Las aulas se han convertido en campos de batalla política en Florida

Adele Valencia recuerda bien cómo la Sra. Brand, quien enseñaba a alumnos superdotados de cuarto a sexto grado en la Primaria Pinecrest, la animaba a leer libros que de otro modo no habría abierto, incluidos algunos sobre el Holocausto.

De hecho, Roberta Brand invitó a sobrevivientes del Holocausto a su clase para que los alumnos pudieran comprender su sufrimiento. También les habló del genocidio en Rwanda de 1994 —la masacre de hasta un millón de personas por su origen étnico—, que acababa de ocurrir y no había entrado en sus libros de texto.

“Son cosas que suponen un verdadero reto para cualquiera, especialmente para los niños pequeños, pero creo que se las enseñó de una forma adecuada para su desarrollo y que realmente amplió mis horizontes para entender lo equivocado que está victimizar a otras personas que son diferentes y no hablar en favor de las personas que son perseguidas”, dijo. “Era la educadora más amable e inspiradora”.

Valencia, de 40 años y abogada, disfrutó tanto de sus años en la Primaria Pinecrest que ella y su esposo planearon la compra de su casa basándose en la zona escolar, para poder enviar a sus hijos —Lily, de 7años, que empezará segundo grado, y Julia, de 5, que empezará en preescolar— a esa misma escuela.

Pero ahora le preocupa que sus esfuerzos hayan sido en vano: “Me preocupa cómo la posible extralimitación del estado está afectando a nuestro distrito local”.

No es la única.

Mientras se preparan para comenzar un nuevo curso escolar en las próximas una o dos semanas, muchos maestros, estudiantes y padres de escuelas públicas de Miami-Dade y Broward están ansiosos por regresar a un aula, el lugar donde se desarrollarán algunas de las leyes más controversiales promulgadas por el gobernador Ron DeSantis. Las leyes o nuevas reglas del Departamento de Educación de la Florida dictan lo que se puede enseñar sobre raza, identidad de género y orientación sexual, facultan a los padres a cuestionar los libros de la biblioteca escolar y prohíben a los maestros preguntar a los estudiantes sobre sus pronombres preferidos.

“Se siente pésimo. Se siente incierto. Se siente aterrador”, dijo Richard Judd, quien ha enseñado historia y gobierno de 11no y 12mo grados durante 23 años en la Secundaria Nova en Davie. “Hay mucho misterio y confusión”.

DeSantis, quien se está postulando para la nominación presidencial republicana en las elecciones de 2024, y sus partidarios, incluidos grupos conservadores como Moms for Liberty y County Citizens Defending Freedom, dicen que están dando a los padres que se alinean con sus puntos de vista más voz en la educación de sus hijos.

“Los derechos de los padres han sido cada vez más atacados en todo el país, pero en la Florida defendemos los derechos de los padres y el papel fundamental que tienen en la educación de sus hijos”, dijo DeSantis en un comunicado de 2022 anunciando que había firmado el proyecto de ley “Derechos de los Padres en la Educación”, que prohíbe la enseñanza de la identidad de género y la orientación sexual desde preescolar hasta el tercer grado en las escuelas públicas de la Florida y requiere una instrucción “apropiada para la edad” en los grados superiores.

DeSantis y sus partidarios también citan una agenda liberal “progresista” en las escuelas públicas y predican un retorno a una educación clásica, aunque los críticos dicen que eso está impregnado de enseñanzas cristianas blancas y oposición a ciertos temas sobre raza y comunidades LGBTQ.

“Hay mal en este mundo y estamos luchando contra él hoy aquí. Vamos a hacerlo porque Dios no se equivoca con nuestros hijos”, dijo Randy Fine, legislador republicano del Condado Brevard, ante un público de Tampa en mayo. La multitud se había reunido para ver a DeSantis firmar cinco proyectos de ley, incluido el que restringe el uso de pronombres en las escuelas.

Algunos maestros, estudiantes y padres también señalaron la reciente expansión de un programa de cupones financiado con impuestos que permite a las familias, independientemente de su nivel de ingresos, obtener dinero del gobierno para que sus hijos asistan a una escuela privada, siempre que la escuela forme parte del programa. Activistas a favor de la escuela pública dicen que esto pudiera afectar significativamente a los distritos locales.

“Esto va a ser duro para nosotros”, dijo Peter Licata, el recién contratado superintendente de las escuelas públicas de Broward, el sexto distrito escolar más grande del país.

El juez Elijah H. Williams del 7º Circuito Judicial, a la izquierda, toma juramento a Peter Licata, a la derecha, como superintendente de las Escuelas Públicas del Condado Broward, en la sala de juntas del Kathleen C. Wright Administration Center, en Fort Lauderdale, Florida, el martes 18 de julio de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com
El juez Elijah H. Williams del 7º Circuito Judicial, a la izquierda, toma juramento a Peter Licata, a la derecha, como superintendente de las Escuelas Públicas del Condado Broward, en la sala de juntas del Kathleen C. Wright Administration Center, en Fort Lauderdale, Florida, el martes 18 de julio de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com

Las aulas como campo de batalla político

En el período de sesiones de este año, la Legislatura amplió la ley de “Derechos de los Padres en la Educación”, restringiendo las lecciones de identidad de género y orientación sexual desde el tercero hasta octavo grado. Además, una norma educativa estatal promulgada esta primavera amplió las prohibiciones hasta el 12º grado, a menos que la instrucción forme parte de un curso de salud reproductiva o sea “expresamente requerida” por las normas académicos del estado.

La nueva ley también restringe a los empleados escolares de llamar a los estudiantes por su pronombre preferido, si difiere del que les fue asignado al nacer, y hace que sea más fácil que los padres impugnen el material de instrucción y los libros de la biblioteca escolar.

Eso llevó a impugnaciones que han acaparado titulares nacionales, incluida la decisión en mayo del Bob Graham Education Center en Miami Lakes de retirar de las estanterías de la biblioteca de su escuela primaria tres libros y el poema “The Hill We Climb”, escrito por Amanda Gorman y recitado por ella en la toma de posesión del presidente Joe Biden el 20 de enero de 2021.

La poetisa Amanda Gorman recita su poema "The Hill We Climb" durante la toma de posesión del presidente Joe Biden el 20 de enero de 2021, en Washington. El Bob Graham Education Center en Miami Lakes retiró el poema de las estanterías de la biblioteca de su escuela primaria después de que una madre se opusiera al poema. Robert Deutsch/USA TODAY
La poetisa Amanda Gorman recita su poema "The Hill We Climb" durante la toma de posesión del presidente Joe Biden el 20 de enero de 2021, en Washington. El Bob Graham Education Center en Miami Lakes retiró el poema de las estanterías de la biblioteca de su escuela primaria después de que una madre se opusiera al poema. Robert Deutsch/USA TODAY

Una de los padres de la escuela, que tiene grados de preescolar a octavo, se había quejado de los libros y el poema, diciendo que contenían referencias a la teoría crítica de la raza, mensajes de odio “indirectos”, ideología de género y adoctrinamiento. (La madre también se quejó de otro libro, “Countries in the News: Cuba”, que el colegio decidió que seguiría a disposición de todos los alumnos).

Para Valencia, la madre de Pinecrest, el alboroto sobre los libros resta importancia a los problemas significativos que enfrentan las escuelas.

“Creo que la mayoría de los maestros están en su profesión por las razones correctas, y están pasando apuros enormes por las deficiencias que todos tenemos de los años del COVID para conseguir que sus niños entiendan y dominen algunos de los conceptos más básicos que necesitamos para funcionar, como la Lectura y las Matemáticas”, dijo.

“Así que para mí —estas controversias como la noción de que gastáramos energía prohibiendo a una poetisa como Amanda Gorman— como que pierde el punto y distrae de los desafíos reales que tenemos”.

Los nuevos maestros de las escuelas públicas del Condado Miami-Dade escuchan mientras el superintendente José Dotres les da la bienvenida en la orientación de nuevos maestros en la Preparatoria Hialeah Gardens, el lunes 7 de agosto de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com
Los nuevos maestros de las escuelas públicas del Condado Miami-Dade escuchan mientras el superintendente José Dotres les da la bienvenida en la orientación de nuevos maestros en la Preparatoria Hialeah Gardens, el lunes 7 de agosto de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com

Controversias sobre la historia negra

El mes pasado, la Junta de Educación de la Florida, en el marco de su revisión de los libros de estudios sociales, adoptó nuevos estándares para la enseñanza de la historia negra en las escuelas públicas. Los estándares fueron muy criticados por exigir que las lecciones de las escuelas intermedias incluyeran “cómo los esclavos desarrollaron habilidades que, en algunos casos, podían aplicarse en su beneficio personal”. Otra sección de las normas que suscitó críticas fue la comparación de la violencia contra los negros con los actos de resistencia negra.

La controversia sobre el plan de estudios de historia negra se produjo tras la decisión del College Board a principios de este año de omitir referencias en su nuevo curso de Estudios Afroamericanos AP al movimiento Black Lives Matter y a las reparaciones de la esclavitud, entre otros temas. La decisión del Board ocurrió después que DeSantis anunció que el estado había rechazado el curso.

Susan Boundy, quien enseñó Historia de octavo grado en el Ruth K. Broad Bay Harbor K-8 Center durante 40 años hasta que se jubiló en 2020, dijo que las nuevas normas la sorprendieron.

Simplemente me asombró que ya no debemos enseñar cosas que se basan en la realidad. Fue muy molesto”, dijo. “La historia afroamericana, como cualquier otra historia, debe basarse en documentos, no en opiniones. Independientemente de cómo te sientas después de conocer los hechos, no puedes cambiar ningún hecho”.

Stephen Hunter Johnson, el padre de un niño de 12 años que entrará en séptimo grado en iPrep Academy North, se sintió decepcionado al saber que el comisionado de Educación de la Florida, Manny Díaz Jr., se había retirado de una asamblea el jueves por la noche en Miami Gardens para discutir los nuevos estándares. Díaz publicó en las redes sociales que estaba ocupado visitando escuelas.

“Me siento consternado e irrespetado como padre. Me siento consternado y ofendido como floridano negro”, dijo Johnson al Herald.

El comisionado de Educación de la Florida, Manny Díaz Jr., se retiró de una asamblea el jueves por la noche en Miami Gardens para discutir los nuevos estándares que la Junta de Educación de la Florida adoptó para la enseñanza de la historia negra en las escuelas públicas de la Florida. Corey Perrine/Florida Times-Union / USA TODAY NETWORK
El comisionado de Educación de la Florida, Manny Díaz Jr., se retiró de una asamblea el jueves por la noche en Miami Gardens para discutir los nuevos estándares que la Junta de Educación de la Florida adoptó para la enseñanza de la historia negra en las escuelas públicas de la Florida. Corey Perrine/Florida Times-Union / USA TODAY NETWORK

Dijo que su hijo ha experimentado el racismo en su escuela. “Hemos tenido que tener conversaciones sobre la ‘palabra con n’”, dijo. “Y estos estándares no ayudan a nada de eso. Gracias a Dios, tengo un hijo resiliente”.

Una mujer sostiene el libro 'The ABC's of Black History' durante una reunión sobre los nuevos estándares curriculares del estado en historia afroamericana en la Antioch Missionary Baptist Church, en Miami Gardens, Florida, el jueves 10 de agosto de 2023. D.A. Varela/dvarela@miamiherald.com
Una mujer sostiene el libro 'The ABC's of Black History' durante una reunión sobre los nuevos estándares curriculares del estado en historia afroamericana en la Antioch Missionary Baptist Church, en Miami Gardens, Florida, el jueves 10 de agosto de 2023. D.A. Varela/dvarela@miamiherald.com

Judd, el veterano profesor de Historia y Gobierno de secundaria en Nova, dijo que lo que le preocupa son las sanciones y consecuencias que el estado ha impuesto a los maestros que infrinjan las nuevas reglas. Dijo que aún no sabe cómo afectará esto a su enseñanza.

Las clases comienzan el lunes 21 de agosto para las escuelas públicas de Broward; en Miami-Dade, las clases comienzan el jueves 17 de agosto.

Para aliviar las dudas sobre los estándares, el superintendente escolar de Miami-Dade, José Dotres, dijo que buscará la opinión de los maestros y coordinará con ellos lecciones específicas.

Sé que ha habido preocupaciones y tenemos que trabajar con ellos”, dijo. “Tenemos que trabajar mano a mano con los maestros para que puedan ofrecer una instrucción que sea integral y que se sientan debidamente capacitados para que se sientan cómodos en la enseñanza”.

Jamal Víctor, estudiante de último año en la Preparatoria Miami Edison, dijo que a veces siente que aprende más sobre la historia negra en TikTok que en clase. El otro día vio un video sobre Robert Smalls, un esclavo de Carolina del Sur que escapó de las fuerzas confederadas mientras trabajaba en un barco de transporte en el puerto de Charleston antes de la Guerra Civil. Más tarde llegó a ser miembro de la Cámara de Representantes federal y fue influyente durante la Reconstrucción después de la guerra.

Smalls llegó a comprar la mansión de su antiguo propietario como esclavo; la Robert Smalls House figura ahora en el Registro Nacional de Lugares Históricos de Beaufort, Carolina del Sur.

“Nunca había oído hablar de él”, dijo. “Los maestros deberían hablar más de eso. Los maestros dicen que enseñan lo que es importante. Eso es historia. Eso es importante”.

Alisson Nájera, de 17 años, y Jamal Víctor, de 18, afuera del Power U Center for Social Change, el martes 8 de agosto de 2023, en Miami, Florida. Víctor, que cursará el último año en la Preparatoria Miami Edison, se preguntaba porqué aprendió sobre Robert Smalls, un esclavo de Carolina del Sur que escapó y llegó a ser representante de la Cámara de Estados Unidos, en TikTok, en lugar de en sus clases de historia negra. Lauren Witte/lwitte@miamiherald.com

La representante federal Frederica Wilson, demócrata de Miami Gardens, que fue directora de la Primaria Skyway en Miami Gardens y miembro de la Junta Escolar del Condado Dade antes de ser elegida al Congreso en 2010, ha abogado durante mucho tiempo por la enseñanza de la historia de los negros en las escuelas públicas de Florida.

Fue decisiva para que los legisladores de la Florida aprobaran una ley en la década de 1990 que obligaba a las escuelas públicas del estado a enseñar historia afroamericana, y en 1995 presionó a la Junta Escolar para que creara el primer plan de estudios de historia negra en las escuelas de Dade.

No se alegró cuando se enteró de los nuevos estándares para la enseñanza de la historia negra: “Está claro que la Junta Estatal de Educación ha hecho un ridículo intento de blanquear la historia y revisar la verdad sobre la experiencia de los negros en Estados Unidos. Pero creo que los maestros, los estudiantes y las familias de nuestro estado no son estúpidos. Saben que las personas esclavizadas fueron maltratadas”.

Estudiantes LGBTQ en el centro de las guerras culturales

La enseñanza de la identidad de género y la orientación sexual es otro tema polémico, sobre todo porque la ley estatal firmada por DeSantis en la primavera prohíbe la enseñanza sobre estos temas hasta el octavo grado, y las nuevas reglas estatales amplían las prohibiciones hasta el 12º grado, a menos que formen parte de un curso de salud reproductiva.

El conflicto quedó de manifiesto el martes cuando la Junta Escolar de Broward pasó casi cuatro horas escuchando los comentarios del público sobre si aprobar una resolución que reconozca a junio como el Mes del Orgullo y otra resolución que designa a octubre como el Mes de la Historia LGBTQ.

“No puedo empezar a decir cómo hoy se siente como el más feo ambiente antiLGBT en mucho tiempo”, dijo el activista Michael Rajner al South Florida Sun Sentinel. “Ha sido difícil estar sentado en la sala”.

Maxx Fenning, director ejecutivo del grupo de apoyo a los jóvenes LGBTQ Prisma, habla ante la Junta Escolar de Broward, el martes 8 de agosto de 2023. La junta pasó casi cuatro horas escuchando a los oradores enojados sobre si la Junta debe adoptar resoluciones que reconozcan a octubre como el mes LGBTQ y a junio como el Mes del Orgullo. Al final, la junta aprobó las resoluciones. Becon TV/Becon TV

“Con lo que tenemos que acabar es con esta etiqueta de que no se puede tener más de una opinión”, contraatacó Brenda Fam, miembro de la Junta Escolar de Broward. “No estar de acuerdo con algo no es odioso. Es tener una opinión alternativa”.

Algunos plantearon la preocupación de que tales designaciones violaran la ley, aunque Marylin Batista, asesora legal de la junta, dijo que no lo hacían.

“Estas resoluciones no son currículos. Son solo formas de mostrar apoyo a todos en nuestra comunidad”, dijo la miembro de la Junta Escolar Debra Hixon, ex profesora que dijo haber sido una de las primeras consejeras de un club de la Gay Straight Alliance en la década de 1990. “No podemos educar a nuestros alumnos si no se sienten seguros o queridos”.

Al final, la junta adoptó las resoluciones, que difieren de lo ocurrido con la Junta Escolar de Miami-Dade el pasado septiembre. En una reunión que atrajo a un contingente de Proud Boys —y donde un lado comparó la resolución para reconocer octubre como el mes LGBTQ como adoctrinamiento estudiantil, mientras que el otro invocó a los nazis obligando a gays y lesbianas a llevar una insignia de triángulo rosado—, la Junta de Miami-Dade votó 8 a 1 contra reconocer la designación de octubre. (El año anterior la Junta votó 7 a 1 a favor de reconocerlo).

Una persona que ondea una bandera transgénero se para frente a un grupo de Proud Boys afuera de una polémica reunión de la Junta Escolar de Miami-Dade, en septiembre de 2022, donde la junta votó 8-1 en contra de reconocer octubre como el mes LGBTQ. En 2021, la junta había votado 7-1 para reconocer la designación. Sommer Brugal/sbrugal@MiamiHerald.com

Artemis, un estudiante transgénero en José Martí MAST 6-12 Academy en Miami-Dade que pidió al Herald no revelar su apellido porque su familia no sabe que es transgénero, puede dar fe de cómo la ira en medio de lo que afecta a las aulas.

Dice que empezó a cuestionarse su género en sexto grado. En octavo, se lo dijo a su pareja de entonces y a sus amigos. Este otoño empezará undécimo grado.

“Da miedo”, dice Artemis, de 15 años. “Temo por mí, pero también por los niños queer que pueden estar descubriéndose a sí mismos”.

Planea ser presidenta del Club Spectrum de la Gay Straight Alliance de su escuela en el nuevo curso. “Quiero crear al menos un pequeño espacio donde los estudiantes se sientan seguros de ser quienes son”, dijo. “Espero poder hacerlo”.

El superintendente escolar de Miami-Dade, Dotres, dijo que el distrito se centraría en valorar “la individualidad y la identidad de nuestros estudiantes”.

“Siempre lo hemos hecho y seguiremos haciéndolo”, dijo. “Si hay leyes que restringen cierta instrucción, tenemos que cumplir la ley. Pero eso no nos quita la responsabilidad de crear entornos en los que los alumnos con necesidades o intereses particulares se sientan apoyados.

“Cuando estos dos puntos entren en conflicto, confío plenamente en nuestros consejeros y en el personal del distrito para poder trabajar con el estudiante, la familia y la escuela a fin de encontrar un enfoque que sea el mejor para el estudiante y le proporcione apoyo”, dijo Dotres. “Creo en el poder de las conversaciones”.

El superintendente de las Escuelas de Miami-Dade, José Dotres, da la bienvenida a unos 450 nuevos maestros en la orientación de nuevos maestros en la Preparatoria Hialeah Gardens, el lunes 7 de agosto de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com
El superintendente de las Escuelas de Miami-Dade, José Dotres, da la bienvenida a unos 450 nuevos maestros en la orientación de nuevos maestros en la Preparatoria Hialeah Gardens, el lunes 7 de agosto de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com

Aumenta las impugnación de libros

Como parte de la ley ampliada de “Derechos de los Padres en la Educación”, un padre o miembro de la comunidad puede objetar un material didáctico o un libro de la biblioteca escolar. La ley exige que el libro o los materiales se retiren en un plazo de cinco días a partir de la objeción y no estén a disposición de los alumnos hasta que se resuelva la cuestión.

Kasey Meehan, directora del programa Libertad para Leer de PEN America, una organización sin fines de lucro de Nueva York que aboga por la libertad de expresión, afirmó que la prohibición de libros ha aumentado drásticamente desde la pandemia en todo el país, pero especialmente en algunos estados como la Florida. las impugnaciones más populares incluyen libros que tienen personajes LGBTQ, exploran la raza y el racismo e incluyen cualquier mención de sexo.

Las Escuelas Públicas de Broward recibieron una impugnación de libros en el año escolar 2020-21 y uno en el año escolar 2021-22. En el año escolar más reciente, recibió 12. Las escuelas públicas de Miami-Dade no recibieron impugnaciones de libros en los años escolares 2020-21 y 2021-22. El año pasado recibió seis.

Meehan dijo que PEN ve cualquier esfuerzo por restringir los libros como problemático, ya sea una decisión temporal de eliminar el libro mientras se toma una decisión, moverlo a grados de nivel superior, colocarlo solicitando el permiso de los padres, requerir una prueba especial antes de leerlo o una prohibición completa.

“Todos esos son momentos en los que se prohíbe o disminuye el acceso”, dijo. “Todas son prohibiciones para nosotros”.

PEN, junto con la editorial Penguin Random House, demandó al Distrito Escolar del Condado Escambia y a la Junta Escolar en mayo ante un tribunal federal. La demanda alega que el distrito y la Junta Escolar del norte de la Florida infringieron la Primera Enmienda cuando la Junta votó a favor de la retirada de 10 libros de las bibliotecas escolares, entre ellos “The Bluest Eye” de Toni Morrison. Algunos de los libros se retiraron por completo, mientras que otros se eliminaron de ciertos grados. La demanda está pendiente.

'The Bluest Eye', escrito por Toni Morrison, fue uno de los libros impugnados en las Escuelas de Broward en el año escolar 2022-23. El distrito restringió el libro a los estudiantes de noveno grado o superior. HO/HO
'The Bluest Eye', escrito por Toni Morrison, fue uno de los libros impugnados en las Escuelas de Broward en el año escolar 2022-23. El distrito restringió el libro a los estudiantes de noveno grado o superior. HO/HO

Cómo enfrentan Miami-Dade y Broward la impugnación de libros

Para hacer frente a la impugnación de libros, maestros y administradores de Broward escuchan las preocupaciones de cada padre, pero usan su propio juicio, dijo Licata, el nuevo superintendente escolar de Broward.

“Tenemos que asegurar que estamos cumpliendo la ley, pero eso no significa que cuando alguien llama simplemente sacamos los libros. Es un proceso”, dijo.

El distrito, dijo, también quiere proteger a los maestros y administradores de la reacción negativa a la impugnación de libros.

“Esperamos tener un centro de intercambio de información aquí en el distrito, de modo que si un maestro tiene algo que le preocupa, no tenga que cargar con el peso”, dijo. “En lugar de eso, pueden enviárnoslo. Lo investigaremos y luego se lo devolveremos y diremos ‘Sí, es apropiado’ o no”.

El superintendente de las Escuelas de Broward, Peter Licata, habla durante una entrevista con el Herald en el Kathleen C. Wright Building, el miércoles 12 de julio de 2023, en Fort Lauderdale, Fla. MATIAS J. OCNER/mocner@miamiherald.com
El superintendente de las Escuelas de Broward, Peter Licata, habla durante una entrevista con el Herald en el Kathleen C. Wright Building, el miércoles 12 de julio de 2023, en Fort Lauderdale, Fla. MATIAS J. OCNER/mocner@miamiherald.com

Del mismo modo, Dotres dijo que las respuestas a las objeciones sobre libros nunca deben ser “decisiones en solitario”. Dijo que siempre deben participar varios expertos que conozcan la calidad del material y determinar descifrar si es legal o no.

Cuando se le preguntó si le preocupaba que la censura pudiera perjudicar a los estudiantes, dijo que no deberían tener problemas si el distrito maneja cada impugnación “muy intencionadamente y con mucha atención”.

“Debemos poder crear las mejores oportunidades para nuestros estudiantes”, dijo. “Debemos hacerlo”.

El superintendente de las Escuelas de Miami-Dade, José Dotres, frente a un mensaje inspirador mostrado a unos 450 nuevos maestros en la orientación de nuevos maestros en la Preparatoria Hialeah Gardens, el lunes 7 de agosto de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com
El superintendente de las Escuelas de Miami-Dade, José Dotres, frente a un mensaje inspirador mostrado a unos 450 nuevos maestros en la orientación de nuevos maestros en la Preparatoria Hialeah Gardens, el lunes 7 de agosto de 2023. Carl Juste/cjuste@miamiherald.com