Contactos secretos reactivan la búsqueda de Austin Tice, desaparecido en Siria hace 10 años

A las 4:30 de la mañana del 2 de mayo, Debra y Marc Tice se despertaron en su casa de Texas con una llamada telefónica de la Casa Blanca. El presidente Joe Biden quería reunirse con ellos en Washington esa tarde.

Era una oportunidad que no iban a desaprovechar. Su hijo, Austin Tice, periodista y ex marine estadounidense, había sido secuestrado en Siria hace casi una década. Los esfuerzos de Estados Unidos por localizarlo y traerlo a casa se habían estancado.

Así que los Tice se apresuraron en llegar al Despacho Oval ese día. Biden entró en la reunión bien informado, bordeado por altos funcionarios de seguridad nacional, según dos personas que asistieron a la reunión.

A pesar de las negociaciones con el régimen sirio de Bashar al-Assad, los sirios seguían sin discutir seriamente el caso de Tice. La última reunión directa en enero de 2022, resultó también infructuosa.

El presidente describió a la familia una floreciente política sobre Siria que creía que pudiera proporcionar una apertura para que Assad se involucrara en el caso de Tice, señalando la reciente exención de sanciones de Estados Unidos a entidades del norte de Siria. Pero hasta el momento nada había conducido a un avance.

Biden se recostó en su silla y dijo: “Simplemente no sé qué más hacer”.

“Bueno, este es un gran día porque estoy en su oficina”, respondió Debra Tice.

Diez años después de la desaparición de Austin Tice, y tres meses después de aquella reunión, un esfuerzo extenso, multinacional y a menudo vacilante para recuperarlo está mostrando indicios de reactivación.

Los canales de comunicación a través de terceros que estuvieron inactivos durante meses han vuelto a funcionar y el contacto directo entre Estados Unidos y Siria está en marcha de forma discreta, lo que aumenta las esperanzas de que sea posible una negociación seria.

Austin Tice, periodista independiente, lleva detenido en Siria desde 2012.
Austin Tice, periodista independiente, lleva detenido en Siria desde 2012.

Desaparecido durante tres presidencias

Para los Tice, suplicar a un presidente que diera prioridad al caso de su hijo era un asunto bastante familiar. Este era el tercer presidente con el que se reunían desde que Austin fue secuestrado en un punto de control al suroeste de Damasco el 14 de agosto de 2012, mientras reportaba sobre el deslizamiento hacia la guerra de Siria para McClatchy, The Washington Post y otras publicaciones.

La presidencia de Barack Obama se vio consumida por el estallido del conflicto sirio en 2011, y su decisión de romper las relaciones diplomáticas con Damasco, cerrando la embajada de Estados Unidos ahí y la de Siria aquí, cortó las vías típicas que tendría un país para negociar el retorno seguro de sus ciudadanos.

El presidente Barack Obama, acompañado por el vicepresidente Joe Biden, hace una declaración sobre Siria en la Rosaleda de la Casa Blanca el domingo 31 de agosto de 2013.
El presidente Barack Obama, acompañado por el vicepresidente Joe Biden, hace una declaración sobre Siria en la Rosaleda de la Casa Blanca el domingo 31 de agosto de 2013.

El gobierno estadounidense evaluó en 2012 que los sirios habían detenido a Tice. En 2014, mientras la guerra se recrudecía y un nuevo grupo extremista, el Estado Islámico, ganaba terreno, Debra Tice pasó 83 días en Damasco —igual que los 83 días que Austin estuvo sobre el terreno reportando desde el país— en busca de respuestas.

Le costó conseguir reuniones, pero finalmente recibió un mensaje de un alto funcionario sirio. “No me reuniré con la madre”, decía el mensaje. “Envíe a un funcionario del gobierno de Estados Unidos con el cargo adecuado”. La nota cristalizó su creencia de que la libertad de Austin solo podría conseguirse mediante negociaciones directas

En 2016, funcionarios estadounidenses dijeron que tenían “mucha confianza” de que Tice estaba vivo y detenido por siria. Pero el régimen de Assad continuó negando cualquier conocimiento de su paradero o condición, postura que ha mantenido hasta hoy.

El ex consejero de Seguridad Nacional John Bolton se había ofrecido a testificar en el juicio de Trump en el Senado si fuera citado.
El ex consejero de Seguridad Nacional John Bolton se había ofrecido a testificar en el juicio de Trump en el Senado si fuera citado.

Donald Trump realizó propuestas a Siria que podían haber cambiado significativamente la política de Estados Unidos para localizar y devolver a Tice, una posición que enfrentó oposición dentro de su propia administración. El esfuerzo de Trump no logró atraer a Assad a conversaciones serias.

“Creo firmemente que, en cualquier situación de rehenes, no se hacen tratos con terroristas, porque tan pronto como tienes un quid pro quo, estás poniendo un precio a las vidas estadounidenses”, dijo en una entrevista John Bolton, asesor de Seguridad Nacional de Trump de 2018 a 2019.

“Quizá saques a un rehén y quizá como resultado consigas 10 rehenes más”, dijo Bolton, que se ha convertido en un crítico de Trump tras dejar la Casa Blanca.

Desde Altal, Siria, la bandera revolucionaria de tres estrellas ondea en lo alto de una posición gubernamental momentos después de su captura por las fuerzas rebeldes.
Desde Altal, Siria, la bandera revolucionaria de tres estrellas ondea en lo alto de una posición gubernamental momentos después de su captura por las fuerzas rebeldes.

En agosto de 2020, el enviado presidencial especial de Estados Unidos para Asuntos de Rehenes, Roger Carstens, y un alto funcionario de Seguridad Nacional de la administración de Trump, Kash Patel, viajaron a Damasco para una reunión poco frecuente para discutir el caso de Tice. Carstens ha permanecido en su puesto bajo el mandato de Biden.

Los sirios empezaron con una oferta aspiracional. Solo una vez que Estados Unidos retire todas sus tropas del territorio sirio, levante las sanciones y normalice las relaciones diplomáticas con Assad, comenzarían a hablar de los intereses de Estados Unidos, dijeron los sirios, según tres funcionarios estadounidenses familiarizados con el asunto. Los sirios no quisieron hablar explícitamente sobre Tice.

Debra Tice dice que cree que eso debía ser la salva de apertura en una dura negociación a la que los estadounidenses nunca dieron seguimiento. “Es importante tener en cuenta que esa fue la primera reunión”, dijo en una entrevista. Pero los funcionarios de las administraciones de Trump y Biden consideraron que esa oferta sugería que los sirios no se tomaban en serio el diálogo.

Contacto directo con Siria

Los Tice llevaban meses frustrados con la administración de Biden antes de su visita del 2 de mayo, cuestionando si el presidente o su equipo hubieran dado mucha consideración al caso de Austin. Su reunión en el Despacho Oval ocurrió después de que los periodistas hicieran un llamamiento público y en persona a Biden en la cena anual de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca días antes, el 30 de abril, lo que provocó que el presidente respondiera con la promesa de una reunión.

En una declaración hecha el miércoles para conmemorar el decenio de la desaparición de Tice, Biden dijo que Estados Unidos sabía “con certeza” que el régimen de Assad había retenido a Tice. “Hemos pedido repetidamente al gobierno de Siria que colabore con nosotros para que podamos traer a Austin a casa”, dijo Biden. “En el décimo aniversario de su secuestro, pido a Siria que ponga fin a esto”.

El director del FBI, Chris Wray, renovó el llamamiento de la oficina para obtener información sobre el paradero de Tice. El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que Carstens “continuará involucrado” con el gobierno sirio y exigió que Damasco reconozca su caso.

Altos funcionarios de Biden afirman que han recurrido a todos los canales posibles —directos y de otro tipo— para conseguir que los sirios negocien.

Los múltiples canales no oficiales de Estados Unidos con los sirios, de los que se ha informado públicamente a lo largo de los años, siguen activos.

Varios aliados de Estados Unidos en el Medio Oriente mantienen relaciones diplomáticas con Assad, como los Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Catar, lo que ofrece oportunidades para que Estados Unidos se involucre. La embajadora checa en Siria, Eva Filipi, ha estado en Damasco durante toda la guerra y se ha involucrado en el caso desde que su gobierno comenzó a representar formalmente los intereses de Estados Unidos allí en 2012.

Pero los checos, que cumplen en gran medida una función consular para los estadounidenses, solo pueden llegar hasta cierto punto en la representación de Estados Unidos en las conversaciones sobre Tice. Así que la administración ha incrementado sus esfuerzos a través de otras vías.

James Baker, ex secretario de Estado, del Tesoro y de Comercio, que se reunía con frecuencia con el padre de Assad cuando este era presidente de Siria, se considera bien posicionado para entablar contacto con Damasco. El Baker Institute concedió a Tice su premio a la excelencia en el liderazgo en abril. Baker, que es de Texas, el estado natal de Tice, no respondió a las solicitudes de comentarios.

En Líbano, Abbas Ibrahim, un general de alto rango y jefe de inteligencia, forma parte de lo que él llama una negociación secreta entre los estadounidenses y los sirios que se ha intensificado desde la reunión de Biden con la familia Tice.

“Lo que estoy tratando de hacer es construir un puente de confianza entre los sirios y los estadounidenses sobre este caso”, dijo Ibrahim en una entrevista. “Puedo decirte que todavía estoy en el proceso secreto, así que no puedo hablar nada sobre el proceso ahora. Pero puedo decir que las cosas van por buen camino, porque hay cartas, mensajes, de una parte a otra”.

Ibrahim se reunió con funcionarios de la Casa Blanca y del Departamento de Estado en Washington a finales de mayo.

“Están haciendo lo que pueden, pero no sé hasta dónde pueden llegar las iniciativas de su parte”, añadió Ibrahim, refiriéndose a los estadounidenses. “Aquí estamos hablando de política y de Austin Tice”.

La Casa Blanca realizó una revisión de la política sobre Siria durante el primer año de la presidencia de Biden. La administración dice ahora que está comprometida con un acuerdo político de conciliación en Siria respaldado por Naciones Unidas que conduzca a elecciones democráticas. Sin embargo, el presidente no ha nombrado a un enviado especial para Siria, una persona cuya responsabilidad principal en las dos últimas administraciones era reforzar los esfuerzos de paz de la ONU.

Soldados estadounidenses del 2º Pelotón, Compañía Alfa, 1/163º Batallón de Armas Combinadas, descargan vehículos de combate M2A3 Bradley de un C-17 Globemaster de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en el noreste de Siria el 31 de enero de 2022. (Foto del Ejército de EEUU por Spc. William Gore)
Soldados estadounidenses del 2º Pelotón, Compañía Alfa, 1/163º Batallón de Armas Combinadas, descargan vehículos de combate M2A3 Bradley de un C-17 Globemaster de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en el noreste de Siria el 31 de enero de 2022. (Foto del Ejército de EEUU por Spc. William Gore)

La administración dice que no normalizará las relaciones con el régimen de Assad debido a sus atrocidades contra el pueblo sirio en una guerra que ha dejado más de 400,000 muertos. Pero tampoco protesta por las acciones de otros países de la región para renovar las relaciones con Damasco. Cientos de soldados estadounidenses permanecen en el país como parte de una coalición que lucha contra los militantes del Estado Islámico.

En las semanas posteriores a la reunión de los Tice en el Despacho Oval, funcionarios sirios y estadounidenses intercambiaron llamadas telefónicas, cartas y correos electrónicos, y los sirios plantearon preguntas a los estadounidenses sobre cómo serían las conversaciones, dijo Ibrahim.

“Estamos tratando de encontrar la manera de involucrarnos con los sirios para recibir su ayuda en la localización y devolución de Austin Tice”, dijo Carstens en una entrevista.

Debra Tice cuenta los días desde su reunión con Biden, en la que este instruyó a su equipo al menos tres veces que consiguieran una reunión con altos funcionarios sirios.

“Esto es lo que hay que hacer: un compromiso directo con el gobierno sirio”, dijo. “No hay otro canal para Austin”.

Funcionarios de la administración de Biden se reunieron con funcionarios sirios para discutir el caso de Tice, así como los de otros estadounidenses que se cree que están detenidos en Siria, y han mantenido la comunicación sobre el tema, dijeron dos altos funcionarios de la administración a McClatchy.

Carstens y su equipo no han acusado al propio Assad de retener a Tice, dejando la puerta abierta a la posibilidad de que otro grupo lo tenga. Pero “creemos que Bashar al-Assad tiene el poder de localizar y devolver a Tice”, añadió.

El caso único de Tice

En privado, los funcionarios estadounidenses se preguntan por qué el gobierno sirio se ha negado a entablar conversaciones serias sobre Tice durante tanto tiempo cuando hay mucho que ganar para Damasco.

Dos altos funcionarios describieron el caso de Tice como único entre las docenas de rehenes retenidos en todo el mundo en esta última década por pandillas, delincuentes, piratas, grupos terroristas y estados hostiles. Normalmente, una organización que decide retener a un estadounidense lo hace con el propósito explícito de negociar. Los sirios nunca han expresado ese interés, y la falta de cualquier prueba de vida hace que el caso de Tice se destaque.

“Soy un poco escéptico: no ha habido ninguna prueba de vida”, dijo David Schenker, subsecretario de Estado para Asuntos de Cercano Oriente de 2019 a 2021. “Las probabilidades... es mucho tiempo”.

Los funcionarios de la administración de Biden mantienen la creencia sincera de que Austin sigue vivo bajo custodia siria.

“Procedemos cada día en nuestros esfuerzos para traer a Austin a casa sobre la base de que está vivo”, dijo Carstens.

Cena con el Ejército Sirio Libre tras cruzar a Siria, el 23 de mayo de 2012.
Cena con el Ejército Sirio Libre tras cruzar a Siria, el 23 de mayo de 2012.

Después que Patel y Carstens regresaran de Damasco, Mike Pompeo, entonces secretario de Estado de Trump, emitió un comunicado en el que afirmaba que la política de Estados Unidos sobre Siria no cambiaría.

“El hecho de que el secretario no estuviera dispuesto a cambiar la política exterior de Estados Unidos a cambio de un rehén estadounidense era, creo, totalmente razonable y una política estadounidense bastante estándar”, dijo Schenker.

Pero los padres de Tice vieron cómo Pompeo, Bolton y otros miembros de la administración de Trump socavaban a un presidente que había estado dispuesto a discutir cambios en la política hacia Siria a cambio del regreso de Austin.

Debra Tice se pregunta si lo mismo está ocurriendo ahora en la administración de Biden.

“Dado que esa fue una reunión casual con este presidente, y que Biden no es un apasionado de esta situación, me cuesta imaginar que esté haciendo algún tipo de seguimiento”, dijo Debra Tice, “que esté haciendo alguna pregunta de seguimiento sobre cómo va el esfuerzo de Austin Tice”.

Pero no tiene ninguna duda de que Austin está vivo, señalando un video que apareció seis semanas después de su desaparición y que supuestamente lo muestra en cautividad, con los ojos vendados y recitando una oración en árabe. Teniendo en cuenta su valor como cautivo estadounidense de alto perfil, la experiencia de Siria como anfitrión de sitios negros para la CIA a principios de la década de 2000, la nota de 2014, la paciencia estratégica y la ofuscación de Assad, y la falta de cualquier prueba de la muerte, dijo que la duda no pasa por su mente.

En cambio, lo que preocupa a Debra Tice es si su hijo ha mantenido los sueños que tenía al entrar en la treintena, cuando se aventuró en Siria para contar las historias de los afectados por la guerra, solo para que su vida se viera interrumpida por su repentina captura.

“Lo que realmente importa es ¿cómo han sido estos diez años para Austin?”, preguntó. “Esa es una meditación más seria para mí”.

En la Casa Blanca, Debra Tice dijo al equipo de Biden cuántos días faltaban exactamente para el cumpleaños de Austin. Cumplió 31 años mientras reportaba en Siria cerca de los bombardeos, tres días antes de ser detenido

“Por favor, no dejen que Austin cumpla esa marca”, les dijo, “dondequiera que él lleve la cuenta del tiempo, donde tenga que darse cuenta de lo han dejado ahí 10 años. Por favor, no dejen que eso ocurra”.

Retrato de Austin Tice
Retrato de Austin Tice

El 11 de agosto fue el cumpleaños 41 de Austin.