La buena relación de Alfonso Díez y Eugenia Martínez de Irujo

En el ideario de todos se encuentra la boda de Alfonso Díez con Cayetana Fitz-James Stuart cuando ella, a su longeva edad, bailaba sevillanas como una niña ilusionada ante la prensa y sus invitados al enlace.

Ahora se acaba de cumplir una década desde aquella imagen y, desafortunadamente, la duquesa de Alba falleció en 2014, sin embargo a aquella mujer valiente y rebelde que no aceptaba que nadie le dijera como tenía que vivir su vida, le encantaría hoy saber que su hija y su viudo se llevan de maravilla.

Alfonso Díez llegó por sorpresa a la vida de Cayetana y lo suyo fue una historia de amor tardía pero intensa y real. La compañía, la cultura, la discreción y el respeto entre ambos fueron su lema durante toda la relación que, por supuesto, acabó en boda.

Eugenia Martínez de Irujo asegura que con Alfonso mantiene relación y además añade que: “Le tengo mucho cariño” pero, siente años después de morir su madre, la relación entre ambos no se limita a un WhatsApp cordial por navidad sino que Eugenia ha hecho público que “De vez en cuando, nos vemos”.

La ex de Francisco Rivera recuerda también que se perdió la boda de Alfonso y Cayetana en la capilla del Palacio de las Dueñas de Sevilla porque se encontraba en el hospital ingresada. La duquesa de Montoro contrajo la varicela y estuvo una semana entera en cama, todavía se estremece cuando lo recuerda “para mí fue horrible, no lo he pasado peor en toda mi vida” asegura a ‘El Español’.

Esta estrecha relación de Eugenia con Alfonso también se extiende a su hermano Cayetano Martínez de Irujo quien, en un primer momento, desconfió de las intenciones de Díez. Es “normal” que, al tener su madre más de 80 años, la aproximación sentimental de un hombre más joven (hoy Alfonso tiene 70) le oliera a interés económico.

Cayetano relató que: "Mi hermano Carlos me dijo que mi madre tenía novio, que se lo habían dicho en Sevilla y que me lo tomara en serio. Yo no me lo podía creer. ¡Pero cómo me voy a creer que mamá, con 84 años, se ha echado un novio!”.

Y prosiguió contando que: “Ya me enteré que todo el mundo le conocía y yo, que era el hijo pequeño, convoqué en Liria a Alfonso para ver qué intenciones tenía y les pregunté cómo se habían conocido. Lo más gracioso es que mi madre me daba explicaciones y él estaba blanco”.

A día de hoy Alfonso y Cayetano mantienen una excelente relación y de hecho, tras la misa funeral de la duquesa, tributo a su fallecimiento, ambos cenaron juntos y se reían recordando ese primer ‘interrogatorio’ al que le sometió el hijo de ella al recién llegado por aquel entonces.

La verdad es que Alfonso, con su seriedad y el cariño con el que acunaba a Cayetana, se ha ganado el afecto no solo de sus amigos y familiares sino también el del gran público que, siguiendo la prensa rosa, fue partícipe de esta historia de amor que hizo que la duquesa de Alba partiera sonriendo y con el corazón lleno de paz habiendo cumplido su sueño de casarse con el último hombre al que amó en vida.