Audiencia por la denuncia de vicepresidenta de Ecuador a presidente será el 8 de noviembre
Quito, 28 oct (EFE).- La audiencia en el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) de Ecuador por la demanda por presunta violencia de género que interpuso la vicepresidenta y embajadora en Israel, Verónica Abad, contra el presidente, Daniel Noboa, y otros miembros de su administración fue aplazada para el viernes 8 de noviembre.
Así lo determinó este lunes el juez Guillermo Ortega, a cargo de la causa, que había programado inicialmente esta audiencia para el jueves 31 de octubre, un día donde el Gobierno ha suspendido la jornada laboral para el sector público y privado, para concretar un puente festivo de cinco días, en medio de las fuertes restricciones energéticas que atraviesa el país.
A la vez que la vicepresidenta Abad ha denunciado a Noboa y a otros integrantes del Gobierno por presunta violencia político de género, desde el Ejecutivo han contrademandado a Abad bajo los mismos términos.
Además de a Noboa, la demanda de Abad también incluye como acusados a la ministra de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Gabriela Sommerfeld, a la asesora presidencial Diana Jácome y al viceministro de Gobierno Esteban Torres.
La vicepresidenta ha acusado a Noboa de estar al frente de un presunto acoso político y hostigamiento contra ella para forzarla a dimitir y evitar así que tenga que delegar en ella las funciones presidenciales conforme contempla la Constitución cuando el gobernante deba pedir licencia para la campaña electoral de los comicios de 2025, donde buscará su reelección.
Abad también ha sido contrademandada por presunta violencia política de género por Sommerfeld y Jácome, quien ha reconocido públicamente que su intención con esta acción legal es precisamente lograr la destitución de la vicepresidenta.
Según la Ley Electoral de Ecuador, la violencia política de género es una infracción muy grave que se sanciona con una multa económica, destitución y/o suspensión de derechos de participación hasta por cuatro años.
El distanciamiento entre Noboa y Abad -evidenciado desde la segunda vuelta de las elecciones presidenciales extraordinarias de 2023- se agudizó cuando, al asumir el cargo, el gobernante le asignó funciones como embajadora en Israel para promover la paz entre israelíes y palestinos.
Abad interpretó esta designación como embajadora como un método para alejarla del país y de la gestión del Gobierno, pues en caso de negarse podía ser destituida.
Desde el Gobierno consideran que Abad no ha actuado bien y sacan a colación el caso de posible corrupción en las oficinas de la Vicepresidencia donde está imputado su hijo Sebastián Barreiro por supuestamente influir en la contratación de un funcionario y exigir a cambio parte de su sueldo.
La Fiscalía solicitó el levantamiento de la inmunidad a Abad para imputarla también en este caso, pero el pedido fue rechazado por el pleno del Parlamento con los votos en mayoría de la oposición, frente a los apoyos obtenidos a favor del oficialismo.
(c) Agencia EFE