¿Está China construyendo una base de espionaje en Cuba? Esto es lo que revela nuevo informe

Cuba está construyendo una nueva base de espionaje cerca de la ciudad de Santiago de Cuba que será capaz de rastrear los movimientos militares aéreos y marítimos de Estados Unidos a miles de kilómetros de distancia, según muestran imágenes satelitales recopiladas en un nuevo estudio.

El Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington detectó la construcción de la nueva instalación destinada a recoger datos de inteligencia de señales cerca de un barrio llamado El Salao, al este de Santiago de Cuba, la segunda ciudad más grande de la isla. Estados Unidos opera una base en la Bahía de Guantánamo, a unas 50 millas al este de la ciudad.

En un informe publicado el martes, el Centro dijo que analizó datos satelitales y concluyó que el sitio ha estado en construcción desde 2021. El sitio es una de las cuatro instalaciones para interceptar señales en Cuba que, según el informe, podrían ser “los lugares más probables que apoyan los esfuerzos de China para espiar a Estados Unidos.”

La estructura parece ser un gran círculo de antenas, llamado conjunto de antenas dispuestas circularmente o CDAA, que permite a los analistas determinar el origen y la dirección de las señales entrantes de alta frecuencia y que se usaban comúnmente para espiar durante la Guerra Fría.

“Una vez operativo, este CDAA servirá como una poderosa herramienta para mejorar el conocimiento del dominio aéreo y marítimo en la región, donde el ejército estadounidense y sus socios internacionales operan regularmente”, dice el informe.

Dada la proximidad de Cuba a Estados Unidos, la recopilación de inteligencia de China en Cuba “abriría una importante ventana de inteligencia inaccesible desde el territorio chino”.

El Centro también estudió imágenes satelitales de otras instalaciones de recopilación de inteligencia cubanas previamente conocidas en Bejucal, Watao y Calabazar, todas cerca de la capital. El informe destaca la expansión del equipo de monitoreo espacial en Bejucal y Calabazar cuando Cuba carece de sus propios satélites o programa espacial, lo que sugiere que estas bases probablemente estén monitoreando satélites estadounidenses.

El nuevo informe no proporciona evidencia concluyente, probablemente clasificada, que vincule las instalaciones de espionaje con el espionaje chino, pero su publicación sigue a noticias reportadas por el Wall Street Journal de que funcionarios cubanos y chinos estaban discutiendo la construcción de una base de espionaje y una instalación de entrenamiento militar en la isla y el pago de miles de millones de dólares a Cuba a cambio.

Examinar las capacidades de inteligencia de Cuba plantea dudas sobre el papel futuro de la isla a medida que los adversarios estadounidenses continúan expandiendo su presencia en el hemisferio occidental, dijo Ryan Berg, director del Programa de las Américas del CSIS y uno de los autores del informe.

“Cuba va a ser un jugador importante”, dijo. “La pregunta más importante es: teniendo un país tan pobre y desesperado como Cuba, dispuesto a ayudar a cualquiera que pague, ¿cuánto peor podría volverse la situación?”

La Oficina del Director de Inteligencia Nacional declinó comentar sobre el nuevo sitio en construcción y sus posibles vínculos con las actividades de espionaje de China en la región.

Un portavoz de la embajada china en Washington calificó las acusaciones sobre las bases de espionaje de China en Cuba como “nada más que calumnias”.

Cuba ha negado que China tenga su propia base en la isla. Pero las agencias de espionaje chinas han tenido presencia en Cuba desde hace varias décadas, al menos en una de las instalaciones descritas en el informe, la base en la localidad de Bejucal, a 45 minutos en auto desde La Habana.

Chris Simmons, ex jefe de una oficina de investigación de contrainteligencia para el hemisferio occidental de la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos, dijo al Herald que China ha estado operando la base conjuntamente con agencias de espionaje cubanas desde 1992. A las agencias de espionaje de Estados Unidos les tomó nueve años enterarse del acuerdo en 2001, dijo.

China ha aumentado su presencia en el hemisferio occidental en los últimos años y ha estado involucrada en la construcción de varios proyectos de infraestructura, incluidos puertos y aeropuertos en países del Caribe que los expertos temen que sean explotados con fines militares y de inteligencia.

China ha desarrollado una relación costosa pero estratégica con Cuba a lo largo de los años. Según un artículo de investigación inédito escrito por María Werlau, presidenta de Archivo Cuba, China ha condonado porciones importantes de la deuda de Cuba y ha otorgado varios préstamos al gobierno cubano que en su mayoría no han sido pagados.

En 2019, una empresa respaldada por el Estado chino completó la modernización del puerto de Santiago de Cuba con un préstamo del gobierno chino de 120 millones de dólares a Cuba.

El representante republicano de Miami, Carlos Giménez, que forma parte del comité selecto sobre China, Servicios Armados y Seguridad Nacional, reaccionó de inmediato al nuevo informe y dijo que esperaba una mayor presencia china y rusa en Cuba debido a la “falta de liderazgo en el hemisferio occidental” del presidente Joe Biden.

El mes pasado, una flotilla rusa que incluía un submarino de propulsión nuclear llegó a La Habana seguida de cerca por buques de guerra estadounidenses.