El cambio climático puede amplificar las grandes tormentas, pero las soluciones reales están lejos de llegar al sur de la Florida

Una vez más, el sur de la Florida quedó sumergido bajo una cantidad de agua inquietante esta semana, algo que normalmente solo se ve durante una tormenta tropical o un huracán.

El miércoles se descargó sobre Miami y Fort Lauderdale el equivalente a un mes de lluvia en un solo día y volvió a pasar al día siguiente.

Los expertos dijeron que el cambio climático podría tener parte de culpa y que las inundaciones masivas en toda la región demuestran que el sistema de drenaje del sur de la Florida no está a la altura del desafío de un mundo más caluroso y húmedo.

En total, los lugares más afectados han recibido 20 pulgadas de lluvia solo esta semana. Fue suficiente para inundar cientos de autos, bloquear partes de la I-95 y retrasar vuelos en los dos aeropuertos principales de la región.

Se trata de la cuarta inundación grave en el sur de la Florida en muchos años y solo una estuvo relacionada con una tormenta tropical. Los científicos dijeron que esto podría ser la nueva normalidad a medida que el cambio climático causado por el hombre aumenta la temperatura en todo el mundo.

“Lo que estamos viendo últimamente es muy coherente con lo que cabría esperar en un mundo más cálido”, dijo Jayantha Obeysekera, director de Sea Level Solutions Center de la Universidad Internacional de la Florida (FIU). “Es una señal de lo que está por venir”.

Mires Aguenar caminando por la calle inundada en Holiday Acres Mobile Home Park en Hialeah, la Florida, el miércoles 12 de junio de 2024. Photograph by Al Diaz/ adiaz@miamiherald.com
Mires Aguenar caminando por la calle inundada en Holiday Acres Mobile Home Park en Hialeah, la Florida, el miércoles 12 de junio de 2024. Photograph by Al Diaz/ adiaz@miamiherald.com

Y, sin embargo, a pesar de los nuevos desarrollos inmobiliarios que florecen día a día como setas a lo largo de la costa, el entorno construido del sur de la Florida ya está desbordado por los retos actuales, incluso antes de que lleguen los dos pies adicionales de aumento del nivel del mar previstos para 2060.

El Distrito de Gestión del Agua del Sur de la Florida (SFWMD), que supervisa el drenaje en toda la región, observó lagunas en su sistema cerca de MIA, donde la agencia tuvo que desplegar cuatro bombas de aguas pluviales temporales para complementar las estaciones de bombeo permanentes de la zona.

En el oeste de Miami-Dade y Broward, los canales gestionados por el condado se desbordaron en calles y patios y las ciudades desplegaron docenas de bombas temporales y camiones extractores para sacar el exceso de agua de la inundación.

Carlos Armstrong, de 25 años, yendo en bicicleta a su casa dañada por las aguas de inundación cerca de NE 123 Street y 11 Court en North Miami el jueves 13 de junio de 2024. Photograph by Al Diaz/ adiaz@miamiherald.com
Carlos Armstrong, de 25 años, yendo en bicicleta a su casa dañada por las aguas de inundación cerca de NE 123 Street y 11 Court en North Miami el jueves 13 de junio de 2024. Photograph by Al Diaz/ adiaz@miamiherald.com

El jueves por la mañana, la mayor parte de las pruebas líquidas de la tormenta se habían evaporado, pero las calles de las zonas más afectadas estaban llenas de enseres y electrodomésticos empapados. No había un conteo oficial de casas o autos afectados por las lluvias, pero las primeras estimaciones indican decenas de casas inundadas y más de mil autos inundados.

Con la ayuda de la tan necesaria luz solar para secar las cosas, se hizo evidente que el diluvio de esta semana no se comparaba con el evento “uno en 1,000” años en Fort Lauderdale en abril pasado, que inundó cientos de casas y envió a la gente corriendo a los refugios, con 25 pulgadas de lluvia en un solo día.

En Hollywood, donde llovió 20 pulgadas en dos días, el fenómeno de esta semana se contabilizó como una tormenta de uno en 200 años, es decir, una lluvia con 0.2% de probabilidades de producirse en un año determinado.

Pero, según los expertos, el cambio climático puede estar haciendo que estos fenómenos sean más probables de lo que parece por la denominación de “200 años”.

Por qué ocurrió

El problema de tanta lluvia es que los sistemas de drenaje del sur de la Florida no están diseñados para soportarla.

El sistema del distrito de gestión del agua está diseñado para manejar alrededor de seis a ocho pulgadas de lluvia en un solo día. En Fort Lauderdale, donde hubo importantes inundaciones, las carreteras están diseñadas para aguantar unas tres pulgadas de lluvia al día y hasta siete pulgadas en algunas de las nuevas carreteras.

Lo mismo ocurre en Miami, en donde el plan de $3,800 millones para mejorar todos los desagües de la ciudad antes de 2060 daría como resultado —si todo va según lo previsto— una ciudad que podría soportar siete pulgadas de lluvia en un día. Para llegar a una capacidad de 11 pulgadas al día se necesitaría una inversión aún mayor de $5,100 millones.

Y, a pesar de las decenas de millones de dólares de inversiones en curso y en proyecto en todo el sur de la Florida, podría llevar décadas conseguir que todas las comunidades alcancen incluso ese nivel.

Autos abandonados en una avenida inundada el jueves 13 de junio de 2024 en Hollywood, la Florida. Los habitantes de Hollywood se despertaron con las calles inundadas y escombros después de que la tormenta del miércoles dejara a su comunidad inundada por las fuertes lluvias. Matias J. Ocner/mocner@miamiherald.com
Autos abandonados en una avenida inundada el jueves 13 de junio de 2024 en Hollywood, la Florida. Los habitantes de Hollywood se despertaron con las calles inundadas y escombros después de que la tormenta del miércoles dejara a su comunidad inundada por las fuertes lluvias. Matias J. Ocner/mocner@miamiherald.com

Luego vienen tormentas como la de esta semana, que dejó caer cerca de un pie de lluvia en un solo día en los lugares más afectados.

El problema es que las normas con las que construyen las ciudades y los condados son inferiores a lo necesario, porque no tienen en cuenta el impacto del aumento del nivel del mar, dijo Obeysekera, de FIU.

“En mi opinión, estas normas son obsoletas”, dijo. “Tenemos que planificar nuestros sistemas de control de inundaciones para acontecimientos como este”.

Obeysekera dirige un equipo de investigación de Florida Flood Hub, de la Universidad del sur de la Florida (USF), que trabaja precisamente en eso, en determinar una buena estimación de los niveles de precipitaciones más elevados que deberían prever los gobiernos locales.

El reporte aún está en fase de borrador, pero Obeysekera dijo que los modelos climáticos sugieren que las lluvias extremas en la Florida podrían ser entre 10% y 20% más intensas en las próximas décadas.

Jueves 13 de junio de 2024: Una mujer que lleva su "scooter" siendo empapada por una fuerte lluvia mientras cruza Biscayne Boulevard y 14 Street al tiempo que una condición climática severa sigue afectando el sur de la Florida. Pedro Portal/pportal@miamiherald.com
Jueves 13 de junio de 2024: Una mujer que lleva su "scooter" siendo empapada por una fuerte lluvia mientras cruza Biscayne Boulevard y 14 Street al tiempo que una condición climática severa sigue afectando el sur de la Florida. Pedro Portal/pportal@miamiherald.com

Pocos gobiernos locales tienen en cuenta la magnificación de las precipitaciones por el cambio climático, pero el Condado Broward prevé que las lluvias sean un 20% más extremas en las próximas décadas y el distrito de gestión del agua se prepara para un aumento de la intensidad de entre 10% y 20%, dependiendo de la tormenta y el condado.

No obstante, a menos que esas modificaciones para las condiciones futuras pasen a ser obligatorias por ley, a Obeysekera le preocupa que los nuevos proyectos de construcción no se lleven a cabo con esas especificaciones.

“A menos que cambien las normas, creo que los urbanizadores no estarán interesados en usarlas, porque no son obligatorias”, dijo.

Un aire más cálido es un aire más húmedo

Encontrar la cifra “correcta” de precipitaciones futuras es difícil, pero se basa en un par de factores. Por un lado, está el factor exclusivo del sur de la Florida de lo que hay bajo nuestros pies.

El sur de la Florida, a diferencia de otras partes del país, no se asienta sobre un lecho rocoso sólido. Bajo la superficie hay algo llamado caliza oolítica, una roca porosa que permite que el agua subterránea suba rápidamente a la superficie y que las investigaciones han demostrado que sube junto con el nivel del mar, por lo que soluciones como los diques no protegerán a Miami del incremento del nivel del mar.

Cuando empezó a llover el martes, el nivel de las aguas subterráneas subió casi cinco pies en dos días, de acuerdo con los datos de los pozos de aguas subterráneas del este de Hollywood y el norte de Miami. En su punto más alto, el agua subterránea estaba a solo dos pies por debajo de la superficie en Hollywood, mientras que en North Miami llegó a la superficie.

Este gráfico muestra cómo los niveles de agua en un pozo en el este de Hollywood subieron cinco pies en dos días, cuando la zona fue azotada por 20 pulgadas de lluvia. En su punto más alto, el agua subterránea estaba a solo dos pies por debajo de la superficie. USGS
Este gráfico muestra cómo los niveles de agua en un pozo en el este de Hollywood subieron cinco pies en dos días, cuando la zona fue azotada por 20 pulgadas de lluvia. En su punto más alto, el agua subterránea estaba a solo dos pies por debajo de la superficie. USGS

A medida que aumenta el nivel del mar, desaparece ese espacio adicional entre los niveles de agua subterránea y la superficie, lo que facilita que se desencadene otra inundación con aún menos lluvia. El sur de la Florida ya ha experimentado un incremento del nivel del mar de unas siete pulgadas en los últimos 30 años, según John Morales, especialista en huracanes de NBC6.

“¿No cree que esas siete pulgadas importan? Importan un montón. Hay mucho menos almacenamiento bajo tierra”, dijo. “Se inunda más fácilmente. En 10 años no aguantará una tormenta de uno en 100 años, sino de uno en 50”.

Y luego está el calentamiento.

El mundo es ya un grado centígrado más caliente que hace un siglo. La física básica demuestra que, a medida que el aire se calienta, es capaz de retener más agua, así que esas nubes de tormenta de color gris púrpura que barren el sur de la Florida en las tardes de verano tienen aún más jugo que exprimir de la atmósfera en forma de lluvia.

Sin embargo, es difícil saber exactamente cuánto más.

Jim Comunale y Pam Mervos caminando por Arthur Street mientras las fuertes lluvias inundan el vecindario circundante el miércoles 12 de junio de 2024 en Hollywood, la Florida. Matias J. Ocner/mocner@miamiherald.com
Jim Comunale y Pam Mervos caminando por Arthur Street mientras las fuertes lluvias inundan el vecindario circundante el miércoles 12 de junio de 2024 en Hollywood, la Florida. Matias J. Ocner/mocner@miamiherald.com

Entender cómo afectará el cambio climático a las precipitaciones —especialmente en la Florida, que está rodeada de agua por tres lados— es complicado. Según Morales, los modelos climáticos a escala mundial no son muy buenos para comprender los entresijos de las famosas tormentas de verano de la Florida. Tanto es así que los modelos climáticos tienen problemas para predecir si el aumento de las temperaturas secará el estado, provocando menos precipitaciones o si una atmósfera más húmeda provocará aún más lluvias.

“No está claro si la península de la Florida va a ser más húmeda o más seca por las precipitaciones, porque no hay una tendencia clara”, dijo. “Lo que sí sabemos es que cuando llueve, llueve más fuerte”.

El cambio climático afecta a los extremos del espectro meteorológico, dijo Morales: hace que los días calurosos sean más calurosos y los días húmedos más húmedos.

Pero dijo que los científicos no creen que el cambio climático cree estas lluvias torrenciales de la nada, simplemente potencia lo que ya está ocurriendo.

“El cambio climático no ha provocado este fenómeno”, dijo. “Seamos claros, no desencadenó lo que ocurrió ayer, pero la gravedad del suceso se vio potenciada por el cambio climático”.

Jueves 13 de junio de 2024: Cuadrillas de camiones aspiradores son vistos limpiando los desagües en la zona de Alton Road y La Gorce Dr., en Miami Beach, luego del mal tiempo que afectó al sur de la Florida esta semana. Pedro Portal/pportal@miamiherald.com
Jueves 13 de junio de 2024: Cuadrillas de camiones aspiradores son vistos limpiando los desagües en la zona de Alton Road y La Gorce Dr., en Miami Beach, luego del mal tiempo que afectó al sur de la Florida esta semana. Pedro Portal/pportal@miamiherald.com

Cuando los académicos ejecutan los principales modelos climáticos mundiales ven ese efecto.

Por ejemplo, Kevin Reed, vicerrector de programación climática y sostenibilidad de la Universidad Stony Brook (SBU) de Nueva York, analizó el impacto del cambio climático en el huracán Ian que azotó el suroeste de la Florida en 2022.

De acuerdo con su estudio, los niveles de precipitaciones fueron en promedio entre 5% y 10% más altos de lo que habrían sido en un mundo más frío, pero los niveles fueron 18% más altos en los lugares que recibieron más lluvia.

“La realidad es que el mundo se ha calentado más de un grado centígrado. El cambio climático está aquí y estamos viendo sus efectos en diversos fenómenos como este”, dijo.