Clínicas de Modesto quieren eliminar barreras para pacientes LGBTQ

A la doctora Andie Silva le gusta llevar un pin de arcoíris en la solapa de su bata blanca. Para ella, es un símbolo de aceptación y seguridad para sus pacientes LGBTQ.

Médicos como Silva desempeñan un papel crucial en la reducción de las disparidades sanitarias dentro de la comunidad LGBTQ de Modesto. Más allá de la mera escasez, persisten otros obstáculos que agravan el reto de obtener servicios sanitarios esenciales para las personas LGBTQ.

La Rainbow Clinic, inaugurada por Silva en 2019, no solo ofrece atención primaria, sino que también prioriza servicios críticos como la terapia de afirmación de género, el apoyo a la salud mental, la medicación para la prevención del VIH y el tratamiento de los trastornos por consumo de sustancias para la comunidad.

Desde su creación, la Rainbow Clinic se ha convertido en un salvavidas para las personas queer que buscan terapias hormonales, intervenciones quirúrgicas o simplemente una conexión comunitaria de apoyo.

“Creo que ha sido decisivo para intentar conseguir un acceso más seguro a la atención de afirmación de la identidad de género en un lugar conservador”, dijo Silva.

A pesar de este tipo de recursos, la comunidad LGBTQ de Modesto sigue encontrando obstáculos para acceder a la atención sanitaria.

Miedo a la discriminación aleja a la comunidad LGBTQ de la atención sanitaria

Una de las principales preocupaciones de la comunidad es no buscar atención sanitaria por miedo a la discriminación.

Según un reporte de la UCLA, los pacientes LGBTQ tienen más probabilidades de sufrir un trato injusto al recibir atención médica: el 45% de las mujeres bisexuales y el 32% de los hombres homosexuales declaran haber tenido experiencias negativas.

Los adultos transgénero tienen más del doble de probabilidades que los adultos cisgénero de retrasar o renunciar a la atención médica necesaria.

Bettie Mercury, directora de una producción de burlesque llamada Glitter Coven Cabaret, afirmó haber sufrido discriminación en el pasado como persona queer.

“Hay un montón de personas queer aquí y necesitamos saber dónde podemos ir, dónde seremos respetados y atendidos de verdad”, dijo Mercury.

Jorge Fernández, director de salud conductual en Golden Valley Health Centers (GVHC), dijo que, en un grupo de discusión celebrado el año pasado en Merced, el estigma surgió como la principal barrera para la comunidad.

Melody Castillo, enfermera practicante en GVHC, señaló que muchos pacientes LGBTQ están cubiertos por Medicaid o son personas de color.

Explicó que estos pacientes a menudo encuentran dificultades para acceder a la atención, y cuando lo hacen, son más propensos a tener experiencias negativas. Estas experiencias pueden crear barreras adicionales para recibir atención en el futuro.

“Es simplemente que la gente tiene miedo de venir debido a experiencias pasadas”, dijo Castillo.

La organizadora comunitaria de MoPride, Verónica Ambrose, muestra la colección de libros para jóvenes adultos en el Central Valley Pride Center, en Modesto, California, el jueves 19 de octubre de 2023.
La organizadora comunitaria de MoPride, Verónica Ambrose, muestra la colección de libros para jóvenes adultos en el Central Valley Pride Center, en Modesto, California, el jueves 19 de octubre de 2023.

Verónica Ambrose, organizadora comunitaria de MoPride, señaló que algunos médicos carecen de los conocimientos necesarios para tratar eficazmente a los pacientes LGBTQ.

“Vemos que gran parte de nuestra comunidad trans y también de nuestra comunidad de enfermos crónicos tienen que educar a sus proveedores sobre sus problemas de salud individuales”, dijo Ambrose.

Castillo hizo hincapié en que es inaceptable que los pacientes tengan que educar a los proveedores sobre la gestión clínica, ya que nunca debe ser responsabilidad del paciente abogar por sus propias necesidades.

Dijo que este problema se deriva de las deficiencias en la educación médica, donde los proveedores a menudo se gradúan sin la preparación adecuada para satisfacer las necesidades de una población diversa.

Los pacientes no siempre tienen que viajar lejos

Fernández dijo que GVHC ofrece ahora tratamiento hormonal a nivel local y es uno de los varios lugares donde se ofrece atención para la afirmación del género.

GVHC también ha comenzado a prestar servicios a través de la Rainbow Clinic para ampliar el acceso a una variedad de servicios de salud para los habitantes.

Castillo dijo que ha estado prestando servicios en GVHC durante siete años y todavía ve a pacientes que no sabían acerca de sus servicios.

Aunque en ocasiones los pacientes tienen que desplazarse fuera de Modesto, estar cerca de centros del Área de la Bahía y Sacramento es una ventaja significativa. Esos lugares atraen a personas de todo el país que buscan estos servicios especializados, dijo Castillo.

“Lo único mejor sería estar en el Área de la Bahía”, dijo.

Dijo que California también tiene ventajas en los servicios de afirmación de género y la atención de la salud sexual y reproductiva, que están bien cubiertos y son accesibles.

“Nuestros pacientes en California tienen un acceso realmente bueno a los servicios, que si estuviéramos en otro estado podría no ser el caso”, añadió Castillo.

Crear un entorno incluyente

Mercury dijo que Silva era una de las primeras profesionales abiertamente queer que había conocido.

“No hay suficientes”, dijo Mercury.

Le reconforta el corte de pelo corto de Silva y la bandera del orgullo que luce en su despacho.

Silva cree que toda la comunidad sanitaria debería adoptar la inclusión LGBTQ, en lugar de que los pacientes dependan únicamente de lugares como la Rainbow Clinic. Animó a todos los proveedores de atención sanitaria a ser aliados y acogedores con los pacientes LGBTQ.

Dijo que la gente tiene miedo de entrar en este campo por temor a cometer errores. Su mejor consejo es que se disculpen y aprendan. Dijo que es muy gratificante proporcionar esos espacios seguros y hacer que la gente se sienta aceptada.

“No hay suficientes personas con diversidad de género, así que realmente necesitamos que nuestros aliados puedan intervenir y ayudarnos”, dijo Silva.

Fernández dijo que en GVHC se hacen esfuerzos para educar al personal sobre la atención culturalmente sensible, incluido el uso de pronombres correctos y el tratamiento de todos con respeto. El equipo de salud conductual de GVHC ha colaborado con capacitadores de UC Davis para mejorar los conocimientos sobre temas LGBTQ como los tratamientos del VIH y la sensibilidad cultural.

Destacó la importancia de crear un entorno seguro a través de símbolos visibles como banderas arcoíris en las oficinas o mediante la inclusión de pronombres en las firmas de correo electrónico.

Afirmó que es útil que los proveedores formen parte de la comunidad porque así comprenderán mejor las experiencias de sus pacientes. Sin embargo, cree que no es necesario ser LGBTQ para poder comprender.

“Eso pudiera ayudarles a sentirse un poco más cómodos sabiendo que van a tener un defensor. Van a tener a alguien que cuide de ellos”, dijo Fernández.