Yahoo Noticias Qué es Cándida auris, el “superhongo” que pone en alerta a los científicos y tiene sus dos primeros casos en la Argentina
El Ministerio de Salud informó que se detectaron en la Argentina los primeros dos casos de Cándida auris, un patógeno conocido como “superhongo”, que crece como la levadura y es resistente a los fármacos. Las muestras en las que se detectó el hongo provenían de pacientes tratados en una clínica de la ciudad de Buenos Aires que, según informa la cartera sanitaria, “no compartieron el mismo ámbito en el mismo momento”.
Este “superhongo” no debe generar alarma en la población en general. Los casos de Cándida auris suelen aparecer en centros de atención médica o asilos de ancianos, en general, en pacientes que tienen un compromiso inmunitario.
En los casos que se detectaron en la Argentina, uno de los aislamientos proviene de un paciente internado desde el 2 de octubre en la unidad de cuidados intensivos de una clínica porteña, que vino derivado de una clínica del exterior, en un vuelo sanitario. Este paciente, actualmente, permanece internado.
El 18 de octubre se le realizó un urocultivo a esta persona, con aislamiento de Cándida sp, que el 28 de octubre fue identificado como Cándida auris en un laboratorio privado. Las autoridades sanitarias argentinas enviaron, entonces “un requerimiento de información al país de procedencia del caso sobre antecedentes de patógenos en la clínica donde estuvo internado uno de los pacientes”, informó el Ministerio de Salud.
El otro aislamiento corresponde a un paciente que fue tratado de forma ambulatoria en la misma clínica, donde el 13 de octubre se le realizó un cultivo de líquido peritoneal en el que se aisló una levadura posteriormente identificada como Cándida auris. La cartera de Salud informa que estos dos pacientes no compartieron “el mismo ámbito en el mismo momento” durante su tiempo en la clínica y la investigación epidemiológica “continúa en proceso”, según el comunicado de Salud.
En el marco del Reglamento Sanitario Internacional, se informó de los casos a través del Centro Nacional de Enlace a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), señala la cartera sanitaria.
¿Cómo se contagia y qué tipo de personas pueden infectarse con el “superhongo”?
La Cándida auris es un patógeno que se transmite a través del contacto con ambientes contaminados o con personas colonizadas. Fue aislado y descrito por primera vez en 2009, en el canal auditivo de una mujer en Japón. De hecho, auris proviene de “oreja”. Desde entonces, fue reportada como agente causal de infeccionesinvasoras en humanos en al menos 47 países.
En general, este hongo afecta a personas que tienen su sistema inmunológico debilitado, por ello es que se han encontrado casos en centros médicos o asilos de ancianos. De acuerdo con el Departamento de Salud de Louisiana, los brotes se han asociado a la propagación vía el contacto con pacientes infectados y superficies o instrumentos o equipo contaminados.
Como otras enfermedades asociadas a la atención de la salud y a patologías fúngicas invasivas, esta infección afecta a pacientes que requieren de cuidado a largo plazo y a aquellos con algunas condiciones subyacentes o que se encuentran conectados a dispositivos médicos como tubos de respiración o catéteres.
Síntomas y peligrosidad
Los síntomas más comunes de la Cándida auris son fiebre y escalofríos que no mejoran después del tratamiento con un antibiótico, pues se suele sospechar de una infección bacteriana. Es necesario por ello la consulta al médico si una persona cree estar enfermo de una afección fúngica o asociada a la atención de la salud. De hecho, para detectar la Cándida auris, que suele confundirse con otros hongos, se requiere tecnología de laboratorio especializada.
De acuerdo con el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, este “superhongo” puede causar “infecciones invasivas sanguíneas y de otros tipos, especialmente en los pacientes que están internados en hospitales y hogares de ancianos y que tienen muchos problemas médicos”. El dato alarmante, en estos casos, es que más de 1 de cada 3 pacientes mueren dentro del mes de haber recibido el diagnóstico de una infección invasiva por Cándida auris.
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Uno de los fenómenos que tornan más riesgosa a esta afección es su resistencia a los fármacos. “Los medicamentos antimicóticos que comúnmente se usan para tratar otras infecciones por Candida con frecuencia no tienen efecto en la auris”, dice la página de la CDC, que añade: “Algunas cepas aisladas de C. auris son resistentes a las tres clases principales de medicamentos antimicóticos”.
Consejos de la CDC para detener un brote de Cándida Auris
Finalmente, la CDC da una serie de instrucciones para detener un posible brote de Cándida auris en los centros de atención médica. En ello deben trabajar autoridades de salud pública, trabajadores de la salud, laboratorios y también, las personas cercanas a pacientes con Cándida auris, o en riesgo de contagiarse.
Para los familiares y otras personas cercanas a los pacientes con C. auris
Límpiense las manos con agua y jabón o desinfectantes, antes y después de tocar a un paciente con C. auris o el equipamiento que haya en su habitación.
Recuérdenles a los trabajadores de atención médica que se limpien las manos.
Para el personal de laboratorio, trabajadores de atención médica y funcionarios de salud pública
Sepan cuándo sospechar de la existencia de C. auris y cómo identificarla de manera adecuada.
Notifiquen los casos rápidamente a los departamentos de salud pública.
Si son trabajadores de salud pública, límpiense las manos correctamente y hagan uso de elementos de protección como batas y guantes para prevenir la propagación.
Limpien las habitaciones de los pacientes a fondo y con un desinfectante que actúe contra la C. auris. Investiguen rápidamente los casos de C. auris y determinen otras maneras de prevenir la propagación.
