”, le explicó a Yahoo Reino Unido la doctora Nathalie MacDermott del King’s College de Londres.
“Cualquier infección viral puede causar una gran variedad de síntomas. Los llamamos virus respiratorios, porque ese es el sistema que afecta principalmente o por donde ingresa al cuerpo”.
Aunque no es una cepa de coronavirus, la gripe estacional también puede causar diarrea.
Se han detectado rastros de coronavirus en muestras fecales, lo cual sugiere que puede propagarse a través de las heces.
“Existe evidencia de que el coronavirus puede infectar el intestino mediante la detección de ARN viral en las heces”, le dijo a Yahoo Reino Unido el profesor Paul Hunter de la Universidad de Anglia del Este.
El coronavirus es un virus ARN. En términos sencillos, el ARN es un precursor del ADN, que es más conocido.
Sin embargo, el profesor Hunter señaló que la diarrea es un síntoma relativamente poco frecuente. Estudios realizados en hospitales del Reino Unido sugieren que solo la sufren del 10 al 15 % de los pacientes.
“Es probable que el mecanismo subyacente sea una infección del intestino y daño celular”, explicó.
El doctor MacDermott se pregunta si el coronavirus “invade la pared intestinal”.
En ese caso puede desencadenar un “proceso inflamatorio” que provoca dolor abdominal, espasmos y diarrea.
“Los virus alteran el organismo”, dijo el doctor MacDermott.
“Desencadenan un proceso inflamatorio y el cuerpo produce sustancias químicas para combatir ese virus, que puede alterar los movimientos del intestino grueso o delgado”.
La inflamación también es una acción protectora que lanza el sistema inmune para combatir un patógeno.
De hecho, la diarrea no es el único síntoma no respiratorio que se ha relacionado con el coronavirus.
Los pacientes, especialmente los niños, se han quejado de sabañones, erupciones cutáneas y “dedos COVID”.
“El coronavirus genera una gran respuesta inmune, de manera que puede afectar todas las partes del cuerpo”, había explicado anteriormente a Yahoo Reino Unido la doctora Veronique Bataille, dermatóloga de The Medical Chambers
“Puede causar daño renal o cardíaco”.
“Como médico, le recomendaría a cualquier persona que sufra algo inusual en estos momentos, como una erupción cutánea o fatiga extrema que se diga: ‘oh, creo que soy portador’”.
“Es mejor ser excesivamente cauteloso y no infectar a otras personas”.
¿Qué es el coronavirus?
El coronavirus es una de las siete cepas de una clase de virus que infecta a los humanos.
Otras cepas causan todo tipo de problemas, desde el resfriado común hasta el síndrome respiratorio agudo severo (SARS), que mató a 774 personas durante su brote en marzo de 2002.
Desde que se identificó el brote actual de coronavirus, se han confirmado más de 6,1 millones de casos en todo el mundo, según la Universidad Johns Hopkins.
De esos casos, se sabe que más de 2,6 millones se han “recuperado”.
A nivel mundial, el número de muertos ha superado los 372 100.
El coronavirus se propaga principalmente en los encuentros cara a cara a través de las gotitas infectadas que expulsamos al toser o estornudar.
También existe evidencia de que puede sobrevivir sobre las superficies.
No existe un tratamiento “estandarizado” contra el coronavirus, la mayoría de los pacientes luchan de manera natural contra la infección.
Quienes necesitan ser hospitalizados reciben “atención de apoyo”, como ventilación, mientras su sistema inmunitario se pone en marcha.
Los sanitarios animan a las personas a evitar infecciones lavándose las manos con regularidad y manteniendo el distanciamiento social.