El Banco Central cierra otra semana comprando reservas, pero no al ritmo que necesita para cumplir con el FMI

El BCRA compró otros US$225 millones en la semana
El BCRA compró otros US$225 millones en la semana

El Banco Central (BCRA) se alzó hoy con unos US$40 millones por sus intervenciones sobre la plaza cambiaria oficial de contado, lo que le permitió cerrar por tercera vez consecutiva una semana sumando reservas por esta vía (unos US$225 millones) y elevar el saldo favorable en lo que va del mes a US$766 millones.

El monto adquirido se ubica 57,5% por debajo de los casi US$1800 millones que había sumado a esta misma altura durante mayo de 2021, período que el BCRA cerraría capturado del mercado US$2089 millones para sus reservas, el mayor monto para ese mes desde los US$2440 millones que embolsara en mayo de 2014.

Y aunque el ritmo de compras marca una especia de “normalización” respecto de abril, mes en que la entidad que conduce Miguel Pesce se quedó con apenas US$16 millones (sólo 11% de las divisas que aportó al país la balanza comercial), no alcanza para tranquilizar al mercado, en especial luego de que el FMI ratificara en las últimas horas que no tiene previsto revisar las metas pactadas con el Gobierno.

En especial, porque el nivel de reservas propias con que cuenta sigue siendo muy bajo y la posición líquida -aunque mejoró algo- se mantiene fuertemente negativa, en torno a los US$2500 millones, estiman en el mercado.

“Con un stock de reservas netas hoy en el orden de los US$3500 millones, siguiendo los criterios de cómputo del FMI, la sensación es que no podrá cumplirse la meta de US$6400 millones estipulada para fin de junio”, apunta el economista y consultor Fernando Marull.

Para captar los US$2900 millones que necesitaría para lograr ese objetivo, el BCRA debería comprar en el mercado más US$100 millones por día en las 23 ruedas de mercado que restan para alcanzar la mitad de año, cifra que luce cada vez más improbable y anticipa, para los analistas, lo que puede venir.

“En los próximos meses el agro va a empezar a bajar el ritmo de liquidaciones, justo en un momento en que las importaciones de energía van a subir y se van a hacer sentir. Esto tenderá a reducir el saldo comercial y, dado que el BCRA tiene que comprar reservas, lo más probable es que nos encaminemos a un nuevo endurecimiento al cepo, tanto en importaciones de Bienes, Servicios y Turismo, como en pagos de deuda”, sostiene.

Los economistas advierten que con un grado mayor de restricciones de acceso al mercado de cambio, numerosos rubros pueden enfrentar “cuellos de botella”, lo que afectaría el nivel de actividad y sumaría presiones inflacionarias a la economía. De allí la atención con que se sigue en el mercado el nivel de compras de la entidad monetaria.

El BCRA cerró la actividad cambiaria de la semana validando un alza de $117,43 a $118,48 del dólar mayorista o comercial (+0,89%), un ritmo de actualización que se mantiene atrasado respecto de la inercia inflacionaria de la economía pero alcanzó para dejar “en pausa” el proceso de apreciación del peso, sólo porque el dólar a nivel global detuvo su carrera alcista (el dollar index cayó de 104,50 a 103 en la semana). Así lo muestra el Índice de Tipo de Cambio Real Multilateral al rebotar de 95,3 a 97,2 en el período.