Biden insta a mantener la paz en Irlanda al comienzo de una visita a la isla

Belfast (R.Unido), 11 abr (EFE).- El presidente estadounidense, Joe Biden, ha indicado que usará la visita que inicia este martes a Irlanda del Norte y la República de Irlanda para recordar la necesidad de "mantener la paz" en la isla, que celebra estos días el 25 aniversario del acuerdo del Viernes Santo, el texto que puso fin al conflicto.

El mandatario demócrata, de profundas raíces irlandesas, efectuó esas declaraciones antes de embarcar en Washington en el Air Force One con destino a Belfast, donde será recibido poco después de las 20.00 horas (GMT) de hoy por el primer ministro británico, Rishi Sunak.

Su visita de menos de un día a Irlanda del Norte coincide con un momento de crisis para el proceso de paz, con una parálisis política provocada por el rechazo del Partido Democrático Unionista (DUP) -segunda formación norirlandesa- al nuevo Acuerdo Marco de Windsor, negociado por Londres y Bruselas para adaptar a la provincia a los arreglos comerciales posBrexit.

El veto unionista ya viene de lejos, pues aunque apoyó este divorcio en la consulta de 2016, renegó también después del controvertido Protocolo para Irlanda del Norte, sustituido por el texto de Windsor para resolver los problemas políticos y económicos que causó.

En este contexto, el DUP aún se niega a compartir con el nacionalista Sinn Féin, primera formación de la región tras su histórica victoria en las elecciones del pasado mayo, el Ejecutivo autónomo de Belfast, uno de los principios básicos del pacto del Viernes Santo.

RECELO UNIONISTA AL "IRLANDÉS" BIDEN

Antes de llegar a la capital norirlandesa, Biden insistió en que su "gran prioridad" es asegurar que "los acuerdos irlandeses y el acuerdo de Windsor siguen en pie, que se mantenga la paz".

De momento, el presidente estadounidense se ha cuidado de efectuar llamamientos que puedan molestar a los unionistas, muy sensibles a las presiones exteriores y conscientes de que la relación entre Washington y Londres no ha sido la mejor en los últimos años, sobre todo durante los mandatos de Boris Johnson y Lizz Truss por sus amenazas de dar pasos unilaterales para alterar los acuerdos del Brexit, censuradas por Biden.

Los probritánicos protestantes también consideran que Biden, quien aprovecha cualquier oportunidad para hacer gala de su origen irlandés y fe católica, es un político más próximo a Dublín que a Londres, tanto por su visión geopolítica como por sus orígenes.

Tampoco está ayudando la brevedad de su visita a Irlanda del Norte y escasez de eventos de alto perfil, en comparación con los tres días que permanecerá en la República de Irlanda, donde están programados encuentros con el presidente, con el primer ministro, un discurso en el Parlamento y paradas en los condados de Louth y Mayo para reunirse con sus familiares y dirigirse a la ciudadanía.

Por contra, Biden tiene previsto reunirse el miércoles con Sunak, antes de que pronuncie un discurso en el nuevo campus de la Universidad del Ulster, en la capital norirlandesa, en una intervención a la que también están invitados los principales líderes políticos de la región.

No está claro, no obstante, si Biden tendrá contactos, ya sea de manera colectiva o individual, con los políticos norirlandeses antes de partir hacia Dublín mañana mismo para seguir su gira en la República de Irlanda hasta el sábado.

Un portavoz de Downing Street, despacho oficial de Sunak, recalcó hoy que el jefe de Gobierno y su colega estadounidense mantienen una "relación de trabajo increíblemente positiva", pese a que Washington ha presionado a Londres en los últimos años respecto al Brexit.

LONDRES REBAJA LA TENSIÓN

La fuente negó ante los periodistas que el encuentro entre ambos mandatarios en Belfast vaya a ser de perfil bajo, después de que diversos medios hayan indicado que la Casa Blanca prevé una "reunión para tomar café" entre ellos, en lugar de un encuentro bilateral formal.

En este clima enrarecido, la administración estadounidense también ha querido resaltar el carácter económico de la visita y las oportunidades que presenta la paz para la región en este terreno, uno de los puntos que tocará Biden durante su discurso en la universidad, donde estará acompañado por el enviado especial de Washington a la región, Joe Kennedy III (nieto de Robert Kennedy).

Mientras tanto, la Policía norirlandesa (PSNI) ya ha desplegado un fuerte dispositivo de seguridad ante la llegada del presidente, el "más importante en casi diez años", según han explicado sus mandos.

Desde primera hora de hoy, las fuerzas del orden mantienen acordonadas varias zonas del centro de la capital para impedir el paso de vehículos y controlar el tránsito de peatones, al tiempo que han reforzado su presencia en las calles con efectivos adicionales traídos de otras partes del Reino Unido.

Estas medidas de seguridad son habituales para visitas de este tipo, si bien la llegada de Biden ha coincido asimismo con un repunte de la actividad de los disidentes del ya inactivo IRA, hasta llevar a la PSNI a elevar el nivel de la amenaza terrorista de "considerable" a "grave".

(c) Agencia EFE