Los conservadores que demandan a Trump en Colorado ven una amenaza a la democracia

El expresidente de EEUU Donald Trump gesticula a la salida de una de sus propiedades en Nueva York, EEUU.

Por Andrew Chung

12 ene (Reuters) - Norma Anderson recuerda que el 6 de enero de 2021 se sentó paralizada frente a su televisor y lloró al ver cómo una turba de partidarios de Donald Trump irrumpía en el Capitolio de Estados Unidos, preguntándose por qué el entonces presidente no había llamado a la Guardia Nacional.

"Tengo edad suficiente para recordar la Depresión, la Segunda Guerra Mundial, otras dos guerras, recesiones, buenos y malos tiempos, y muchos presidentes. Pero nunca había visto lo que ocurrió el 6 de enero", dijo la republicana de Colorado de 91 años. "Supe inmediatamente quién era el culpable".

Hoy, Anderson, la primera mujer en ser líder de la mayoría en ambas cámaras de la legislatura de Colorado, encabeza una demanda que podría causar una explosión política: la descalificación de Trump de la papeleta de las primarias republicanas en el estado en virtud de una disposición constitucional del siglo XIX por participar en la insurrección.

La apelación de Trump se presentará el 8 de febrero ante la Corte Suprema de Estados Unidos. Trump es el republicano favorito para competir con el mandatario demócrata Joe Biden en las elecciones del 5 de noviembre. Los sondeos de opinión de Reuters/Ipsos indican que una revancha entre Trump y Biden sería reñida.

Otros tres republicanos y dos independientes se han unido a Anderson como demandantes. Mario Nicolais, un abogado conservador del suburbio de Lakewood, en Denver, que ayudó a reunirlos, dijo que los demandantes "estaban tan disgustados por esa insurrección y por lo que Donald Trump hizo el 6 de enero que dijeron (...) nuestro país es más importante y nuestra Constitución es más importante. Y a cualquiera que haya hecho eso no se le puede permitir volver a postular".

La demanda, presentada en septiembre, muestra fotos de las personas que atacaron el Capitolio, tratando de detener la certificación del Congreso de la elección de Biden, y detalla las acciones de Trump antes, durante y después del ataque.

"El presidente Trump era el líder de la turba, y la turba era su arma", afirma la denuncia.

Trump significaría el fin de la democracia, dijo Anderson en una entrevista, añadiendo: "Quiere ser rey. Quiere ser como (el presidente ruso Vladimir) Putin, donde tiene el control total".

La Corte Suprema de Colorado falló a favor de los demandantes en diciembre, al considerar que Trump no era elegible para la presidencia en virtud del texto de la Enmienda 14 de la Constitución que prohíbe ocupar cargos públicos a cualquier persona que "participe en una insurrección".

El caso plantea cuestiones trascendentales para la Suprema de Estados Unidos, cuya mayoría conservadora de 6-3 incluye a tres jueces nombrados por Trump. Entre ellas: ¿La cláusula constitucional de inhabilitación es aplicable por sí sola o requiere la acción del Congreso? ¿Se aplica la disposición al presidente?

La sentencia de Colorado supuso la primera vez que esta disposición -la Sección 3 de la Enmienda 14- se utilizaba para declarar inelegible a un candidato presidencial. Prohíbe el acceso al cargo a cualquier "funcionario de Estados Unidos" que haya prestado juramento "de apoyar la Constitución de Estados Unidos" y luego "haya participado en insurrección o rebelión contra la misma, o prestado ayuda o consuelo a sus enemigos".

Los abogados de Trump, que se enfrenta a cargos penales en dos casos separados relacionados con sus esfuerzos por anular su derrota en 2020, han argumentado que el 6 de enero no fue una insurrección y que Trump no participó en ella.

(Reporte de Andrew Chung en Nueva York; editado en español por Ricardo Figueroa)