Corea del Sur lanzó su primer satélite espía militar de SpaceX para monitorear al regimen de Kim Jong-Un
SEÚL.- Corea del Sur lanzó su primer satélite espía militar en Estados Unidos, en medio de las tensiones por la carrera espacial con Corea del Norte. El líder autoritario norcoreano, Kim Jong Un, había lanzado el satélite espía “Malligyong-1″ la semana pasada, que avivó la tirantez en la península. El Falcon 9 de SpaceX, la compañía del magnate Elon Musk, alcanzó la órbita con éxito y es capaz de monitorear actividades norcoreanas.
El ministerio surcoreano de Defensa, Shin Won-Sik, indicó este sábado que el satélite alcanzó la órbita poco después de que el cohete despegara de la base espacial estadounidense de Vandenberg, en California, a las 3.29 hora de Seúl. “Se separó exitosamente del proyectil 11 minutos después, y se situó en su trayectoria orbital prevista”, indicó el ministerio en un comunicado. “Hemos confirmado su comunicación con el control terrestre”, agregó.
El aparato se convirtió así en el primer satélite de observación militar de Corea del Sur y podrá monitorear las actividades norcoreanas, que se presume cuentan con armas nucleares. Seúl planea lanzar cuatro satélites adicionales para finales de 2025 con el objetivo de aumentar sus capacidades estratégicas.
“Teniendo en cuenta su resolución y su capacidad de observación de la Tierra, nuestra tecnología satelital se encuentra entre las cinco primeras del mundo”, afirmó un funcionario del ministerio de Defensa, citado por la agencia Yonhap.
Para controlar las actividades de Pyongyang, “hasta ahora, Corea del Sur se ha basado en gran medida en los satélites de reconocimiento estadounidenses”, explicó Choi Gi-il, profesor de la Universidad Sangji. Pero después del exitoso lanzamiento de un satélite espía por parte de Corea del Norte, “el gobierno de Corea del Sur también debe demostrar que puede hacerlo”.
Pyongyang amenazó esta semana con “destruir” los satélites espía estadounidenses si Washington “intenta violar el territorio legítimo” de Corea del Norte, en referencia a su programa satelital.
Desde el lanzamiento del satélite norcoreano “Malligyong-1″, Pyongyang afirma que pudo observar importantes puntos en Estados Unidos y Corea del Sur. Sin embargo, no se han hecho públicas ningunas imágenes de los avistamientos que alega logró realizar.
El ambicioso programa militar y nuclear de Kim Jong-Un
Desde desfiles hasta exhibiciones de armamento, el régimen de Corea del Norte ha seguido adelante con su programa de misiles balísticos y el año pasado lanzó decenas de misiles avanzados a pesar de las resoluciones y sanciones de las Naciones Unidas (ONU).
En septiembre, Kim Jong-Un logró modificar la Constitución para inscribir su estatus de potencia nuclear y legalizó ataques nucleares preventivos.
Kim sostuvo que “el propósito de Estados Unidos es deshacerse” de las armas nucleares de Corea del Norte para destruir de esa forma al gobierno norcoreano, y advirtió que en ese caso, Pyongyang “ejercerá su derecho a la autodefensa”, informó el gobierno en un comunicado.
La diplomacia se encuentra estancada y la posibilidad de negociar una desnuclearización de la península parece ínfima. A menudo Kim ha expresado su molestia ante el despliegue de activos estratégicos estadounidenses, como portaaviones, bombarderos de largo alcance y submarinos nucleares, así como a maniobras militares conjuntas.
Agencia AFP.