Condenado en Alemania un ex guardia nazi de 93 años por complicidad en la muerte de 5 mil personas

En esta imagen del 17 de julio de 2020, Bruno Dey, exguardia de las SS en el campo de concentración de Stutthof cerca de Danzig, en la sala de la corte regional en Hamburgo, Alemania. Dey, de 93 años, fue condenado a dos años de prisión por complicidad de asesinato, aunque la sentencia quedó en suspenso. (AP Foto/Daniel Bockwoldt/dpa Pool/dpa)

BERLÍN (AP) — Una corte alemana condenó el jueves a un exsoldado de las SS, de 93 años, de complicidad de asesinato en el campo de concentración de Stutthof, donde sirvió como guardia en los últimos meses de la II Guerra Mundial.

Bruno Dey recibió una condena en suspenso de dos años de prisión del tribunal estatal de Hamburgo, según la agencia de noticias dpa.

Fue condenado por 5.232 delitos de complicidad de asesinato, igual al número de personas que se cree fueron asesinadas en Stutthof mientras él sirvió en el campo en 1944 y 1945, así como de un delito de complicidad en intento de asesinato.

Bruno Dey, a former SS-watchman at the Stutthof concentration camp, hides his face behind a folder as he arrives on a wheelchair for a hearing in his trial on July 23, 2020 in Hamburg, northern Germany. - The 93-year-old former Nazi concentration camp guard was handed a suspended sentence of two years in prison as a court in Hamburg found him guilty of complicity in WWII atrocities. In what could be one of the last such cases of surviving Nazi guards, Bruno Dey was convicted for his role in the killing of 5,230 people when he was a teenaged SS tower guard at the Stutthof camp near what was then Danzig, now Gdansk, in Poland. (Photo by Daniel Bockwoldt / POOL / AFP) / The erroneous mention[s] appearing in the metadata of this photo by Daniel Bockwoldt has been modified in AFP systems in the following manner: PIXEL CORRECTION - Resending unpixelated version of the photo, as the court does not request to make the defendant unrecognisable. Please immediately remove the erroneous mention[s] from all your online services and delete it (them) from your servers. If you have been authorized by AFP to distribute it (them) to third parties, please ensure that the same actions are carried out by them. Failure to promptly comply with these instructions will entail liability on your part for any continued or post notification usage. Therefore we thank you very much for all your attention and prompt action. We are sorry for the inconvenience this notification may cause and remain at your disposal for any further information you may require. (Photo by DANIEL BOCKWOLDT/POOL/AFP via Getty Images)
Bruno Dey, ex oficial de las SS (Photo by DANIEL BOCKWOLDT/POOL/AFP via Getty Images)

Como sólo tenía 17 años, y más tarde 18, en el momento de los crímenes, el caso de Dey se instruyó en un tribunal juvenil. La fiscalía había pedido una condena de tres años, y la defensa pedía la absolución.

“¿Cómo pudo acostumbrarse al horror?", preguntó la juez que presidía el tribunal, Anne Meier-Goering, al anunciar el veredicto.

El juicio abrió en octubre, y en deferencia a la edad de Dey, las sesiones judiciales se limitaron a dos por semana, de dos horas de duración. También se tomaron precauciones adicionales para mantener el caso en marcha durante el apogeo de la pandemia del coronavirus.

Se disculpó

En su declaración final al tribunal esta semana, Dey, que necesita una silla de ruedas para desplazarse, se disculpó por su papel en la maquinaria nazi de destrucción y dijo que “nunca debe repetirse”.

“Hoy, quiero disculparme con todas las personas que pasaron por esta locura infernal”, dijo el acusado.

Hace al menos 20 años que cada juicio a un exnazi se describe como “probablemente el último de Alemania”. Pero otro guardia de Stutthof fue acusado la semana pasada, a los 95 años, y la fiscalía especial que investiga los crímenes del nazismo tiene más de una docena de investigaciones en marcha.

Bruno Dey, a former SS-watchman at the Stutthof concentration camp, hides his face behind a folder as he leaves the courtroom on a wheelchair after the verdict in his trial on July 23, 2020 in Hamburg, northern Germany. - The 93-year-old former Nazi concentration camp guard was handed a suspended sentence of two years in prison as a court in Hamburg found him guilty of complicity in WWII atrocities. In what could be one of the last such cases of surviving Nazi guards, Bruno Dey was convicted for his role in the killing of 5,230 people when he was a teenaged SS tower guard at the Stutthof camp near what was then Danzig, now Gdansk, in Poland. (Photo by FABIAN BIMMER / POOL / AFP) (Photo by FABIAN BIMMER/POOL/AFP via Getty Images)
Bruno Dey (Photo by FABIAN BIMMER / POOL / AFP) (Photo by FABIAN BIMMER/POOL/AFP via Getty Images)

Eso se debe en parte a un precedente establecido en 2011 con la condena del extrabajador automotriz de Ohio John Demjanjuk como cómplice de asesinato cuando servía como guardia en el campo de exterminio de Sobibor, en la Polonia ocupada por Alemania. Demjanjuk, que rechazó de plano las acusaciones, murió antes de que se procesara su apelación.

Efraim Zuroff, principal rastreador de nazis en la oficina del Centro Simon Wiesenthal en Jerusalén, criticó la condena en suspenso, afirmando que “mancha el proceso” de buscar justicia para los sobrevivientes del Holocausto, y dijo que Dey había esperado a enfrentar una pena de cárcel para disculparse por sus acciones.

“Estamos muy satisfechos de que haya sido condenado, pero molestos por la sentencia, que en cierto modo es un insulto a los sobrevivientes”, dijo Zuroff en una entrevista telefónica. “Tiene que haber algún elemento de castigo”.