¿Qué ha cambiado en las escuelas del sur de la Florida desde el tiroteo en Parkland?

En los meses posteriores al tiroteo masivo de 2018 en la preparatoria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, que dejó 17 muertos y 17 heridos, legisladores, representantes de distritos escolares y padres presionaron para que se implementaran cambios inmediatos y radicales en la seguridad escolar.

Florida recuerda a las víctimas del tiroreo en Parkland cinco años después

En pocas semanas, los legisladores acordaron que debería haber agentes armados en todos los recintos. Más tarde, el entonces gobernador Rick Scott firmó un proyecto de ley que elevaba de 18 a 21 años la edad mínima para comprar un arma larga, como un fusil estilo AR-15; establecía una ley de alerta, que permitía a los agentes de la ley retirar armas a cualquier persona que se considerara una amenaza y aumentaba la financiación para la seguridad en las escuelas.

En 2020 la Legislatura aprobó la “Alerta de Alyssa”, una ley que exige que todas las escuelas públicas, incluidas las charter, estén equipadas con sistemas móviles de alerta de conectados directamente con las fuerzas del orden. La ley, implementada en el curso escolar 2021-22, lleva el nombre de Alyssa Alhadeff, la hija de 14 años de la presidenta de la Junta Escolar de Broward, Lori Alhadeff, una de los 17 estudiantes y educadores asesinados en lo que fue el tiroteo escolar más letal de la Florida.

Y en los años transcurridos desde entonces, los distritos escolares del sur de la Florida han promulgado políticas y procedimientos —algunos exigidos por la ley, otros propuestos por iniciativa propia— para reforzar, o asegurar, las escuelas con la esperanza de evitar que algo similar vuelva a suceder.

En vista del quinto aniversario el martes de la masacre del Día de San Valentín —la primera celebración desde que el agresor confeso, Nikolas Cruz, fue sentenciado a cadena perpetua en noviembre— el Herald habló con las escuelas públicas de Broward y Miami-Dade para entender esos esfuerzos y qué cambios están todavía en curso.

En total, las escuelas de Miami-Dade han gastado más de $152 millones en iniciativas y mejoras de seguridad escolar, incluidos puntos únicos de entrada en todas las escuelas de educación básica, capacitación de rutina para el personal y la seguridad, mayores recursos para abordar las necesidades de salud mental y nuevas aplicaciones de reportes y herramientas usadas para informar sobre actividades sospechosas.

En Broward, asciende a más de $70 millones.

“La Florida es realmente un modelo para el resto del país en materia de seguridad escolar. Estamos haciendo muchas cosas que ningún otro estado está haciendo”, dijo Max Schachter, cuyo hijo de 14 años, Alex, a quien le encantaba tocar el trombón en la banda de la escuela, murió en el tiroteo.

“Las escuelas son más seguras gracias a lo que hemos hecho, pero, dicho esto, van a cumplirse cinco años de la tragedia y hay que trabajar constantemente para evitar la autocomplacencia, incluso en la Florida, incluso en Broward”, señaló Schachter, quien creó una organización para abogar por más seguridad, Safe Schools for Alex.

Ali Dangelo y su perro de servicio, Strudel, asisten a un acto comunitario de conmemoración de las víctimas de la Secundaria Marjory Stoneman Douglas en el Pine Trails Park, en Parkland, Florida, el lunes 14 de febrero de 2022. El acto se celebró en el cuarto aniversario del tiroteo y contó con la presencia de perros terapeutas, un muro de la memoria con fotos de las víctimas, una zona para escribir mensajes, una breve ceremonia conmemorativa, un video en homenaje a las víctimas y un círculo de tambores.

Nuevos centros de mando, mecanismos de seguridad y respuestas

En Miami-Dade, el distrito estableció un centro de mando compuesto por agentes jurados y civiles que supervisan las más de 18,000 cámaras colocadas en los recintos de las escuelas públicas, según un portavoz del distrito.

El centro, situado en la sede de la Policía Escolar , supervisa el tráfico de autobuses, varios sistemas de denuncia anónima, el sistema de gestión de visitantes y un sistema de detección balística de grado militar. Además, el distrito creó el equipo de contención de incidentes, compuesto por un grupo de agentes entrenados para responder de inmediato en caso de ocurra un incidente.

El distrito también ha instalado vallas alrededor de las escuelas, ha comprado equipos de radio adicionales y ha ordenado que las puertas de las aulas estén cerradas con llave durante toda la jornada escolar.

En Broward, el distrito creó una división de seguridad y preparación para emergencias con el fin de centralizar el personal de seguridad escolar y añadir nuevas funciones, como un jefe de seguridad, un director de Operaciones de Seguridad, un director de Servicios de Apoyo y cerca de 60 personas que supervisan la administración diaria y la gestión.

Dentro de esa división, el distrito también ha creado un centro de operaciones de seguridad que funciona las 24 horas del día y supervisa las cámaras de vigilancia, gestiona las respuestas de emergencia y detecta las señales de alerta de una posible amenaza.

En enero de 2022, la Junta Escolar aprobó el uso de detectores de metales portátiles en las escuelas y en marzo, la entonces superintendente Vickie Cartwright dijo que las escuelas y las aulas serían revisadas al azar tres o cuatro veces por semana. (Cartwright dimitió el 7 de febrero, recibiendo una indemnización de casi $268,000. Tras el acuerdo, la Junta Escolar también nombró superintendente interina a Earlean Smiley, una antigua administradora del distrito y ex directora).

Otro cambio consistió en la instalación de cerraduras de cierre automático en todas las aulas de las secundarias.

Por encima de todo, el mejor cambio, según el jefe de la Policía del Condado Pinellas, Bob Gualtieri, ha sido el cultural.

Gualtieri, presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la preparatoria Marjory Stoneman Douglas, ha estado trabajando en la seguridad escolar desde 2018, impulsando reuniones de ocho horas y publicando informes de cientos de páginas sobre el tema.

“Lo más significativo en los últimos cinco años es un cambio de mentalidad que ha llevado a la seguridad escolar de no ser una idea —en algunos casos una idea tardía— a la vanguardia”, dijo. “Ha habido una enorme mejora en el reconocimiento que la prioridad No. 1 en las escuelas no es la académica, sino asegurar que todos los responsables de la seguridad escolar cumplen las expectativas de los padres de que, cuando envían a sus hijos a la escuela, volverán vivos”.

El jefe de la Policía del Condado Pinellas, Bob Gualtieri, presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Secundaria Marjory Stoneman Douglas, es visto el martes 7 de febrero de 2023 en el Capitolio en Tallahassee, Florida.
El jefe de la Policía del Condado Pinellas, Bob Gualtieri, presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Secundaria Marjory Stoneman Douglas, es visto el martes 7 de febrero de 2023 en el Capitolio en Tallahassee, Florida.

Más personal de seguridad en las escuelas

En Broward, las autoridades contrataron a más de 650 agentes de seguridad adicionales, lo que supone más de 1,300 miembros del personal de seguridad centrado en las escuelas en todo el distrito, dijeron las autoridades. El distrito trabaja con la Policía de Broward, ya que no cuenta con una Policía interno.

En las escuelas de Miami-Dade se contrataron 300 agentes después del referendo de impuestos a la propiedad de 2018, que ayudó a financiar la seguridad escolar y el salario de los maestros. Hasta la fecha, la Policía del distrito —la Policía escolar más grande del país— tiene casi 470 agentes, según el distrito.

En particular, Miami-Dade optó por colocar un agente en cada escuela, dijeron los funcionarios. El mandato estatal requiere un agente de seguridad.

Sin embargo, ambos distritos en diciembre de 2019 fueron vapuleados en un informe provisional de un jurado de instrucción de la Florida por manipular los datos de disciplina en el Sistema de Informes de Incidentes de Seguridad Ambiental Escolar (SESIR). En agosto se publicó el informe completo de 122 páginas, acusando a cinco miembros de la Junta Escolar de Broward de malversar millones de dólares destinados a la seguridad escolar, así como de descuidar su deber.

Miami-Dade, junto con otros cuatro condados, incluido Broward, recibió una carta del Departamento de Educación de la Florida en la que se afirmaba que este y otros grandes distritos del estado no habían cumplido los requisitos estatales de seguridad escolar.

"Esto fue lo último que vio mi hijo", dice Michael Schulman, sosteniendo una captura de pantalla del tiroteo de Parkland mientras su esposa Linda Beigel Schulman mira, después de que el jurado recomendara cadena perpetua para el tirador de la Secundaria Marjory Stoneman Douglas Nikolas Cruz en el Tribunal del Condado Broward, en Fort Lauderdale, el jueves 13 de octubre de 2022. El hijo de la pareja, el entrenador de campo traviesa Scott Beigel, murió en el tiroteo de 2018. (Joe Cavaretta/South Florida Sun Sentinel vía AP, Pool)

Mejor comunicación con las fuerzas del orden y la comunidad

El 10 de febrero, funcionarios del Distrito Escolar de Miami-Dade y partes interesadas de la comunidad, incluidos los bomberos y la Policía se reunieron por tercera vez, según el jefe de Policía del Distrito, Ian Silva.

El motivo, dijo, era ultimar una respuesta unificada que se usaría en caso de siniestro masivo.

En Broward, los funcionarios de la seguridad escolar incorporaron lo que denominan un “enfoque múltiple” para la seguridad, que involucra no solo a los funcionarios y agentes de seguridad del distrito escolar, sino también a los líderes de la comunidad, los padres y los aliados de las fuerzas de seguridad. Este enfoque permite que todos informen lo que ven y que los funcionarios del distrito puedan responder.

Lo más importante, sin embargo, fue la transición del distrito a los “protocolos de lenguaje sencillo”, es decir, el abandono del uso de códigos de colores para describir y transmitir la información relativa a los incidentes de seguridad en los campus.

El problema, según Toni Barnes, director de los Servicios de Apoyo a la Seguridad Escolar de Broward, era que los códigos escolares usados por los funcionarios del distrito no eran los mismos que los usados por el sistema hospitalario o incluso por las fuerzas del orden. Al abandonar el sistema de colores se pretendía evitar confusiones y usar el mismo lenguaje de respuesta estándar. Ahora, en lugar de indicar un código rojo, que puede indicar algo diferente en otro lugar, los funcionarios del distrito usan el término lockdown.

Los funcionarios no solo hicieron el cambio en los campus, sino que se reunieron con todos y cada uno de los municipios de Broward para hacer la transición a un lenguaje sencillo también, dijo.

Para Lisa Maxwell, directora ejecutiva de la Asociación de Directores y Asistentes de Broward, el distrito escolar todavía tiene que limar la colaboración entre la oficina de Seguridad y Preparación para Emergencias y los directores locales, un problema del cual culpó a Cartwright. Maxwell, sin embargo, elogió a las escuelas que adoptaron tras el tiroteo de Parkland nuevas protecciones, como cámaras y timbres en las entradas principales, y desarrollaron simulacros y capacitación.

“El problema es que, por la razón que sea, la ahora ex superintendente quería mezclar las responsabilidades de los directores y del departamento de seguridad. Así que no está claro quién está a cargo de los monitores del campus”, dijo al Herald el mes pasado. “La posición de los directores es o todo o nada: o tenemos todo el control y la responsabilidad, o nada, porque lo que acaba ocurriendo es que hay un duelo de mandos y supervisores”.

Lo ideal, dijo, sería que los directores solo supervisaran el tema, pero no trabajaran directamente en él.

Un letrero que dice '1240 ventana orientada al oeste' y cinco agujeros de bala se pueden ver en una ventana del tercer piso del edificio 1200 en la Secundaria Marjory Stoneman Douglas en Parkland el 4 de agosto de 2022. El edificio de primer año es donde 17 estudiantes y educadores fueron asesinados a tiros el 14 de febrero de 2018.
Un letrero que dice '1240 ventana orientada al oeste' y cinco agujeros de bala se pueden ver en una ventana del tercer piso del edificio 1200 en la Secundaria Marjory Stoneman Douglas en Parkland el 4 de agosto de 2022. El edificio de primer año es donde 17 estudiantes y educadores fueron asesinados a tiros el 14 de febrero de 2018.

Capacitación continua

Según Barnes, “la seguridad es cosa de todos”. Por eso el distrito exige ahora capacitación en sistemas de mando de incidentes a los administradores escolares, a los miembros del equipo SAFE, al personal de seguridad, a la dirección del distrito y a la unidad especial de investigación, dijo.

“Queremos asegurar que somos conscientes de lo que está pasando” cuando llegan las fuerzas del orden y que seguimos los protocolos de Seguridad Nacional y de la FEMA, dijo.

El personal también recibe capacitación continua sobre el plan de comunicación de crisis del distrito y todas las escuelas están equipadas con las guías de protocolo de emergencia.

Del mismo modo, en Miami-Dade, el distrito lleva a cabo anualmente simulacros de emergencia y ejercicios funcionales con víctimas masivas en los centros escolares y, en muchos casos, en colaboración con los socorristas municipales. Los simulacros de incendio, rehenes y tiradores activos se realizan mensualmente.

Lo que aún se necesita

Debbie Hixon, cuyo esposo Chris murió en el tiroteo de Parkland mientras intentaba desarmar al agresor, aplaudió a los esfuerzos del distrito escolar por imponer medidas como puntos de entrada únicos, detectores de metales y vallas de seguridad, pero cree que aún queda trabajo por hacer. Inició su carrera como miembro de la Junta Escolar de Broward después de la tragedia y actualmente es su vicepresidenta. Chris era el director atlético de la escuela.

“Hay un montón de cosas que están en las políticas, pero no todos siguen con la misma fidelidad, así que creo que tiene que ser más coherente”, dijo. Además, le gustaría ver un cambio cultural más fuerte en los distritos escolares de todo el país. “La cultura ha cambiado, pero todavía tiene que mejorar en cuanto a la comprensión de que siempre tenemos que estar atentos y ser diligentes con la seguridad”.

Por su parte, Gualtieri dijo que los distritos escolares necesitan hacer un seguimiento de los datos con más precisión y más colaboración. Para ello, quiere poner en marcha una base de datos centralizada para todas las escuelas de la Florida para realizar un seguimiento de las evaluaciones de amenazas. De ese modo, si los alumnos se trasladan de Jacksonville a los Cayos de la Florida, sus expedientes les seguirán. Si ya han mostrado un comportamiento preocupante y necesitan ayuda, todos los funcionarios lo sabrán.

Gualtieri dijo que también quiere ver una transición de poder de la Comisión MSD al Departamento de Educación del estado. A raíz de la tragedia, los legisladores estatales nombraron la comisión para investigar y recomendar formas de fortalecer el sistema. Gualtieri dijo que, a largo plazo, esa responsabilidad debe institucionalizarse más directamente dentro del departamento.

Tanto los funcionarios del distrito escolar de Miami-Dade como los del Condado Broward están de acuerdo en que hay que seguir trabajando.

En Miami-Dade, eso se ve como la implementación de más oportunidades de capacitación para los empleados nuevos y actuales, lo que pudiera incluir la participación en los simulacros funcionales anuales del departamento, dijo Silva. Otras mejoras incluyen potenciar los sistemas de cámaras del campus, como aumentar el número de cámaras, mejorar los sistemas de radio y añadir acceso wifi en las zonas escolares. Sin embargo, los funcionarios dijeron que se necesita más financiación estatal para complementar esas adiciones.

En las escuelas de Broward, Barnes citó las actualizaciones de la tecnología y la sólida asociación del distrito con las fuerzas del orden que apoyarán nuevos proyectos en el futuro.

“Estamos constantemente en capacitación, investigando [y] analizando las mejores prácticas para la seguridad y la protección, y esto va a ser un cambio eterno”, dijo Barnes. “Sí, vamos a tener proyectos en los próximos años porque siempre queremos estar a la vanguardia de hacer lo que tenemos que hacer para asegurarnos de que todos nuestros estudiantes estén seguros”.