Caminata bajo la lluvia, almuerzo y concentración en el hotel: la previa del encuentro entre Alberto Fernández y Angela Merkel

BERLÍN.- Una cuadra a pie fue todo lo que recorrió el Presidente en esta ciudad, en el día previo a su encuentro con la canciller alemana, Angela Merkel. Una llovizna persistente, un cielo gris y un frío penetrante convencieron a Alberto Fernández de que lo mejor era quedarse en su habitación, en el quinto piso del hotel Regent, y preparar junto con su comitiva el encuentro de mañana a la noche, el más importante de su gira europea.

Hasta bien entrada la tarde, solo salió para ir almorzar, pasadas las 15, a Borchardt, un restaurante histórico de esta ciudad, ubicado a una cuadra del hotel, en la zona de Mitte, a 500 metros de la Puerta de Brandeburgo. El lugar de alojamiento, elegido y costeado por el gobierno alemán, es el mismo donde se hospedó Mauricio Macri en julio de 2016, cuando visitó Alemania como presidente.

En el centro de una mesa alargada, Fernández comió un bife con ensalada. Lo acompañaron la primera dama, Fabiola Yáñez; el canciller, Felipe Solá; el jefe de gabinete de la Cancillería, Guillermo Justo Chaves; el secretario de Comunicación Pública, Juan Pablo Biondi, y el secretario general de la Presidencia, Julio Viotobello, amigo de Fernández. Se sumó esta mañana a la comitiva para ayudar en la coordinación de las actividades programadas en esta ciudad, Madrid y París.

En esos últimos dos destinos, también estará Eduardo Valdés, otro amigo de Fernández y exembajador ante el Vaticano. La nueva representante ante la Santa Sede, María Fernanda Silva, fue su segunda en la embajada, un guiño para el "Gordo". Muy cercano a Cristina Kirchner, Valdés llega después de haber participado del viaje a Jerusalén. Mañana también arribará a esta ciudad el ministro de Economía, Martín Guzmán, para acompañar al Presidente en el encuentro con Merkel.

Dos de los funcionarios que estuvieron en Roma no viajaron a esta ciudad. El secretario de Culto, Guillermo Oliveri, regresó a Buenos Aires después de la visita al Vaticano. El Papa se sonrió al verlo. "Volver, como el tango", le dijo cuando lo tuvo cara a cara, en alusión a su regreso a la Secretaría de Culto, cargo que ocupó entre 2003 y 2015. La ministra de Justicia, Marcela Losardo, se reencontrará con el Presidente en París, donde viajó para participar de un foro de la OCDE.

La preocupación por "El Bicho"

Hincha de River, Vitobello tocó en el almuerzo uno de los temas que al Presidente le preocupan por fuera de su tarea como mandatario: con una media sonrisa le advirtió que el empate de Argentinos Juniors, el equipo de Fernández, había abierto la posibilidad de que el conjunto de Marcelo Gallardo tomara más distancia en la cima del torneo. "Aprovecharon que me fui del país para bajar al Bicho de la punta", bromeó el Presidente.

En el almuerzo no estuvo Gustavo Béliz, secretario de Asuntos Estratégicos y flamante candidato para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). El funcionario bajó al lobby de jean y campera sport, una hora antes que Fernández, y pidió indicaciones al personal de la embajada para ir a comer por su cuenta. Béliz acompañará a Fernández a Madrid y después seguirá viaje hacia Roma, para estar en el seminario del Vaticano.

Unos minutos después, apareció en el lobby del hotel el jefe de gabinete de la Cancillería. Chaves llegó empapado, con calzas negras y camiseta amarilla fosforescente. Venía de correr 11 kilómetros por los bosques de esta ciudad. Se bañó y se cambió en tiempo récord para participar del almuerzo con el Presidente.