China y Australia acuerdan pasar página mientras se relajan las tensiones

FOTO DE ARCHIVO: El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, habla durante la reunión bilateral con el presidente de Indonesia, Joko Widodo, al margen de la 43ª Cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en Yakarta,

Por Ryan Woo

PEKÍN, 6 nov (Reuters) - El presidente chino, Xi Jinping, afirmó el lunes que los lazos estables entre China y Australia sirven a los intereses mutuos y que ambos deben ampliar su cooperación, enviando una clara señal de que Pekín está dispuesto a superar las recientes tensiones

China y Australia deben promover el desarrollo de su asociación estratégica a medida que construyen el entendimiento y la confianza mutuos, dijo Xi al primer ministro australiano, Anthony Albanese, el primer líder australiano en visitar Pekín desde 2016, en el Gran Salón del Pueblo en el corazón de la capital china.

Una relación fuerte "será beneficiosa en el futuro", dijo Albanese a Xi en sus segundas conversaciones cara a cara en un año, una reunión que duró más de una hora.

Durante décadas, China y Australia construyeron una relación basada en el comercio, en la que Pekín se convirtió en el mayor socio comercial de Canberra con compras de alimentos y recursos naturales australianos.

Sin embargo, los lazos se agriaron después de que Australia acusara en 2017 a China de inmiscuirse en su política. Al año siguiente, Australia prohibió los equipos del gigante tecnológico chino Huawei Technologies Co para su red 5G por temor a la seguridad nacional.

Un llamamiento australiano en 2020 para realizar una investigación internacional sobre el origen de la pandemia del COVID-19, que comenzó en la ciudad china de Wuhan a finales de 2019, enfureció a Pekín, que respondió con bloqueos a varias importaciones australianas.

A medida que las relaciones se deterioraban, China recomendó a sus estudiantes que no estudiaran en Australia, señalando incidentes racistas, lo que suponía un importante lastre para un mercado educativo multimillonario.

Antes, el lunes, Albanese se detuvo en el emblemático Templo del Cielo de Pekín y posó para una fotografía en el Muro circular del Eco, donde el entonces primer ministro australiano, Gough Whitlam, estuvo en 1973, un año después de que ambos países establecieran lazos.

"En China solemos decir que, cuando bebemos agua, no debemos olvidar a quienes cavaron el pozo", dijo Xi. "El pueblo chino no olvidará al primer ministro Whitlam por cavar el pozo para nosotros".

"MUY POSITIVO"

Albanese tomó medidas para estabilizar las relaciones tras convertirse en primer ministro en mayo del año pasado y se reunió con Xi al margen de una cumbre del G20 celebrada en Indonesia en noviembre.

China pronto empezó a reducir las barreras comerciales, permitiendo las importaciones de carbón en enero y poniendo fin a los aranceles sobre la cebada en agosto. El mes pasado, Pekín aceptó revisar los aranceles contra el "dumping" (práctica comercial consistente en vender un producto por debajo de su precio normal o incluso por debajo de su coste de producción para obtener ventajas competitivas) del 218% sobre el vino australiano.

"Observé que un comercio sin trabas beneficiaba a ambos países, era bueno tanto para los consumidores chinos como para los exportadores australianos", declaró Albanese a la prensa tras la reunión. "Ciertamente estuvo de acuerdo en que el vino australiano es bueno".

Las importaciones chinas de Australia entre enero y septiembre aumentaron un 8,1% respecto al año anterior, hasta los 116.900 millones de dólares, según datos de las aduanas chinas. En 2022, las importaciones se desplomaron un 12,7%, hasta 142.100 millones de dólares.

La reunión fue "muy positiva", dijo Albanese, añadiendo que había invitado a Xi a visitar Australia.

"Ambos estuvimos ciertamente de acuerdo en que no debemos definirnos por nuestras diferencias, reconocer que están ahí, pero también reconocer el beneficio mutuo que tenemos"

Con todo, sigue habiendo obstáculos en su relación.

El respaldo australiano a una resolución de la ONU que rechaza las reivindicaciones territoriales de China en el mar de China Meridional ha enfurecido a Pekín, que ha dicho a Canberra que el asunto no es de su incumbencia.

Australia afirma que el mar de China Meridional es una importante vía de paso para su comercio con Japón y Corea del Sur.

La proyección de poder de Pekín entre las naciones insulares del Pacífico también alarmó a Australia, mientras que la alianza de seguridad de Canberra con Estados Unidos y Reino Unido en el Indo-Pacífico —conocida como AUKUS— avivó las preocupaciones chinas sobre la contención.

(Reporte de Ryan Woo; reporte adicional de Kirsty Needham en Sídney; edición de Robert Birsel y Mark Heinrich; editado en español por Tomás Cobos)