Bills se alistan para medirse a los Chiefs sabiendo que no aliviará desventura de playoffs pasados

ORCHARD PARK, Nueva York, EE.UU. (AP) — Por jugoso que parezca el esperado duelo del domingo entre Patrick Mahomes y los invictos Chiefs (9-0) ante Josh Allen y los Bills (8-2), en fuga como líderes de la división Este de la AFC, es necesaria una perspectiva sobria basada en la historia reciente.

Los Bills han sido exitosos con tres victorias consecutivas en duelos de temporada regular y que se ha convertido en un enfrentamiento anual entre contendientes de la Americana, pero lo que más sobresale es que Buffalo ha salido con las manos vacías en los juegos que realmente importan.

Sea en casa o en Arrowhead desde el 2020, Buffalo marcha 0-3 en los últimos tres enfrentamientos de postemporada ante Kansas City.

Eso incluye una derrota en casa 27-24 en la ronda divisional en enero, en la que los equipos intercambiaron ventajas cinco veces, y quedó sentenciada cuando Tyler Bass, de Búfalo falló un intento de gol de campo de 44 yardas con 1:43 por jugar.

A la fecha, el entrenador de los Bills, Sean McDermott se niega a responder preguntas sobre si hubo una falla de comunicación. El desenlace fue denominado “13 segundos”, reflejando cuánto tiempo faltaba por jugar para que los Chiefs avanzaran 44 yardas en esa posesión que preparó el gol de campo de 49 yardas de Harrison Butker.

El domingo, la temporada no está sobre la balanza para dos equipos que se encuentran en el asiento del conductor en su camino a los playoffs.

Pero hay subtramas suficientes para enganchar a los televidentes.

Para Buffalo, la cita presenta una oportunidad para terminar con la apuesta de los Chiefs hacia una temporada perfecta, a la vez que cierra una brecha en la carrera por la primera siembra de la AFC con miras a los playoffs.

Los Bills están en posición de validarse como contendientes en la conferencia en una temporada en la que han mejorado su récord ante rivales que marchan con una marca combinada de 25-49, incluidas dos victorias ante Miami (2-6). Las dos derrotas de Buffalo fueron contra Baltimore (7-3) y Houston (6-4).

Indistintamente del calendario, los Bills ya han demostrado mucho en lo que al principio se suponía que sería un año de declive para los vigentes cuatro veces campeones divisionales seguido de una temporada baja de reestructuración forzada por el tope salarial. A pesar de separarse de seis de ocho capitanes, Búfalo ganó ocho de sus primeros 10 juegos por octava ocasión en la historia de la franquicia, y la primera desde 1993.

Los Bills están ganando juegos como grupo, recibiendo contribuciones en cada fase en situaciones críticas, y una vez más fue evidenciado en una victoria por 30-20 en Indianápolis el domingo.

McDermott se mantiene con la consigna de un juego a la vez, dejando que otros aviven el revuelo iniciando esta semana.

“No pongo demasiada atención, pero Derek me pone al tanto cada cierto tiempo”, dijo McDermott refiriéndose al jefe de comunicaciones de los Bills, Deker Boyko acerca de lo que se informa.