Yahoo Noticias El mayor centro comercial de EEUU lleva años estancado. ¿Pudiera Miami-Dade ayudar a revivirlo?
Todavía no se ha puesto la primera piedra de lo que sería el centro comercial más grande de Estados Unidos en un terreno de 175 acres junto a la Interestatal 75. Pero los urbanizadores del megaproyecto están pidiendo al Condado Miami-Dade que levante una prohibición existente sobre las subvenciones gubernamentales para la empresa que se puso en marcha hace nueve años.
El retrasado proyecto American Dream Miami –un centro comercial lo bastante grande como para tener una pista de esquí artificial y un lago submarino– prometió en su día estar abierto y dar empleo a 5,000 personas en 2025. Pero el urbanizador Triple Five, propietario del Mall of America de Minnesota, no ha avanzado con los permisos finales de construcción, a pesar de haber obtenido la aprobación del condado para sus planes en 2018.
Ahora, Triple Five dice que una restricción de la aprobación original de la Comisión del Condado está causando problemas al proyecto. Quiere que Miami-Dade levante una restricción de 2018 impulsada por los centros comerciales existentes en el área que prohíbe el uso de fondos del condado para subsidiar el proyecto.
“Todos necesitan ser tratados de la misma manera”, dijo el comisionado Juan Carlos Bermúdez, cuyo distrito incluye el sitio de urbanización de American Dream en terrenos baldíos donde la I-75 se encuentra con la autopista Turnpike de la Florida. “No se trata tanto de su centro comercial como de que tenemos que avanzar en la construcción de carreteras”.
Bermúdez, ex alcalde de Doral que no estaba en la comisión durante la votación sobre American Dream en 2018, no compartió detalles sobre lo que los urbanizadores quieren de Miami-Dade. El acuerdo original requiere que Triple Five pague por los sistemas viales que conecten la propiedad de la urbanización con las principales autopistas y calles.
Los representantes de Triple Five no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Cuando se anunció por primera vez en 2015, el plan era tener el centro comercial abierto en 2020. Un acuerdo con Miami-Dade para comprar 82 acres de tierra propiedad del gobierno que fue aprobado en 2015 requería que Triple Five tuviera el sitio generando 5,000 empleos para 2025.
Bermúdez está patrocinando legislación para cancelar las restricciones de 2018 a favor de las cuales una coalición de grandes centros comerciales de la región cabildeó con éxito para que se adjuntaran al paquete de aprobación de American Dream. Esta legislación impide que Miami-Dade ofrezca a Triple Five la mayoría de los reembolsos de impuestos, préstamos o subvenciones para diferir los costos de la urbanización.
El lunes, Bermúdez retrasó una audiencia de la comisión sobre el levantamiento de la prohibición, aplazando una votación del comité del Consejo de Política de la comisión a una futura reunión.
El paquete de urbanización de American Dream se aprobó fácilmente en 2018, con solo un comisionado que votó en contra: Daniella Levine Cava, ahora alcaldesa del condado.
Triple Five ahora depende de la administración de Levine Cava para las aprobaciones regulatorias necesarias para obtener la aprobación del sitio para la construcción del complejo de seis millones de pies cuadrados. En 2018, los costos de construcción se estimaron en $4,000 millones.
Los años siguientes se volvieron más difíciles para los centros comerciales a medida que la pandemia del COVID desplazaba más compras a internet. El proyecto original American Dream de Triple Five en Nueva Jersey, un complejo de 3.5 millones de pies cuadrados en el suburbio neoyorquino de East Rutherford, registró pérdidas de $229 millones en 2022 antes de la depreciación, según registros regulatorios publicados el año pasado.
Sin embargo, un informe de arrendamientos del otoño de 2023 mostraba que la propiedad estaba llena de inquilinos y tenía una tasa de ocupación de aproximadamente el 90%.
Bermúdez dijo que después de reunirse con representantes de Triple Five, ahora espera que el urbanizador se incline más por atraer a los clientes con cosas que hacer en American Dream Miami y confiar menos en darles lugares para comprar.
“Supongo que el espacio que ocupaban antes para el comercio minorista será menor y el de entretenimiento mayor”, dijo. “Simplemente porque los centros comerciales han cambiado desde el COVID”.
