Condenada a 20 años enfermera de Miami por estafa al Medicare de $192 millones

Una enfermera del área de Miami fue condenada el jueves a 20 años de prisión por firmar ilegalmente miles de pedidos de equipos médicos y pruebas genéticas y presentarle $192 millones en reclamaciones falsas al programa Medicare, financiado por los contribuyentes.

Elizabeth Hernández, de 45 años y residente de Homestead, fue declarada culpable de tener un papel fundamental en una trama en la que participaban empresas de telemercadotecnia que contactaban a pacientes de Medicare y los convencían para que solicitaran productos y servicios médicos innecesarios, como aparatos ortopédicos y pruebas genéticas de cáncer.

A continuación, las empresas le enviaban los pedidos de los productos a Hernández, quien los firmaba declarando falsamente que había examinado o tratado a los pacientes, según con los fiscales federales. Hernández le facturó a Medicare como si estuviera haciendo complejas visitas a los pacientes, a la mayoría de los cuales nunca vio ni habló con ellos. Los fiscales dijeron que rutinariamente presentó reclamos al programa de seguro federal por más de 24 horas de “visitas al consultorio” en un solo día.

“En 2020, Hernández ordenó más pruebas genéticas de cáncer para beneficiarios de Medicare que cualquier otro proveedor en la nación, incluidos oncólogos y genetistas”, dijo el Departamento de Justicia (DOJ) en un comunicado de prensa tras el veredicto del jurado en septiembre. Un jurado federal de Miami condenó a Hernández por un cargo de conspiración para cometer fraude de salud y fraude electrónico, junto con cuatro cargos por fraude de salud y tres cargos por hacer declaraciones falsas.

En la sentencia del jueves, el juez de distrito K. Michael Moore le ordenó a la enfermera que le devolviera al gobierno cerca de $1.6 millones que se había embolsado y gastado en autos caros, joyas, reformas a su casa y viajes.

Aunque Hernández fue sola a juicio, colaboró con otros operadores de telemedicina del sur de la Florida que ya se declararon culpables y fueron condenados a prisión.

Michael Stein, de 36 años y habitante de Lake Worth, se declaró culpable en abril de conspirar para defraudar al gobierno de Estados Unidos al solicitar y recibir comisiones ilegales de otro hombre del sur de la Florida, quien era copropietario de Panda Conservation Group. La compañía con sede en Texas operaba dos laboratorios de pruebas genéticas que le facturaron $90 millones al programa Medicare y recibieron $60 millones en pagos entre abril y noviembre de 2020.

En junio, Stein fue condenado a cinco años de prisión y se le ordenó pagar $63.3 millones en restitución a Medicare por la jueza federal de distrito Cecilia Altonaga.

Stein y el copropietario de Panda Leonel Palatnik fueron acusados de conspirar para defraudar al programa de seguros del gobierno de Estados Unidos para adultos mayores e indigentes, explotando las exenciones concedidas a los proveedores de telemedicina durante la pandemia de COVID-19, dijeron los fiscales.

En 2021, Palatnik, de 44 años y habitante de Aventura, se declaró culpable de estafar a Medicare y pagarle comisiones ilegales a Stein como parte de su plan para facturar al programa federal de seguros miles de pruebas de laboratorio innecesarias en Panda. Palatnik fue condenado a casi siete años.

Como parte de su acuerdo con la fiscalía, Palatnik admitió que le pagaba $50,000 al mes en sobornos a Stein, propietario de 1523 Holdings LLC en Hollywood, a cambio de que este se encargara de que los proveedores de telemedicina aprobaran los pedidos de pruebas genéticas para pacientes en los laboratorios de Panda, pedidos que fueron firmados por Hernández, la enfermera practicante.