Avalado o cuestionado, el “dólar soja” ya aportó ingresos por más de 5000 millones de dólares

En septiembre se dinamizó la comercialización de soja, la actividad en las fábricas y el ingreso de divisas
En septiembre se dinamizó la comercialización de soja, la actividad en las fábricas y el ingreso de divisas

Un tuit de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina anunció esta semana que entre el 1° y el 21 de septiembre el ingreso de divisas superó los US$5130 millones. Se trata de una liquidación récord y es resultado del Decreto 572/22, denominado coloquialmente “dólar soja”, que vence a finales del presente mes. Desde este espacio, dos semanas atrás anticipamos que los US$5000 millones que necesitaba el ministro de Economía, Sergio Massa, iban a ser superados.

La medida aprobada por muchos y cuestionada por pocos tuvo el resultado esperado, al menos desde el punto de vista del impacto en el mercado. ¿Quiénes aprobaron la medida? Los miles de productores que comercializaron en apenas 13 jornadas hábiles cerca de 10 millones de toneladas, entre soja disponible y la fijación de valor a contratos anteriores.

La medida le permitió a Massa llegar a Washington con dólares en el bolsillo y garantizarle al FMI el repunte del ingreso de divisas y recomposición de reservas en el Banco Central. En definitiva, evito que la Argentina entrara en un nuevo default.

El otro sector beneficiado fue la industria aceitera, que con la entrada de mercadería logró evitar el cierre anticipado de plantas de proceso hacia el que se dirigía por no tener la soja disponible para sostener el ritmo de molienda. Recordemos que la última semana de agosto los productores vendieron 150.000 toneladas de soja. Si la industria aceitera procesa 4 millones de toneladas por mes y el nivel de existencias se mantenía mínimo, más temprano que tarde las plantas tenían que cerrar por falta de soja para poder moler.

Por el dólar soja ya se liquidaron más de US$5000 millones en divisas, un récord para septiembre

A pesar de semejante volumen de oferta en apenas dos semanas, los márgenes de molienda de la industria distan mucho de ser positivos. Hubo un solo momento con margen de molienda positivo de US$10 por tonelada, entre el 6 y 7 de septiembre. Luego los márgenes volvieron a caer del lado negativo y la explicación fue el comportamiento de los precios de la harina y del aceite de soja. De principios de septiembre a la fecha, el valor FOB del aceite de soja acusó una caída de US$190 por tonelada (de 1390 a 1200 dólares). Esta baja del aceite contribuyó negativamente con US$34 por tonelada en el margen.

En el mismo periodo el precio FOB de la harina de soja mejoró en US$20 por tonelada (de 475 a 495 dólares). En este caso, la contribución positiva en el margen fue de US$14 por tonelada. La diferencia entre la menor contribución del aceite (-US$34) y la mejora en la retribución de la harina (+US$14) dejó un margen negativo de US$20 por tonelada para la industria.

¿Qué pasaré el día después del “dólar soja”? El 1° de octubre, cuando los productores no puedan acceder a vender su soja con un dólar de $200, los márgenes negativos pueden ser la antesala de un mercado que ajuste precios a la baja.

El autor es presidente de Pablo Adreani y Asociados