La caravana de migrantes en el sur de México sigue su camino a EEUU en una difícil Navidad

El día de Navidad significó lo mismo que cualquier otro para miles de migrantes que caminaban por el sur de México bajo un sol abrasador.No hubo regalos y la cena de Nochebuena consistió en un sándwich, una botella de agua y un plátano entregados por una iglesia local a algunos de los migrantes en la localidad de Álvaro Obregón, en el sureño estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala.

Los migrantes pasaron la noche durmiendo sobre un trozo de cartón o plástico tendido bajo un toldo o en una tienda de campaña, o sobre el suelo desnudo. Por la mañana, se despertaron como de costumbre a las 4 de la mañana, para levantarse temprano y evitar lo peor del calor, caminando hasta el siguiente pueblo, Huixtla, a 30 kilómetros de distancia. La poca ayuda que encontraron provino de familias locales, una de las cuales repartió tamales y agua a los migrantes que pasaban por su zona.

Entre los migrantes había adultos solteros pero también familias enteras, todos ansiosos por llegar a la frontera con Estados Unidos, frustrados por tener que esperar semanas o meses en la cercana ciudad de Tapachula para obtener documentos que les permitieran continuar su viaje. México afirma que no otorga visas de tránsito, pero los migrantes siguen esperando obtener algún tipo de documento para al menos poder tomar autobuses hasta la frontera.

“Este viaje ha sido muy duro para nosotros los migrantes. Necesitamos que las autoridades migratorias y el Gobierno se apiaden de nosotros y nos den un salvoconducto", dijo Jessica García, una migrante de Venezuela.

México afirma que ha constatado la presencia de 680.000 migrantes transitando por el país en los primeros 11 meses de 2023.

La mayor caravana de migrantes en 2023

Con alrededor de 10.000 personas, la caravana de migrantes que partió el domingo rumbo a Estados Unidos es la más grande desde junio de 2022, cuando un grupo de tamaño similar partió de Tapachula.

Esta caravana navideña emprendió su viaje unos días antes de que altos funcionarios estadounidenses se reúnan con sus homólogos mexicanos en la Ciudad de México para explorar formas de frenar el número de inmigrantes que aparecen en la frontera suroeste de Estados Unidos.

El gobierno mexicano ya ha dicho que está dispuesto a ayudar para intentar impedir que los migrantes crucen México. Se espera que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegue a la Ciudad de México el miércoles para negociar nuevos acuerdos que controlen el aumento de migrantes que buscan entrar a Estados Unidos. La delegación estadounidense también incluirá al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y a la asesora de seguridad nacional de la Casa Blanca, Liz Sherwood-Randall.

Este mes, hasta 10.000 inmigrantes fueron arrestados diariamente en la frontera suroeste de Estados Unidos. En mayo, México acordó recibir a migrantes de países como Venezuela, Nicaragua y Cuba que habían sido rechazados por Estados Unidos por no seguir reglas que proporcionaban nuevas vías legales para el asilo y otras formas de migración.

Las personas migrantes abandonan sus hogares para escapar de la pobreza, los desastres naturales, la represión política y el crimen organizado.