Bloomberg viajó a la COP25 como candidato contra el calentamiento frente a Trump

MADRID.- El cambio climático está jugando un rol histórico en la campaña presidencial estadounidense. En el pasado, el asunto apenas se mencionaba y estaba muy abajo en la lista de prioridades. Pero hoy, para todos aquellos demócratas que quieran dar una verdadera batalla al candidato republicano Donald Trump, es imperativo presentarse con planes concretos y detallados sobre cómo abordar el problema que se ha vuelto central en la agenda mediática.

Así, el último en sumarse a las filas ha sido el multimillonario Michael Bloomberg, quien lanzó su campaña hace menos de tres semanas y ya busca plantarse como un férreo defensor del medio ambiente.

"Estoy aquí porque el presidente Trump no ha venido. Porque su administración rechaza luchar contra el cambio climático y nosotros tenemos que hacer el trabajo" dijo Bloomberg al llegar hoy a la conferencia climática global en Madrid.

"El próximo presidente de Estados Unidos debería suspender por completo los subsidios a los combustibles fósiles", añadió el ex alcalde de Nueva York y aspirante a la candidatura demócrata a la presidencia de Estados Unidos.

Bloomberg arribó cuando la cumbre entraba en su fase más importante. Funcionarios de casi 200 países se sumaban hoy a la cita para abordar algunos de los temas más complejos que los negociadores no han podido resolver en la última semana, como concretar las normas para mercados internacionales de carbono que los economistas dicen que podrían ayudar a recortar las emisiones o ayudar a los países pobres a afrontar los efectos del aumento de las temperaturas.

El Acuerdo de París

Ataviado con una corbata verde, el multimillonario recordó que su compromiso contra el cambio climático viene de lejos y aseguró haber financiado la participación estadounidense de las tres últimas COP, tras la retirada del Acuerdo de París anunciada por Donald Trump.

Estados Unidos sigue en la lucha contra el calentamiento, necesitada de "liderazgo" y "sentido común", afirmó Bloomberg al inaugurar un evento sobre finanzas sostenibles organizado por España, donde se celebra la cumbre.

El empresario de 77 años presentó los resultados de su iniciativa privada para organizar a miles de ciudades y compañías estadounidenses que se comprometerían a cumplir los términos de un acuerdo climático internacional que el gobierno de Donald Trump está en proceso de abandonar.

"Los estadounidenses están dispuestos a seguir trabajando incluso con un negacionista del cambio climático en la Casa Blanca'', dijo Bloomberg en una sala llena de periodistas y funcionarios. "La Casa Blanca importa, pero en ocasiones no demasiado''.

El demócrata, que abandonó hace poco su cargo como enviado especial de la ONU para acción climática, ha prometido volver a sumarse al Acuerdo de París si es elegido presidente.

Al contrario que en muchas cumbres climáticas anteriores, pocos jefes de Estado participarán en las conversaciones este año. Estados Unidos ha enviado a una diplomática de carrera, la embajadora Marcia Bernicat, como jefa de su delegación.

John Kerry, que fue secretario de Estado con el último gobierno demócrata de Estados Unidos, también asistió a actos celebrados en paralelo a la conferencia, y dijo que la ausencia de representantes de la Casa Blanca en las conversaciones "habla por sí misma''.

La mayoría de los países enviarán en su lugar a sus ministros de medio ambiente o a otros altos cargos, lo que ha preocupado a algunos expertos.

"Demuestra que aún no se ha interiorizado la situación de emergencia en la que estamos, que tan pocos jefes de estado vengan a Madrid listos para remangarse y hacer lo que sea necesario para responder de verdad a la ciencia'', indicó Jennifer Morgan, directora ejecutiva de Greenpeace International.

Morgan acusó a algunos gobiernos, como Brasil y Arabia Saudita, de intentar debilitar los acuerdos, y pidió a la Unión Europea que trabajara con países vulnerables para contrarrestar esos esfuerzos.

Los activistas de medio ambiente confiaban en que la UE presentara un ambicioso plan esta semana para reducir emisiones de efecto invernadero en el medio y largo plazo, lo que enviaría un mensaje de esperanza a los cansados negociadores en Madrid.

La nueva presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha respaldado la petición de que la UE reduzca a cero sus emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050.

Los científicos protagonistas

Los científicos dicen que las emisiones de efecto invernadero tienen que empezar a bajar de forma drástica a partir del año que viene para que haya alguna posibilidad de alcanzar el objetivo fijado en el Acuerdo de París y limitar el calentamiento global a 1,5 grados.

Los negociadores en Madrid trabajaron hasta las 3 de la mañana para preparar el terreno a los ministros, indicó un funcionario de alto nivel. "Esperemos que podamos de verdad dar algo de forma y significado al lema 'Tiempo de actuar'", dijo Sigrid Kaag, ministra holandesa de Comercio Exterior y Cooperación al Desarrollo, refiriéndose al lema de la conferencia. "Es ahora o nunca''.

Entre tanto, los científicos que llevan décadas advirtiendo sobre los catastróficos efectos del calentamiento global se sumaron a un grupo de activistas para pedir más voluntad política.

Como hicieron el día anterior con otros activistas, las jóvenes ambientalistas Greta Thunberg, de Suecia, y Luisa Neubauer, de Alemania, instaron a los medios a dirigir su atención a los científicos y no a ellas.

Thunberg, que ha despertado una gran atención mediática durante su visita a Madrid, afirmó que los medios y el público deberían escuchar a los científicos para "difundir información que tan desesperadamente tiene que difundirse''.

"Ahora, la gente no es del todo consciente de lo que está ocurriendo'', afirmó.

Agencias AFP y AP