Ataques aéreos israelíes dejan al menos 78 muertos en Gaza

Por Nidal al-Mughrabi, Bassam Masoud y Dan Williams

EL CAIRO/GAZA/JERUSALÉN, 25 dic (Reuters) - Ataques aéreos israelíes dejaron al menos 78 muertos en Gaza, según responsables sanitarios palestinos, en una de las noches más mortíferas en el enclave asediado durante la actual batalla de Israel contra Hamás.

Los ataques, que comenzaron horas antes de la medianoche, continuaron hasta el lunes, día de Navidad. Residentes y medios palestinos dijeron que Israel intensificó los bombardeos aéreos y terrestres contra al-Bureij, en el centro de Gaza.

El papa Francisco lamentó que el mensaje de paz de Jesús estuviera siendo ahogado por la "lógica inútil de la guerra" en la misma tierra donde nació.

Al menos 70 personas murieron en un ataque aéreo israelí contra Maghazi, en el centro de Gaza, dijo el portavoz del Ministerio de Salud, Ashraf Al-Qidra, añadiendo que muchos eran mujeres y niños.

Los residentes locales de los campos de refugiados del centro de Gaza dijeron que habían vivido una de sus peores noches desde que comenzó la guerra. Aviones y tanques israelíes llevaron a cabo decenas de ataques aéreos contra casas y carreteras en los campos de refugiados de al-Bureij, al-Nusseirat y al-Maghazi.

Varios residentes pidieron en las redes sociales que alguien les proporcionara alojamiento, ya que se han quedado sin hogar después de abandonar sus hogares en Bureij.

"Tengo 60 personas en la casa, personas que llegaron a mi casa creyendo que la zona central de Gaza era segura. Ahora estamos buscando un lugar al que llegar", dijo Odeh, residente de los campos de refugiados.

El ejército israelí dijo que estaba revisando la información de un incidente en Maghazi y que estaba comprometido a minimizar el daño a los civiles. Hamás niega la acusación israelí de que opera en zonas densamente pobladas o utiliza a civiles como escudos humanos.

La Media Luna Roja Palestina publicó imágenes de residentes heridos que eran transportados a hospitales. Dijo que aviones de combate israelíes estaban bombardeando las carreteras principales, obstaculizando el paso de ambulancias y vehículos de emergencia.

Fuentes sanitarias dijeron que un ataque aéreo israelí en Jan Yunis, en el sur de Gaza, mató a ocho palestinos.

El clero canceló las celebraciones en Belén, la ciudad palestina de Cisjordania ocupada por Israel donde según la tradición cristiana nació Jesús en un establo hace 2.000 años.

"Esta noche, nuestros corazones están en Belén, donde el Príncipe de la Paz es una vez más rechazado por la lógica inútil de la guerra, por el choque de armas que aún hoy le impide encontrar un lugar en el mundo", dijo el papa en la misa de Nochebuena en la Basílica de San Pedro en Roma.

Cristianos palestinos realizaron una vigilia navideña con velas en Belén con himnos y oraciones por la paz en Gaza, en lugar de las celebraciones habituales.

No había ningún árbol de gran tamaño, pieza central habitual de las celebraciones navideñas de Belén. Se colocaron figuras de la Natividad en las iglesias entre escombros y alambre de púas en solidaridad con el pueblo de Gaza.

CONDICIONES CATASTRÓFICAS

Se cree que Hamás y sus aliados de la Jihad Islámica, ambos comprometidos con la destrucción de Israel, tienen más de 100 rehenes de entre los 240 que capturaron durante su ataque contra ciudades israelíes del 7 de octubre, cuando mataron a 1.200 personas.

Desde entonces, Israel ha sitiado la estrecha Franja de Gaza y ha arrasado gran parte de ella, con más de 20.400 personas confirmadas muertas, según las autoridades de la Gaza (gobernada por Hamás), y se cree que miles más han muerto bajo los escombros.

La gran mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza han sido expulsados ​​de sus hogares y Naciones Unidas dice que las condiciones son catastróficas.

Desde que a principios de mes terminó una tregua de una semana, los combates no han hecho más que intensificarse en el terreno, y la guerra se ha extendido desde el norte de la Franja de Gaza hasta todo el enclave.

El ejército israelí dijo el lunes que dos de sus soldados habían muerto el día anterior, elevando a 158 el número de muertos desde que comenzaron las operaciones terrestres el 20 de octubre.

El primer ministro Benjamín Netanyahu dijo a su gabinete el domingo que "la guerra nos está cobrando un coste muy alto. Sin embargo, no tenemos otra opción que seguir luchando".

Netanyahu dijo en un mensaje en vídeo que las tropas lucharían más profundamente en Gaza hasta lograr una "victoria total" sobre Hamás.

Israel ha estado bajo presión de su aliado más cercano, Estados Unidos, para cambiar las operaciones a una fase de menor intensidad y reducir las muertes de civiles.

El sábado, el jefe del Estado Mayor militar de Israel dijo que sus fuerzas habían logrado en gran medida el control operativo en el norte de Gaza y que ampliarían las operaciones más en el sur.

Sin embargo, residentes consultados dicen que los combates sólo se han intensificado en los distritos del norte.

Los esfuerzos diplomáticos, mediados por Egipto y Qatar, con vistas a lograr una nueva tregua y liberar a los rehenes restantes retenidos en Gaza han producido pocos avances públicos, aunque Washington describió las conversaciones de la semana pasada como "muy serias".

La Jihad Islámica dijo que una delegación encabezada por su líder exiliado Ziad al-Nakhlala estuvo en El Cairo el domingo. Su llegada se produjo tras unas conversaciones a las que asistió el jefe de Hamás, Ismail Haniyeh, en los últimos días.

Los grupos milicianos han dicho que no discutirán ninguna liberación de rehenes a menos que Israel ponga fin a su guerra en Gaza, mientras que los israelíes dicen que sólo están dispuestos a discutir una pausa en los combates.

(Información de Nidal al-Mughrabi en El Cairo, Bassam Masoud en Gaza, Dan Williams en Jerusalén; Información adicional de Philip Pullella en Roma, Nafisa Eltahir en El Cairo y Trevor Hunnicutt en Washington; Escrito por Humeyra Pamuk y William Mallard; Editado por Howard Goller y Edmund Klamann y Michael Georgy, Kirsten Donovan; editado en español por Tomás Cobos)