Cefalea y migraña: cuáles son las señales de alerta que deberían derivar en una consulta médica

Las cefaleas suelen afectar la calidad de vida y disparar el uso de analgésicos
Las cefaleas suelen afectar la calidad de vida y disparar el uso de analgésicos - Créditos: @Getty

La cefalea, o dolor de cabeza, es uno de los principales problemas de salud, tanto en hombres como en mujeres, y suele afectar de manera significativa la calidad de vida. De hecho, la afección es considerada la segunda causa de años vividos con discapacidad a nivel mundial en las personas de 15 a 45 años. La exposición a las pantallas o a sonidos fuertes y el estrés son algunos de los estímulos o circunstancias que pueden desencadenar un cuadro de estas características. En la Semana de la Cefalea, es una buena oportunidad para resaltar la importancia de realizarse los estudios necesarios para entender cuál es el origen del dolor y así poder modificar hábitos e iniciar una terapia adecuada.

“Un nueva epidemia”: siete innovaciones simples que podrían salvar la vida de dos millones de embarazadas y bebés

“La cefalea es considerada la segunda causa de años vividos con discapacidad a nivel mundial, mientras que la primera son los dolores lumbares. La migraña es una de las cefaleas más frecuentes, con una prevalencia en la Argentina del 9,5% de la población. Se caracteriza por ser un dolor que, generalmente, es en una mitad de la cabeza, de intensidad moderada o severa, y puede estar acompañada de náuseas, vómitos o intolerancia a la luz y a los sonidos. Si bien es hasta tres veces más frecuente en mujeres, los hombres también las padecen”, explica María Vanesa Nagel, medica de la Clínica de Cefaleas de Fleni.

Las cefaleas afectan tres veces más a las mujeres que a los varones
Las cefaleas afectan tres veces más a las mujeres que a los varones

La especialista cita cifras de la Sociedad Argentina de Neurología que indican que el 1,5% de la población del país tiene algún tipo de cefalea más de 15 días por mes y que un 18% de los que padecen migraña consume, al menos, 10 días al mes medicación analgésica.

Alejandro Andersson, director del Instituto de Neurología de Buenos Aires, describe que a una persona puede padecer una cefalea porque tiene una contractura muscular o porque se generó un cuadro inflamatorio en la cabeza. Esto último es la de tipo vascular, es decir, la migraña. “Es muy importante hacer el diagnóstico. Y sobre todo con un paciente que no suele tener migrañas y un día le explota la cabeza, porque en esos casos hay que descartar que no tenga un aneurisma. Otra cosa es el paciente que te dice que le duele siempre la cabeza y quiere un tratamiento lógico para ver cómo puede sufrir menos ese problema”, indica Andersson.

Recomendaciones

Según Matías Alet, director de Neurología de la Fundación Iberoamericana de Salud Pública, el momento de consultar a un médico por las cefaleas variará según la intensidad del dolor, la duración o si se repiten patrones antes y durante la afección. “Una señal muy importante es si hay un cambio repentino en la intensidad o la frecuencia del dolor. Otro dato importante es si el dolor empieza luego de los 50 años o de un traumatismo o golpe en la cabeza”, detalla.

El especialista argumenta que los estudios que suelen solicitarle a los pacientes buscan descartar que la afección no tenga una causa clínica o neurológica específica. “Algo fundamental es el interrogatorio y el examen físico, los antecedentes. Luego, hacemos un estudio neurológico completo, un análisis de sangre y un estudio de imagen cerebral para estudiar el sistema nervioso, entre otros”, completa Alet.

Nagel explica que es posible aminorar la frecuencia y la intensidad de los cuadros de cefalea con hábitos saludables. Por ejemplo, realizar las cuatro comidas y evitar ayunos de más de seis horas, mantener una dieta variada y saludable, hidratarse adecuadamente (aproximadamente dos litros de agua por día), regularizar las horas de sueño, limitar el consumo de cafeína, alcohol y bebidas cola, realizar regularmente ejercicio aeróbico y combatir el estrés con técnicas de relajación.

“Controlar con un registro la frecuencia y duración de las cefaleas, así como el uso de analgésicos diario, es de gran ayuda al momento de definir la mejor conducta terapéutica en cada caso. Siguiendo las indicaciones del médico y optimizando ciertos hábitos es posible tener una mejor calidad de vida”, afirma Nagel.