SEÚL.- Corea del Norte disparó este viernes más de 200 proyectiles de artillería desde su costa occidental, hacia la isla surcoreana de Yeonpyeong, según informó el ejército de Corea del Sur. Poco después, Seúl emitió una advertencia de evacuación a los civiles en la isla como “medida preventiva”, indicaron funcionarios a la Agencia AFP.

“El Ejército norcoreano efectuó hoy unas 200 rondas de disparos en las áreas de Jangsan-got, en el noreste de la isla de Bangnyeong, y las áreas al norte (...) de la isla de Yeonpyeong”, afirmó un oficial del ministerio en una conferencia de prensa.

Los proyectiles de artillería disparados no entraron en territorio surcoreano, ya que todos cayeron en la zona de amortiguamiento entre los dos países, informó la BBC.

Corea del Norte calificó sus disparos de “respuesta natural” a las amenazas de Corea del Sur y negó estar amenazando la paz en la península coreana, informaron los medios estatales. Los ejercicios de Pyongyang “ni siquiera tuvieron un impacto indirecto en las islas (surcoreanas) de Baengnyeong y Yeonpyeong”, donde las autoridades locales ordenaron la evacuación de residentes a los refugios, aseguró la agencia de noticias oficial norcoreana KCNA.

El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur dijo que el incidente no causó “ningún daño al pueblo ni al ejército”, pero añadió que el acto “amenaza la paz en la península de Corea y aumenta las tensiones”.

Según informó el medio británico, Corea del Sur consideró la medida como “un acto de provocación”.

El último incidente se produjo meses después de que Corea del Norte suspendiera por completo un acuerdo militar con el Sur destinado a reducir las tensiones. En 2010, la artillería norcoreana disparó decenas de veces contra la isla de Yeonpyeong y mató a cuatro personas.

La isla surcoreana de Yeonpyeong está situada en el mar Amarillo, uno 80 kilómetros al oeste de Incheon y 12 kilómetros al sur del litoral de la provincia norcoreana de Hwanghae. Fue escenario de enfrentamientos navales intercoreanos a lo largo de los años.

Acusaciones

El Sur acusó al Norte de restaurar los puestos de guardia de primera línea que había desmantelado en base al pacto de 2018, luego de que Seúl reanudó la vigilancia aérea en la primera línea en protesta por el lanzamiento del satélite.

En la semana los medios estatales norcoreanos reportaron que el líder del país, Kim Jong Un, ordenó a las autoridades que incrementen la producción de lanzamisiles móviles debido a que la nación se encuentra ante un inminente enfrentamiento militar con sus enemigos.

La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (ACNC), bajo control gubernamental, dijo que Kim Jong Un efectuó esa orden durante una visita a una fábrica que produce transportadores erectores lanzadores (TEL, por sus siglas en inglés), aunque no indicó cuándo fue ni dónde se encuentran las instalaciones.

Los TELs son vehículos móviles de lanzamiento que dan a Corea del Norte la capacidad de mover misiles por su territorio, lo que dificulta que sus adversarios detecten los lanzamientos por adelantado. Algunos expertos surcoreanos estiman que Pyongyang cuenta con entre 100 y 200 vehículos de este tipo.

Kim Jong-un subrayó que el rol de la fábrica “es muy importante” para reforzar la defensa nacional norcoreana, “dada la grave situación imperante que exige que el país esté más firmemente preparado para una confrontación militar con el enemigo”, según reportó ACNC.

Agencias AP y AFP