Coronavirus: con el arranque de las convenciones, EE.UU. se sumerge en una inédita campaña virtual
WASHINGTON.- No habrá lluvia de globos ni multitudes apretujadas en un estadio, sacudiendo carteles al aire o aturdidas por los aplausos y las ovaciones de pie. Estados Unidos dará el puntapié en los próximos días, con la nominación en las convenciones partidarias del presidente, Donald Trump , y su rival demócrata, Joe Biden , a una carrera presidencial tan histórica como atípica: será la primera campaña virtual por la pandemia del coronavirus.
Por primera vez, las dos convenciones del Partido Republicano y el Partido Demócrata se realizarán de manera virtual, y los delegados nominarán a los candidatos de las fórmulas de manera remota, o cumpliendo estrictos protocolos de distanciamiento social y rastreo. Ni Trump ni Biden tienen previsto viajar a Charlotte, sede de la convención republicana, o Milwaukee, sede del encuentro demócrata, que comenzará el lunes, para brindar sus discursos.
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Las dos convenciones virtuales servirán de antesala para una campaña presidencial que romperá con todas las tradiciones. Despojada de la liturgia y las multitudes, sin mítines ni viajes frenéticos por los estados donde se decidirá la contienda, el camino hacia la Casa Blanca se recorrerá en pantallas: todo ocurrirá en televisores, computadoras, tabletas o teléfonos.
Al ser un formato nuevo, nadie sabe a ciencia cierta cómo funcionará, y si puede terminar por beneficiar a Biden -a quién Trump critica porque "no sale del sótano de su casa"-, o a Trump, mucho más eficaz para usar las redes sociales, pero para quien el calor de su gente es una de sus principales fuentes de energía.
Elección abierta
La elección está abierta. Biden mantiene una saludable ventaja de 8,5 puntos en las encuestas nacionales, según el promedio del sitio FiveThirtyEight, y aún aparece al frente en varios estados cruciales, como Pensilvania, Wisconsin, Michigan, Florida e incluso en Arizona, un bastión republicano. Pero la popularidad de Trump parece comenzar a remontar luego de caer hasta el 40%, su piso histórico, el cual el presidente rara vez ha perforado, aún pese al desmanejo de la pandemia del coronavirus y la fuerte crisis de la economía.
Las convenciones servirán para que cada partido presente su plataforma y los candidatos expongan su mensaje a los votantes. La elección se plantea como un referéndum a la presidencia de Trump. El presidente intenta pintar a Biden y su candidata a vicepresidenta,
Kamala Harris , como dos políticos radicales de izquierda que descarrilarán al país, pese a que ambos representan al ala moderada del Partido Demócrata. Biden dice que en la elección se juega "el alma de la nación", y concentra su discurso en atacar a Trump, más que en exponer su propia visión de futuro.
"Donald Trump está en camino de dejar el cargo con el peor historial en creación de empleo de cualquier presidente estadounidense en la historia moderna", dijo Biden, al presentar a Harris como compañera de fórmula."Pero en lugar de hacer el arduo trabajo de reunirse cara a cara con líderes del Congreso, demócratas y republicanos, para brindarles a los estadounidenses el alivio que necesitan y merecen, Donald Trump está en el campo de golf", atizó el demócrata.
Trump y su campaña intentan encuadrar la elección como una opción entre mantener el rumbo que impuso el magnate, o un giro hacia la "izquierda radical". "Esta es la elección más importante. Es una elección entre la seguridad, el patriotismo y la prosperidad que ofrece nuestro movimiento y la anarquía, el caos, el crimen, el socialismo prometidos por Joe Biden y un grupo de personas de la izquierda muy, muy radical que lo han llevado de paseo", dijo Trump día atrás.
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El discurso de Trump no ocurrió ante una multitud en un estadio, tal como le hubiera gustado, sino en un mitin que su campaña organizó con foco en Wisconsin, uno de los estados en disputa. Trump dio su discurso por teléfono, una muestra más del mundo virtual desatado por el coronavirus.
La convención demócrata pondrá a todas sus figuras en el horario estelar. Hablarán Barack y Michelle Obama, Bill y Hillary Clinton; las figuras progresistas del partido, Bernie Sanders, Elizabeth Warren y Alexandria Ocasio-Cortez; el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, que ganó protagonismo con la pandemia, y la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, quien llegó a ser una de las finalistas para ser vicepresidenta de Biden. Varios de los nombres que disputaron la interna presidencial también darán presente: Amy Klobuchar; Andrew Yang, y Peter Buttigieg, quien podría ocupar un cargo en el gabinete de Biden, si resulta electo.
Luego de buscar la presidencia en 1988 y 2008, Biden, de 77 años, aceptará la nominación presidencial del Partido Demócrata el próximo jueves, en el que será el discurso más importante de su larga carrera política.
La convención republicana ocurrirá a la semana siguiente de la demócrata, y tendrá el mismo formato, aunque lo delegados republicanos si tienen previsto viajar a Charlotte, en Carolina del Norte, bajo estrictos protocolos de seguridad para evitar contagios de Covid-19.