La bandera confederada crea controversia en Texas

Para unos es el símbolo de un pasado glorioso al que, quizá, desearían volver. Otros lo consideran un ominoso símbolo de opresión y discriminación que no debe ser ensalzado. Unos invocan la libertad de expresión y señalan su derecho para mostrar los mensajes que deseen y algunos consideran que eso más que libertad es apología del odio y de un pasado tormentoso que debe quedar superado.

Es la pugna por el uso de la bandera de guerra confederada en las placas de los automóviles en Texas.

El gobierno de ese estado había prohibido el uso de la imagen de la bandera de batalla de la Confederación –la entidad esclavista que se separó de la Unión y dio pie a la Guerra Civil estadounidense entre 1861 y 1865- en las placas de los automóviles en Texas. La negativa se dio cuando un grupo denominado Sons of Confederate Veterans (Hijos de los Veteranos Confederados) solicitó en 2011 que se les permitiera incluir la bandera de guerra confederada y el nombre de su asociación en las placas de los vehículos texanos.

Ante la negativa, la asociación consideró que era víctima de censura y abuso de autoridad, además de que se vulneraba su libertad de expresión, y demandó al estado de Texas.

Inicialmente la demanda no prosperó pero un panel federal de apelación, informó el periódico ‘Dallas Morning News’, falló en contra del gobierno de Texas y declaró que se habían violado los derechos de libre expresión de la asociación de veteranos confederados y se había cometido discriminación contra ellos, pues a juicio de la mayoría de los miembros del panel de apelaciones, la imagen de la bandera confederada en la placa es una expresión personal del propietario del auto y no un mensaje procedente del estado, y por eso las autoridades no pueden prohibirla.

El gobierno de Texas rechazó en su momento esas alegaciones, diciendo que su facultad para autorizar lo que puede aparecer o no en las placas no viola la libertad de expresión y protege en cambio a la sociedad de símbolos que pueden ser considerados ofensivos o regresivos.

Por lo pronto, los Hijos de los Veteranos Confederados se han alzado con una victoria, emulando a su reverenciado general Robert E. Lee, pero no está claro si lograrán al final ganar la guerra. Pero todo puede suceder. Texas será el décimo estado en el que el uso de la bandera confederada es permitido en placas de automóviles, pero el gobierno de ese estado estudia si apelará, posiblemente ante la Corte Suprema de Estados Unidos, indicó el ‘Dallas Morning News’. Incluso el gobernador de Texas, Rick Perry, rechazó en su momento la inclusión del símbolo confederado en las placas diciendo que es mejor no rascar viejas heridas.

La bandera de guerra confederada clásica muestra una cruz azul diagonal con vivos blancos con 13 estrellas blancas, todo sobre fondo rojo. No es en sí la bandera oficial de la Confederación, sino la de los ejércitos confederados durante la Guerra Civil.

La organización cívica NAACP dijo, de acuerdo al diario mencionado, que el fallo favorable a los Hijos de los Veteranos Confederados es un día triste para los afroamericanos y otros grupos que han sido víctimas de grupos que promueven el odio en Texas y señaló que el uso de la bandera confederada equivale a exaltar la esclavitud.

Los simpatizantes de esa placa dicen que la idea es honrar a los soldados confederados y no causar controversias, pero lo cierto es que el tema es candente y aún no está concluido.